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El NIÑO Y LA CICATRIZ

Un niño tenía una cicatriz en la cara, la gente del colegio no hablaban con él ni se sentaban a su lado, en realidad cuando los compañeros del colegio lo veían, fruncian la frente debido a la cicatriz que era muy fea... entonces la clase se reunió con el Profesor y se sugirió que el niño de la cicatriz no fuera más al colegio, el profesor se llevó el caso a la junta del colegio.

La junta escuchó y llegó a la siguiente conclusión: Que no podría sacar al niño del colegio y que conversaría con el niño para que fuera el último en entrar en el aula y el primero en salir, de ese modo ningún alumno vería la cara del niño, a menos que miraran hacia atrás.

El profesor encontró la magnifica idea de la junta, sabía que los estudiantes no mirarían hacia atrás.

Llevado al conocimiento del niño, de la decisión, él rápidamente aceptó la imposición del colegio pero con una condición: Que él vendría al día siguiente delante de todos los compañeros del colegio para decir el porqué de esa cicatriz, su historia.
La clase aceptó.
Al día siguiente el niño entró y se dirigió por delante del aula y comenzó a contar:
¿Saben clase?, te entiendo. Esa cicatriz es muy fea, pero así es como la adquirí:
Mi mamá era muy pobre y para ayudar en la alimentación de la casa ella lavaba ropa afuera... yo tenía alrededor de 7 o 8 años de edad... (la clase estaba en silencio atento a todo...) el niño continuó:

- Además de mí, tenía 3 hermanitos más, uno de 4 años, otro de 2 años y una hermanita de solo unos días de vida.. (silencio total en la sala). Ahí fue cuando no sé cómo nuestra casa que era simple y toda de madera comenzó a prenderse en fuego.. mi madre corrió hasta la habitación en la que estábamos, agarró a mi hermano de 4 años, el de 2 años y a mí por el brazo y nos llevó afuera, había mucho humo, las paredes que eran de madera agarraban fuego y estaban muy calientes... mi madre me puso sentado en el suelo afuera junto a mis dos hermanos y me pidió que me quedara allí hasta que ella volviera, porque mi mamá tenía que volver a casa y sacar a mi hermanita que aún quedaba en la habitación en llamas...

Solo que cuando mi madre intentó entrar en la casa en llamas, las personas que estaban allí ayudando a apagar el fuego no dejaron que mi madre entrará por mi hermanita y yo veía a mi madre gritar: "¡Mi hija está dentro"!.
Vi en la cara de mi madre la desesperación, el horror.

Ella gritaba, pero esa gente no dejaban a mi madre buscar a mi hermanita.
Ahí es donde me decidí: Dejé a mis hermanos y les dije que no se movieran hasta que yo regrese, salí entre la gente y sin que ellos se dieran cuenta entré a la casa en llamas... había mucho humo, estaba todo muy caliente, mucho calor pero tenía que conseguir a mi hermana.

Sabía la ubicación de la habitación en la que ella estaba. Cuando llegué a la habitación, ella estaba envuelta en una sábana y lloraba mucho.
En ese momento vi algo cayendo del techo y luego me lancé sobre ella para protegerla y esa cosa caliente tocó mi cara. (la clase estaba quieta, atenta al niño y avergonzados) eso hace varios años.
Entonces el niño continuó: Ustedes pueden hasta encontrar fea esa cicatriz, pero hay alguien en la en casa que la encuentra hermosa y todos los días cuando llego, ella, mi hermanita la besa porque sabe que es...la marca del amor.

Moraleja: jamás juzgues a nadie por su físico, lo que realmente vale como ser humano son nuestras almas.
Créditos a su autor ❤️🌸

(frases de "El Secreto)
Eddy Contreras.