Ruy López-Nussa y La Academia

Ahora que y presentarán este sábado su primer video clip, a las 10 de la noche en la pizzería-restaurante Vitanuova, en El Vedado, vale la pena seguir compartiendo imágenes de la trayectoria del experimentado baterista y miembro de una familia fecunda de la cultura cubana. Estas fotos son de cuando él tocaba en con , y . !Qué cuatro, verdad?!
Hay aquí fotos en Cuba, España, durante viajes, reuniones, hasta en un juego de fútbol.
Me place mucho compartir estas imágenes. En algunas aparece el talentoso y humano , fallecido en 2014 a los 51 años e inolvidable para quienes amamos la canción pensante, y a quien acompañó varios años.
Hay un DVD que documenta, gracias a la constancia y el empeño de , la etapa de esta agrupación que hizo una música con una calidad y una complejidad difíciles de imaginar, nada más y nada menos que en los durisimos años 90 en Cuba.

Aquí van estas otras imágenes del baterista Ruy López-Nussa, luminaria de la percusión, en especial de la batería, un instrumento del que se enamoró cuando era niño y con el que ha mantenido una lealtad que solo saben construir los amores sólidos.
Aquí aparece Ruy tocando con Pedro Luis Ferrer, una de las agrupaciones que no olvida debido a la buena música y al rigor con que la concebían, primero que todo Pedro Luis, alguien que, según Ruy, se toma el arte con mucha seriedad.
Aquí, en la primera foto, aparece con Pedro Luis, Panchito Bejerano y Silvia Acea en Alemania, y en la otra comparte escenario en Perú, con los músicos de esa agrupación, que se ganó un lugar en la historia de la música cubana.

y mi perfil de Facebook seguimos de buen gusto compartiendo con ustedes imágenes de la trayectoria musical de Ruy López-Nussa, notable percusionista y profesor y miembro de una familia de sólida raigambre musical. Aquí van otras fotos de su grupo La Academia en su primer formato, durante un ensayo para el disco Remembrence, el primero del conjunto de Ruy, con la participación del jamaicano Everton «Pablo» Paul. Las fotos son de Nacho Vázquez.

Amigos: esta imagen de Nacho Vázquez que comparto con ustedes simboliza el inicio de Ruy López-Nussa y La Academia. Aquí está la agrupación original, que hizo el disco Remembrance con el jamaicano Everton «Pablo» Paul, un conjunto de temas que resiste las corrosiones del tiempo porque fue concebido para reverenciar a la música.
Ahora que López-Nussa y La Academia están celebrando sus 10 años sobre los escenarios, vale la pena este homenaje a aquellos días, a los primeros, a la primera formación de La Academia.

Delante, de izquierda a derecha:

Otto Santana Selis, Wendy Vizcaíno, David West, Roberto García, Susan Santana Selis, Michel Ruiz García, Jorge Luis Pacheco

Detrás, de izquierda a derecha:

Luis Izquierdo, Alieni Abreu, Ruy López-Nussa, Iván Ivanovich
Octavio Rodríguez, Everton «Pablo» Paul

La página Ruy López-Nussa y La Academia -- y mi perfil en Facebook continuamos la publicación de una galería de imágenes de la carrera de este notable baterista cubano, a propósito de los 10 años que están cumpliendo él y su agrupación.
La sesión inició el domingo pasado con una foto de Ruy y uno de sus alumnos en la escuela de arte de Pinar del Río, a la que López-Nussa fue a parar con 18 años de edad a cumplir su servicio social como profesor. Hoy, va la segunda foto, esta con varios de sus alumnos en la mencionada escuela.
Varios de esos muchachos hoy son músicos de carrera rutilante, otros cambiaron la música por profesiones diferentes, algunos porque quisieron, otros por torpezas y absurdos de aquella época que les impidieron continuar el nivel medio en la Escuela Nacional de Arte.
De izquierda a derecha: Juan Carlos Chacón, Pedro Maciñeiras, Humberto Díaz, Mario Vizcaíno -es decir, yo- Raúl Chala, Mario Rivera, y por mucho que quiero, no puedo recordar a los otros dos muchachos. Me disculpan. Detrás de todos nosotros está, por supuesto, Ruy.

La página Ruy López-Nussa y La Academia -- y mi perfil en Facebook continuamos la publicación de una galería de imágenes de la carrera de este notable baterista cubano, a propósito de los 10 años que están cumpliendo él y su agrupación.
La sesión inició el domingo pasado con una foto de Ruy y uno de sus alumnos en la escuela de arte de Pinar del Río, a la que Ruy fue a parar con 18 años de edad a cumplir su servicio social como profesor. Hoy, va la segunda foto, esta con varios de sus alumnos en la mencionada escuela.
Algunos de esos muchachos hoy son músicos de carrera rutilante, otros cambiaron la música por otras profesiones, algunos porque quisieron, otros por torpezas y absurdos de aquella época que les impidieron continuar el nivel medio en la Escuela Nacional de Arte.
De izquierda a derecha: Juan Carlos Chacón, Pedro Maciñeiras, Humberto Díaz, Mario Vizcaíno -es decir, yo- Raúl Chala, Mario Rivera, y por mucho que quiero, no puedo recordar a los otros dos muchachos. Me disculpan. Detrás de todos nosotros está, por supuesto, Ruy.

La página sobre Ruy López-Nussa que yo administro desde mi perfil de Facebook y la mía personal, mientras aquella se hace más conocida, comienzan a publicar una galería de imágenes que documentan la trayectoria profesional de este talentoso baterista y profesor, miembro de la ilustre familia López-Nussa -que además integran Ernán, Harold y Ruy Adrián.
Ruy López-Nussa y La Academia están terminando de cumplir 10 años sobre los escenarios, una buena razón para que los amigos de Facebook y, de paso, algún que otro posible enemigo, le echen un vistazo, por medio de imágenes, a la historia musical de quien ha trabajado, entre otros, con Pedro Luis Ferrer y Santiago Feliú.
Pero que además tiene una trayectoria como profesor digna de destacar, a la que se entregó desde que concluyó nivel medio en la Escuela Nacional de Arte y lo enviaron a hacer servicio social a la escuela de arte de Pinar del Río.
En la imagen con que inauguro esta exposición, que poco a poco irá dejando fotos de su trayectoria a modo de narración, aparece Ruy, que aquí tiene 19 o 20 años -mediados de los años 70-, en una descarguita didáctica con uno de sus alumnos en Pinar del Río, Pedro Maciñeiras.

La página sobre Ruy López-Nussa que yo administro desde mi perfil de Facebook y la mía personal, mientras aquella se hace más conocida, comienzan a publicar una galería de imágenes que documentan la trayectoria profesional de este talentoso baterista y profesor, miembro de la ilustre familia López-Nussa -que además integran Ernán, Harold y Ruy Adrián.
Ruy López-Nussa y La Academia están terminando de cumplir 10 años sobre los escenarios, una buena razón para que los amigos de Facebook y, de paso, algún que otro posible enemigo, le echen un vistazo, por medio de imágenes, a la historia musical de quien ha trabajado, entre otros, con Pedro Luis Ferrer y Santiago Feliú.
Pero que además tiene una trayectoria como profesor digna de destacar, a la que se entregó desde que concluyó nivel medio en la Escuela Nacional de Arte y lo enviaron a hacer servicio social a la escuela de arte de Pinar del Río.
En la imagen con que inauguro esta exposición, que poco a poco irá dejando fotos de su trayectoria a modo de narración, Ruy, que aquí tiene 19 o 20 años, en una descarguita didáctica con uno de sus alumnos en Pinar del Río, Pedro Maciñeiras.

Del lobo, un pelo, dice el refrán. Ruy López-Nussa y La Academia no logran que el sello Colibrí ponga en el mercado uno de cuatro discos que les ha grabado, ni siquiera ahora que están celebrando diez años sobre los escenarios, pero al menos tendrán su primer video clip, y eso facilitará que el gran público los conozca, o mejor: los conozca más...
Estaré allí para documentar con imágenes ese suceso, pues no caben dudas de que es un acontecimiento que una agrupación como esta, integrada por músicos excepcionales, haga su primer video clip luego de diez años haciendo música cubana de la mejor.
Así que el martes próximo en La Habana, en El Vedado específicamente, Ruy López-Nussa, Roberto García, Maikel González, Arnulfo José Guerra, Octavio Gutiérrez y Alberto Luis Cuenca ¡filmarán su primer video clip!

Ruy López-Nussa y La Academia esta noche a las 10 y 30. En La Zorra y el Cuervo. Música cubana con sabor distinto, y ritmos foráneos a lo cubano, con estilo único. Aún estás a tiempo.

tuvo esta semana 36 nuevas visitas, de manera que esta página va cuesta arriba, y cuando pueda andar por sí sola, administrada desde mi perfil de Facebook, todo lo que ataña a Ruy López-Nussa podrás velo aquí y seguirlo aquí.

La página de Ruy López-Nussa y La Academia que yo administro desde mi perfil de Facebook, sigue cosechando seguidores, y es escaso el día que no tenga nuevos visitantes.

Ruy López-Nussa y La Academia esta noche a las 10 00 en La zorra y el cuervo. Si te los perdiste en Fábrica de arte el sábado pasado, esta es tu oportunidad, para que sientas los ritmos cubanos con concepto jamás pensado.

Ruy López-Nussa y La Academia esta noche a las 11 00 en Fábrica de Arte. Allí será entrevistado este baterista ilustre y luego mostrará con su coherente agrupación lo que son capaces de hacer con los ritmos cubanos y no cubanos.

Fábrica de Arte abre sus puertas este viernes a Ruy López-Nussa y La Academia, que están cumpliendo 10 años sobre los escenarios. Si quiere sentir la música de un grupo capaz de hacer vibrar con una Woman no cry rumbera, vaya a la Fábrica el viernes a las 11 00 de la noche.

Fábrica de Arte, el gran escenario habanero, tendrá este viernes a Ruy López-Nussa y La Academia. A las 11:00 de la noche. Esto es géneros cubanos con otro estilo y varios de por ahí con paladar cubano. Por ejemplo, qué crees de una rumba con Woman no cry? Eso lo hace este piquete.

Ruy López-Nussa y La Academia este viernes a las 11:00 de la noche en Fábrica de Arte. Ritmos cubanos de otra manera, géneros extranjeros con sello propio. Compruébalo el viernes.

Hay que celebrar que, !por fin!, el canal Clave de la televisión cubana comenzó a pasar un concierto de Ruy López-Nussa y La Academia, filmado en el estudio de Ruy.

Ruy López-Nussa y La Academia esta noche a las 10 en La zorra y el cuervo. Música cubana de otra manera, y géneros de otros sitios al modo cubano. Una propuesta que vale la pena.

Ruy López-Nussa y La Academia mañana a las 10 de la noche en La zorra y el cuervo. Música cubana de otra manera, y géneros de otros sitios al modo cubano. Una propuesta que vale la pena.

Esta página sigue atrayendo a seguidores de Ruy López-Nussa y La Academia, lo cual es very good.

Ahora, cuando Ruy López-Nussa, su hermano y sus hijos intentan conquistar al público japonés y coreano con la música de La Familia, vale la pena compartir con ustedes el texto de Elisa Madelaine Duboué sobre este baterista y su rica trayectoria como instrumentista y profesor. Junto a Ernán, Harold y Ruy Adrián, se presenta hoy, mañana y el sábado en Tokío, y el domingo en Corea del Sur.

Ruy López-Nussa multifacético

Por Elisa Madeleine Duboué

Ruy López-Nussa Lekszycki es uno de los más consagrados y relevantes músicos y percusionistas cubanos que funge, además, como profesor de música y ensayista.

Nació en Ciudad de México en el año 1957 y, al año siguiente, se trasladó, en unión de su familia, para La Habana.

Según el propio Ruy, sus padres, amigos y profesores fueron imprescindibles no solo en los inicios de su carrera sino también en su posterior formación como músico. No es por gusto, entonces, que en el año 1976 termine el nivel medio de música en la especialidad de percusión y en 1982 concluya sus estudios en el Instituto Superior de Arte.

Ese mismo año comienza su labor como docente en la Escuela Provincial de Arte de Pinar del Río y, de regreso a la capital, integra primero el claustro de profesores del Conservatorio Alejandro García Caturla y posteriormente el del Conservatorio Amadeo Roldán.

Recorriendo caminos

La carrera profesional de Ruy López-Nussa ha sido extensa y diversa. Se inició como baterista de un joven grupo de rock y luego, como acompañante de la insigne cantante Beatriz Márquez, resultó tener una trayectoria excelente.

También su integración al grupo liderado por el compositor y guitarrista Pedro Luis Ferrer marcó un hito en su vida artística. Es en esta etapa internacionalmente que participa en la grabación de uno de sus fonogramas más conocidos:. En espuma y arena

Pero sin duda alguna La Academia constituye su obra maestra, un proyecto creado y dirigido por él donde, además, funge como baterista. Le acompañan en esta agrupación excelentes músicos (trompetistas, pianista, bajista, saxofonista, percusionista y cantante) que defienden fervientemente la música fusión.

Es con esta agrupación que lanza su fonograma Ruy López-Nussa presenta La Academia, nominado en el Cubadisco 2015 en la categoría de Jazz cubano.

Giras y festivales
Las giras por diversos países y el compartir escenarios con otros artistas no le han permitido un minuto de descanso:

Con el trovador Santiago Feliú (Colombia y Argentina).
Con el Grupo Estado de Ánimo (III Festival de Jazz de Barcelona y en Galicia, España).
Con Ramón Valle y su grupo Brújula (Festival de Jazz de Bogotá, Colombia).
Con el Grupo Temperamento (Italia y Suiza).
Con el pianista y compositor Ernán López-Nussa (Ecuador).
Y de su participación en festivales qué se puede decir:

Festival Internacional de Varadero.
Concurso y Festival Internacional de Guitarra de La Habana.
Festival CICLA en Perú.
Festival Mundial de la Juventud y los estudiantes en República Democrática Alemana.
Festival del Periódico “El Día” en Ciudad de México.
Festival Jazz Plaza junto a Airto Moreira, Irakere, Afrocuba y Sampling.
Otra de sus múltiples facetas
Ruy López-Nussa es, además, un excelente escritor y ensayista. Y lo ha demostrado con su volumen “Ritmos de Cuba. Percusión y batería”, gran herramienta para estudiantes de música o para cualquier interesado en el tema. En el texto se reúne de forma didáctica el acervo de la percusión en la Isla dirigido, principalmente, a la batería.

Escrito con un lenguaje ameno y atractivo su autor expone, sin tecnicismos, los variados ritmos que se generan al combinar la percusión afro-cubana con la batería. Pero a su vez mezcla esta riqueza rítmica con arreglos que se nutren del jazz y otras corrientes musicales.

Treinta y seis años de entrega sin límites y la influencia que ha ejercido en la música cubana demuestran que Ruy López-Nussa es de esos hombres a los que el tiempo sorprende por la magnitud de su legado.

Sobre la autora:
Elisa Madeleine Duboué Molter es ingeniera de profesión y amante de la literatura, el cine y la música. No se limita en su desarrollo, ni se restringe en su aprendizaje en lo que se refiere al conocimiento de la música cubana.

Señoras y señores: La Familia López-Nussa sigue escalando peldaños y mañana, el viernes y el sábado se presenta en el Blue Note de Tokío. Y el domingo se van a Corea del Sur.

Los López-Nussa se van a Japón y Corea del Sur a expandir su buenísima música. Desde el jueves hasta el domingo. La Familia está que no se quiere y luego de deslumbrar a multitudes en cuatro festivales de jazz en Colombia, a mediados de septiembre, ahora es Asia el destino.

La Familia López-Nussa en el Blue Note de Tokío, 3, 4 y 5 de octubre, y el 6 en Corea del Sur.

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Ruy López-Nussa y La Academia esta noche a las 10 en La Zorra y el cuervo, en El Vedado habanero. Repertorio cubano con conceptos diferentes, y ritmos de cualquier lugar con sabor cubano.

Esta página, que administro desde mi perfil de Facebook, sigue ganando seguidores. No tiene dos semanas aún y la están siguiendo medio centenar de amantes de la música que hacen Ruy López-Nussa y La Academia, o que gustan de la que idean todos los López-Nussa, una familia que de músicos espectaculares.

Ruy López-Nussa y La Academia, su formidable agrupación, no pierden las esperanzas de ver en el mercado, antes de fin de año, al menos uno de cuatro discos grabados con el sello Colibrí. Y esas esperanzas se basan en que está corriendo el año en que cumplen una década sobre los escenarios, y les parece lógico que sea un pretexto profesional para que aparezca al menos un disco. Qué les parece a los amigos de Facebook?

Ruy López-Nussa y La Academia esta noche a las 10 30 en el club habanero La zorra y el cuervo, uno de sus sitios habituales. Como siempre, música cubana hecha con gusto y rigor.

Este martes 17 de septiembre Ruy López-Nussa hablará con el periodista y crítico Fernando Rodríguez Sosa durante el programa Estaciones de Radio Rebelde. Si sintonizas a las 10 30 de la noche escucharás a un Ruy acabado de regresar de Colombia, donde tocó, con su hermano Ernán y sus hijos Harold y Ruy Adrián, en cuatro festivales de Jazz celebrados durante una semana en diferentes ciudades colombianas.

Los últimos tres meses de 2019, esta página publicará decenas de fotografías que documentan la carrera de Ruy López-Nussa, uno de los más talentosos y dedicados bateristas de Cuba. Hermano de Ernán, padre de Harold y Ruy Adrián, Ruy ha puesto su talento creativo a varias agrupaciones, desde la de Pedro Luis Ferrer hasta Estado de Ánimo acompañando al siempre extrañado Santiago Feliú. Hace 10 años decidió emprender camino propio y creó La Academia, una agrupación que toca ritmos cubanos con un concepto que tiene prohibida la complacencia, un concepto cuya palabra primera es el rigor.

Esta página, Ruy López-Nussa y La Academia, que tengo el gusto de administrar desde mi perfil en Facebook, ya tiene 36 me gusta. En sólo días. Este es el décimo año de una agrupación que hace música cubana con un sello, y especial, un concepto que no busca complacer, sino g***r la música.

Muchísimas gracias a las casi 30 personas que en pocos días han visto esta página y han marcado su gusto por ella. Las gracias en nombre de Ruy López-Nussa, los músicos de su agrupación formidable, La Academia, y en el mío propio.

Gracias a las primeras 10 personas que dijeron que les gusta esta página

Ruy López-Nussa y La Academia's cover photo

Es La Familia. Porque se llaman así cuando se unen para tocar y porque son un orgullo de las familias cubanas. En el teatro Martí los López-Nussa deslumbraron al público con una maestría que conduce a la reverencia.
La presentación, también con el trompeta Maikel González y el bajista Julio César González, ambos de oro, dejó ver a un Harold en el piano y a un Ruy Adrián en la batería y el cajón incansables en lo que parece una decisión personal de ir siempre hacia adelante: el progreso en sus carreras es indiscutido. En una de las piezas, Ruy Adrián acompañó con el cajón a su hermano Harold y demostró ser uno de esos jóvenes que no sacian su sed musical hasta dominar todos los instrumentos que puedan. Como advierte Ernán en un dvd dedicado a ellos, gracias al piano que estudió Ruy Adrián, toca una batería genial, «o el cajón, el bongó o lo que le pongan en las manos».
De Ernán no hay tanto que decir más allá de lo mucho que se ha escrito en torno a su talento creativo tocando el piano y componiendo piezas como Figuraciones o Dinga, Dongo, Dunga, interpretadas la noche del sábado con su acostumbrada ejecución de brillo.
En cuanto a Ruy, hecho ya un decano de los bateristas cubanos, solo es posible seguir admirándolo desde la limpieza de su modo de tocar la batería, un estilo que sigue combinando con su pasión por la enseñanza, apoyado en un libro sobre ritmos cubanos en la percusión que escribió y que, por cierto, aún padece una espera larga para su publicación en Cuba.
El programa, similar al que interpretaron en Washington el año pasado durante el festival Artes de Cuba, fue tan variado como profesional y fresco, concebido con la sencillez del buen arte, que sabe vibrar sin alardes ni poses.
Como los cuatro López-Nussa componen, el programa estuvo marcado por piezas de cada uno de ellos, a las que agregaron del puertorriqueño Rafael Hernández y el estadounidense Wayne Shorter, de modo que de principio a fin el repertorio fue como de marcha de caballería.
Al concluir el recital, la euforia del público llegaba hasta el escenario, donde los López-Nussa, Maikel y Julio César González recogían la cosecha y se despedían, con lo cual daban la única señal de congoja: acaba el sueño, hay que volver a la realidad.

Los López-Nussa, una familia musical para reverenciar todo el tiempo, en el escenario tras concluir un concierto en el teatro Martí, en La Habana. Afuera, el público no parecía con deseos de marcharse, como si esperara que salieran para agradecerles tanto gozo.

Ruy López-Nussa y La Academia