El Club de los Escritores

Y cuando tú dejaste de llamar....yo dejé de escribir...

NO MAS PROMESAS

Allí estaba, en esa noche cerrada, de cuerpo presente, sin moverse, sin respirar, inmóvil. A su alrededor se respiraba la nada, el vacío mientras lo contemplabas. Nada enturbiaba su descanso que parecía eterno, sin mirar el pasar del tiempo.

Estaba sereno, o esa era la sensación que trasmitía a quien lo mirase, aunque sólo un par de ojos lo hacía de vez en cuando, los de su dueño.

Había sido un día cómo otro cualquiera, de casa al trabajo y vuelta al lugar de origen. Todo normal.

Hablara con ella brevemente quedando, ella, en hacerle una llamada al salir del trabajo creando expectativas que dibujaban una sonrisa en su alma.
Se conocían desde hacía décadas aunque, sus vidas apenas se habían cruzado dado que navegaban por ríos totalmente diferentes y opuestos encontrándose, una vez más, por cosas del destino.

La hora llegó....y nada sucedió. El sonido de llamada no cobró vida dando aviso de lo que esperaba sin muchas esperanzas, es decir, verla en la pantalla. El cuerpo del movil seguía sin vida, sin vibrar, sin emitir. Brevemente, un suspiro invisible y mudo cruzó su mente para morir ahogado sabiendo que ya no era sorpresa lo sucedido. Atrás quedaban los ecos de tiempos no muy lejanos dónde las risas eran las guionistas de sus vidas.

Por ella, él habría escrito los más hermosos versos en su corazón, por ella habría compuesto las más grandes melodías jamás imaginadas y, por ella habría sido la reencarnación de Picasso o del mismísimo Dalí pero, ella no lo veía, no abría los ojos hacia él...la oscuridad reinaba en aquella dirección.

La tarde trascurrió sin sobresaltos en el trabajo, con su rutina de siempre, con la misma gente de siempre sucediéndole la noche, fría y solitaria en su casa.

Él miró, de lejos, al móvil, que seguía sin dar señales de vida por ella, y pensó....no más promesas, don't cry....levantándose de su sofá dirección su alcoba, decidió dar el día por concluido mientras guardaba su corazón en un cofre al lado de los restos de una lágrima seca.

MI AMIGA

La llave giró y, empujando la puerta, entraste en tu casa. Las paredes no pronunciaron nada, nunca lo hacian pero, el vacío del que hablaban, entre ellas en silencio, nacía del interior de ti ocasionándote sensación de ahogo permanente.

Dos palabras, una frase. Ese era el resumen de todo. Dos palabras unidas que hablaban de lo que había en las profundidades de tu interior.

Aún no habían sido pronunciadas pero, ya las sentías vivas. Sabías de sus ganas de vivir aún cuando no habían visto los rayos del día. Notabas sus latidos pero, las dejabas encerradas en su prisión imaginaria para no romper el hechizo que vivías con aquella maravilla mujer, en otro momento odiada pero, ahora querida.

Su voz te hacia estremecerse hasta las más gruesas de las paredes de tu coraza, tiempo atrás construida para no volver a sentir dolor ni llantos por la persona equivocada. Ella te hacía sentir vivo aún en la distancia.

Su imagen y recuerdos representaban tu deseo por sentir los cálidos brazos de una oportunidad para que, la soledad de tu vida desapareciese mirando al futuro con la esperanza cómo vestimenta.

No era amor lo sentido por ti. Eran dos sencillas, pequeñas, y poco importantes palabras para mucha gente con el deseo de ser realidad...mi amiga.

MI AMIGA SOLEDAD

Sentí su abrazo, al igual que su presencia, somos viejos conocidos. No la veía, pero sabía que estaba ahí, junto mía, en todo momento.

Suspiré profundamente al mirar a mi alrededor, nada vi, pero sabía de ella. Notaba su sombra dentro de mi mente mientras el sonido del televisor se oía de fondo.

El cansancio del día acabó por envolverme con su capa negra e invisible. Volví a mirar a mi alrededor fijándome en las paredes de mi salón esperando que alguien, con una sonrisa, quizás del pasado, apareciese. Nada pasó, todo era igual que hacía diez minutos, igual que el día anterior, las semanas pasadas...o años ya.

Apagué la caja tonta puesto que nada era interesante cerrando, a continuación la puerta de acceso a mi casa. Pronto mudé la vestimenta por un pijama acostándome buscando un merecido reposo.

Seguía sintiendo su presencia aunque mis ojos no la conseguían ver. Encendiendo mi fiel acompañante la radio, dejé que la luz de la lámpara de techo desapareciese dándole paso al silencioso sonido del Silencio que, con ella, se acostó a mi lado, en mi cama, susurrándome notas hermosas.

Ambos me miraron, lo sé, aunque no los veía. Volví suspirar pensando en el agotador día vivido. Con las voces de fondo del programa radiofónico, abrí los ojos percatándose de la hermosura del manto de la noche imaginándome a la Luna en su trono, cómo faro guía para las aves nocturnas humanas. Dejé caer mi mano derecha a mi lado buscando a alguien que no estaba o que nunca estuvo ahí. Le deseé buenas noches a ella, fiel a acompañante desde años, y amiga mía, de nombre.....Soledad.

LIBERTAD

Y, en ese momento, y en busca de liberarse del sufrimiento existente en, para él, su insignificante vida, el frío acero atravesó su débil carne dando salida al líquido rojo guardado, en ella, haciendo que, sus pulmones, recipientes de ese apreciado elemento llamado Oxígeno comenzasen, poco a poco, a dejar de funcionar mientras que, su apreciado motor 16 válvulas, de potencia incierta y llamado Corazón cesaba, también, paulatinamente, su actividad por no tener suficiente carburante.

Perdonad que no escriba cómo antes pero, con la que está cayendo, es decir, pandemia del Covid-19, y siendo persona de riesgo, la verdad, es que no tengo muchas ganas de hacerlo. No obstante, os he dejado algo ayer.....

Muchísimas gracias por seguirme. Cuidaros todos......Un beso.

VICTIMA?

El ruido sordo, de las cadenas que la maniataban, se dejó oír en mi cabeza. En mi interior, golpes secos y duros, cobraban vida en su blanca y vieja piel a manos del padre de sus hijos, aunque no fuera cierto. Ella, mujer deseable pese a su edad, y demostrando vestigios de una hermosura de juventud, vestía, del color del miedo, y en sus ojos, un paño que le impedía, por momentos, pensar, aunque fuera remotamente, en abrir puertas a una futura libertad fuera del alcance de su carcelero dada la inseguridad reinante en su vida gracias a él.

Sábanas separada, en alcobas separadas, hablaban del frío distanciamiento, entre ellos, reinante en sus días. Más televisores, entre las cuatro paredes, que caricias dadas eran prueba concluyente de que, el amor inicial se había empezado a derritir hacía tanto que ni recordaban cuándo había sido su nacimiento.

Gritos nacían de la nada haciendo imposible una convivencia tan siquiera algo amable. Celos instalados roįan la ya delgada sombra de la confianza, en un pasado, rebosante de salud.

Ser prisionera de sus crueles actos o ser beneficiaria de su existencia. Su decisión fue la menos esperada. La víctima no tan víctima. Aprovecharse de él mientras duraba esa muerte en vida. Ser víctima sin serlo. Esa fue su meta.

MALTRATO

Un grito, lejano, casi mudo ha cruzado, diariamente, tu existencia hasta estos días. Callas, no dices nada, pero lloras, en silencio, maldiciendo tu vida.

Madre, abuela, mujer. Sonrisa por prenda en persona, no aceptas el inicio del fin de todo lo vivido desde joven. Sabes lo que debes hacer, pero te niegas a aceptar la cruel realidad por miedo, tal vez; quizás por comodidad; quizás por el conjunto de varias razones, razones que no obran en mi poder.

Maltrato. Esa palabra cobró vida en tus labios delante mía no hace mucho. Maltrato psicológico de tu marido desde años....pero no, no lo abandonaras pidiendo lo razonable, lo correcto, no pronunciaras esa palabra ya que te aterra vivir por ti misma o quizás por comodidad....divorcio!!

Te aferras, a razones sin peso, para no darte una oportunidad para que lo sol brille de nuevo en tus ojos. Te atenaza el comenzar, de nuevo, en lo que te queda de vida dejando que, gritos, desplantes, contestaciones sigan dictando que hacer.

Camas separadas, amistades distintas, nada que compartir, vidas circulando en sentidos opuestos....ese es el resumen de lo que leemos, a diario, del libro abierto de vuestros cuerpos cuándo estáis juntos y en público. Conversación forzada en los gestos de vuestras miradas mientras se ve el vacío que os une.

Nadie dice nada, pero todos se lo preguntan, que te retiene a su lado?

Cadenas del miedo harán, quizás, que, un día, aparezcas inerte aparezca en el frío suelo de la casa compartida con tu maltratador, tu maltratador personal.

Una firma, en un papel, haría que una luz renovada de fe y esperanza pintase las hojas de tus dias con, quién sabe, la ternura de alguien que sepa los infiernos vividos por ti pero, no, no lo harás, así que, mientras tanto, seré egoísta disfrutando del placer de hablarte deseándote suerte en la vida. Mañana nos veremos....tal vez.

SOLEDAD AMIGA

El largo y gélido abrazo de mi “sombra” me envolvió por completo, sin apenas darme cuenta. Sus fuertes brazos rodearon mi corazón con sonrisa malévola y fantasmal. Yo estaba, sin darme cuenta, a su merced desde hacía mucho tiempo bailando la danza que ella quería.

Atrás quedan sonrisas de blanco inmaculado mientras que ella pinta, en mi universo, oscuridad tras oscuridad en la vida que ella desea para mí. Ya no hay ternura en unos brazos de mujer que sean hogar después de una larga jornada laboral; ya no existe quién te llame preguntándose que tal la reunión con tu jefe; ya no. Sólo queda el enorme vacío que ella llena tu alma, tu hogar, y al cual no quieres regresar puesto que sólo sientes frio entre sus cuatro paredes.

Sonríes mientras dejas que tu dulzura sea trasparente ante los ojos de los demás ciudadanos que pueblan tu rutina habitual y diaria pero, no encuentras quien quiera traspasar esas fuertes murallas viéndote con otros ojos distintos a los de siempre, ojos de invisibilidad e indiferencia.

Muchos son los cuerpos de los sollozos ahogados que deberían haber visto la luz por entre las cascadas de mis ojos. Son aquellos que se podrían ver si traspasasen el umbral de mi ser pero, por desgracia, sólo existo de diez a diez; horario laboral para, luego retirarme a mis aposentos sabiendo que algo me falta, algo añoro, algo en mi está vacío, hueco.

Mirada hacia el infinito, perdida en el horizonte lejano de mis pensamientos. No pienso en ti, en mí, en nosotros, sólo la tengo ausente, fugada y en busca y captura.

Un suspiro cruza todo mi interior recogiendo aire los pulmones hasta llenarse, señal de frustración y aceptación de que, otro día más me acostaré con mi amiga, la Soledad mientras busco un descanso reparador.

DULCE HOGAR

Y miro hacia el más largo infinito de mi vida, que deslumbra los cansados ojos de mi espíritu, sin ver algo distinto a un vacío sin fin.

Por los efectos malditos de ese cáncer maligno y malvado llamado Soledad, asolando hectáreas y hectáreas de mi corazón infectandolo de momentos que clavan su puñal retorciendolo en lo más profundo de mi consciencia sin poder levantar brazo alguno para una débil defensa ,a cada segundo... muero algo más.

Tras los muros de la inmensa fortaleza que protege mi músculo del sentir, yacen, desde tiempos que se pierden en lo más profundo de los tiempos, inocentes esperanzas sin el oxígeno que regó, en su momento, sus venas rojas y entusiastas. Sus cuerpos han quedado soterrados en la oscuridad más dolorosa e impronunciable.

Tú, traidora entre ellas, tenías, en tu mano, el renacer de entre mis cenizas, el nacimiento de una cascada de alegres risas y abrazos eternos, más, decidiste que nada mío era de valor, nada mío era importante y, de golpe, golpe certero para enterrarme vivo, pero mu**to.

Ya no sé si sé algo o simplemente no sé nada de la vida. Pasadas esas horas de perplejidad.....o días... y lo negro no es de ese color bañandose con la calidez de un blanco inmaculado formando un gris que es elegante ante la nueva mirada que asoma después de verse las caras con el vacío de verse despreciado, humillado... hundido.

Dulce el vacío nacido de la Soledad que se queda para endulzar mis sueños y esperanzas entre esas cuatro paredes que forman ese ansiado hogar, mi hogar, dulce hogar.

Gracias a todos por haber llegado a 4700..... muchísimas gracias.

😃

SOLEDAD

En la inmensidad de la felicidad que me embarga, hay un hueco, un vacío que, a veces aparece no dejando de existir atormentando, por momentos, mi espíritu. Esa nada es por la ausencia de alguien que te regale abrazos, caricias, ternura. Deseas que esa persona sea el origen de palabras amables y s**o salvaje mientras te acuestas en esa cama solitaria añorando un hogar con risas y complicidad.

Levanto la mirada y veo el frío de ese espacio sin rellenar ahogando mis ojos al regarlos con lágrimas saladas que me hablan del dolor que habita dentro de mi.

Cama ancha viste mi habitación con colores hermosos mientras el Sol habita en esas cuatro paredes con temperatura agradable pero, la angustia nacida de no tener quién te cuide, hable o anime en momentos duros se cuela, cómo fantasma que aterroriza a niño pequeño, en mi vida.

La nevera casi vacía, y el rastro de apenas comida indican, al visitante ocasional que nunca llega, de la vida inexistente en esa vivienda puesto que, el verlo te recuerda la soledad con la que están pintadas las paredes provocando el nacimiento de grandes suspiros llenos de fatal aceptación o resignación dolorosa.

EL TREN

Castigado a vivir sin el roce de unas palabras amables que acaricien su atormentada alma, vaga, sin rumbo, ese pobre mortal buscando quién le sonría en un triste día, quién aporte calor cuando el frío hiele las mañanas otoñales o quién le susurre actos llenos de ternura a su inocente corazón.

Una mirada cálida que abra el cofre de los sentidos. Sentimientos enterrados a golpes por quienes lo usaron de esparrin riendo de su suerte. Una palabra amable que signifique que le importas, o una llamada anunciándote un te echo de menos....eso añoras, eso deseas....eso lloras.

Huyes hacia adelante, de los brazos de la soledad, para sobrevivir intentado no sucumbir a que, un mar de lágrimas fluya de las cascadas de tus ojos color miel al descubrir la ausencia en tu vida de la persona amada de la que nazcan abrazos que recibir.

La fría cama es fiel reflejo del día a día de tu vida. Trabajo, más trabajo...lágrimas y más lágrimas. Más deseos incumplidos, más nostalgia del falso pasado. Ese cajón sigue vacío esperando huésped. No debe tener prisa por presentarse ante tu llamada, aunque tú sientes que te haces más viejo, sin quererlo, esperándola en el andén, en el que hace tiempo paró el último tren.

RECUERDAS?

Cuerpo herido, por las balas del tiempo, es la carcasa de un espíritu soñador, lujurioso, que busca amar, sentir mientras se deja llevar por el cauce de la vida sin esperanzas ni alegrías.

Nuestras miradas se encontraron empezando a hablar sin pronunciar palabra alguna. Tus ojos volvieron a sonreír al sentir ser libres de ataduras del pasado puesto que, una fresca brisa sacudió tu corazón despertandolo de su letargo. Las cenizas recobraron su llama para calentar tu apagado espíritu. Por un instante, te fundiste conmigo parando el tiempo. Nada importaba, sólo nosotros

Manos expertas, en el arte del placer, siguen en el paro mientras no encuentran persona jurídica nueva con quien volver a trabajar. El óxido del pasar del tiempo sigue agrietando su experiencia hasta su nulidad sin que se percate.

Mi duro puñal está listo para el combate intentando conquistar noches llenas de placeres inconfesables aún no escritos vestidos únicamente con la luz de la Luna y la música de nuestros ojos. Dedos recorriendo las curvas del placer esperan la salida de tus sueños mientras que maltratas esa pasión encerrada en ti. Tu piel habla el idioma de los gemidos pero, por inactividad, sus cuerdas vocales no emiten sonido alguno. Sus cuerpos almacenados en el oscuro desván de tu alma no vieron la luz del día por que los encerrarse para no saber de ellos. Hace años de la última vez que subiste al Edén encerrándote en el recuerdo...

Crónica de una muerte anunciada.

INOCENTE CAFÉ

Querer, amar....sentir. Verbos en frases escritas, soñadas por vidas jamás vividas por muchos de imaginación infinita.

Sonreír, abrazar a alguien que te regale una sonrisa alegrando tu corazón falto de oxígeno durante más tiempo de lo que quisieras decir, recordar.

Una caricia toma vida en el libro invisible en el que guardas tus pensamientos más profundos, íntimos, encerrado bajo sietes llaves en la más profunda de tus cuevas para no volver a sufrir.

Suspiro, es lo que asoma, con su voz, por entre los labios buscando calor para el espíritu que mora en las entrañas del Interior. Mirada encontrada con ella, contigo. Nada se dice, pero todo es sabido.

Dolor, vive en las carreteras de tu red neuronal de información. Deseo es de lo que me hablan tus ojos, con lujuria de fiel acompañante. Esas manos que no recuerdan lo que son las caricias son tus manos. No claves ese puñal en mi puesto que abrirás las puertas al largo mar que habita en tu mirar.

No vivir es lo que has aceptado cuando decides no jugar la partida de ajedrez, que es tu vida, sacrificando a tu reina, tu corazón, defendiendo a tu rey, mientras que tu cuerpo yace moribundo entre las sombras de él mientras eres pasto de la violencia de los peones del rival que ríen viendo los errores que anidan a tu alrededor. Muerte segura.

Tu cansado rostro es fiel reflejo del pasar del tiempo. Mujer bandera, aunque sin saberlo, ha decidido marchitarse cómo rosa blanca al no abrir la puerta prohibida al placer carnal, al amar, al soñar dibujando días felices en las hojas blancas del libro de tu existencia.

Viniste para dar luz a los demás pero, te ahogaste en la orilla de la felicidad, a escasos besos de una sonrisa infinita llena de cómplices momentos. Al final, tu espíritu yace junto al mío, en las cálidas playas del deseo no concebido, mu**to antes de nacer, por culpa de miedos y un papel que hace tiempo perdió su valor, al mismo tiempo que tú perdiste las ganas de sonreír...por un inocente café....

GOTA DE SANGRE.

La sangre recorre lentamente ese vacío que invade las autopistas de lo profundo. Las cicatrices del pasado invaden, a ráfagas dolorosas, los últimos minutos de mi reloj haciéndome saber que la arena de mi existencia está a punto de llegar a su fin. No habrá tiempo extra. El rostro del pasar del tiempo aparece ante mi en ese espejo que vive empeñado en martirizar a mi cansado y endeble corazón. La sangre sigue taponando las salidas de esas sonrisas que se hayan guardadas buscando pareja de baile en la dura existencia del sentir, del amar. Media vida se ve en los surcos que, tu rostro, muestra sin tener en cuenta cuantas lágrimas cobraron vida para llorar, a la luz de la luna, los desengaños del sufrir esperando unos besos jamás dados al calor de unos felinos ojos traicioneros. Amor, muerte y deseo componen, riendo, tus últimas compases de tu última sinfonía. Tú lo sabes y sientes ese frío acero del puñal de la tristeza.

La soledad de tus días te hace recordar que el Sol hace tiempo que no se asoma por entre las ventanas de tu alma y, mientras tanto esa realidad golpea tu ser, esa gota de sangre rojo intenso te hace revivir el día en que sentiste, por última vez, la pasión de una mujer. Sonríes y elevas tu mirada al infinito que llama a las puertas de tus pensamientos. La música de fondo te abraza dando calor, dándote nostalgia. Esos rayos llenos de calidez, llenos de esperanza, no consiguen traspasar el frío tabique que construiste en la fortaleza alzada tiempo atrás en tu interior.

Esa gota resbala del asfalto de tus entrañas y se desliza, lentamente quizás, por entre el espacio neuronal e irracional de tu mente. Vive de ti, respira por ti. La muerte se ha instalado en lo más profundo de la puertas de tu alma. Allá, entre blancas sábanas recién planchadas y con un olor a dulce amanecer, se abriga tu cuerpo esperando ese triste final que desea que lo libere del sentir doloroso que abraza, con ese traje color desesperación, su corazón dañado por esa gota de sangre. ¡No más dolor sin amor! parece decir tu piel llorosa y seca de caricias.. Esa gota de sangre muere entre los brazos invisibles y malévolos de tus recuerdos mientras que tu temor, a la felicidad, echa tierra en la tumba de tu espíritu. Una alma más ha bebido el dulce néctar de la cobarde rendición. Descansa en Paz, viejo amigo.....

SUSPIRÉ

Suspiré levantando la vista hacia ese cielo azul oscuro con inquilinas esponjosas cargadas de aquel líquido elemento que podía limpiar hasta el alma más tenebrosa jamás conocida. Suspiré largamente mientras que mis diminutos pasos cobraban vida y morían en mi caminar, nada más nacer, hasta alcanzar refugio en lo que llamaba mi hogar. Suspiré al darme cuenta de que, por las autopistas de mi frágil, delgado e insignificante cuerpo circulaba, no esa rojiza agua llamada sangre, sino que era algo más siniestro, más tenebroso. Suspiré al darme cuenta de que ya no recordaba el perfume de tu mirada, la elegancia de tu sonrisa o los poros lujuriosos de alguna mujer que hubiera sido mía en un pasado lejano o reciente sino que, aquello que sentía circular sin pagar peaje era un vacío en mi interior cuya longitud no podías saber a simple vista dado que se perdía en sus profundidades. Suspire, en definitiva, al percatarme de que, ese cáncer había, sin darme cuenta yo, infectado mi musculatura, mi corazón, mi mente, mi todo mientras que tenía una vida que no era mía sino de sus legítimas propietarias llamadas “Ignorancia” y “Olvido”. Suspiré al recordar su nombre, cruel pero hermoso …. Soledad.

https://www.casadellibro.com/libro-el-juego-del-angel/9788408081180/1187756

Que forma de escribir de éste hombre...simplemente de diez!!!! Si su primera me gustó, La Sombra de los Vientos, ésta no está muy detrás de ella. Quiero acabar de leerlo para empezar la tercera novela......

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Un viaje a nuestro interior.....Ha de estar en nuestra biblioteca....

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Muy bueno...muy buena trama......También lo recomiendo....Os gustará!!!

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https://es.wikipedia.org/wiki/La_sombra_del_viento

Preciosa, cautivadora, entrañable....sin palabras!!!! Recomendadísimo!!!!

La sombra del viento - Wikipedia, la enciclopedia libre La sombra del viento es una novela de Carlos Ruiz Zafón publicada en 2001, el primer libro de la saga del Cementerio de los libros olvidados y un superventas mundial, con más de quince millones de ejemplares vendidos en 36 idiomas diferentes.[1]​

MI ROPA Y YO.

Mi ropa pronunció tu nombre, Cris, después de haberte ido a la mañana de conocerte. Mi ropa olía a sonrisas cómplices tejidas en los minutos que componen todas las horas que usamos para conocer cada parada del deseo de nuestros cuerpos. Mi ropa, señora de día, fue una furcia desencadenada en tus manos sedientas de lujuria y placer. Mi ropa, hasta ahora fiel a mi cuerpo, deseaba ser retenida por el tuyo para poder grabar, en su memoria, todos los poros de tu universo desnudo y suave. Mi ropa, fría en verano, sentía calor, en sus paredes, no pudiendo resistirse a tus jugueteos amorosos. MI ropa y yo te quisimos cada segundo de cada minuto. MI ropa y yo supimos lo que era tocar el cielo. MI ropa y yo morimos cuando tu partida nos dejó. Mi ropa y yo volvimos nuestras miradas al espejo de las sábanas rotas de la pasión nocturna. Mi ropa y yo….mi ropa ..yo…sin ti, mi final.

Llegando al principio del declive de mi vida puedo disfrutar de mis tres sobrinos que nunca pensé disfrutar. Ahora, cuando ya empiezo a ver que algún brillo asoma la cabeza tímidamente en mi cuero cabelludo, entiendo la famosa frase que los padres dicen a sus hijos de “cuando seas padre me entenderás”.

Me quito el sombrero para aplaudir la labor como padres de mi hermano y su mujer, mi cuñada. Es algo increíble el agotamiento mental, monetario, físico que unos renacuajos hacen sentir a sus progenitores. Es algo sencillamente be***al pero, y ahora empiezo a descubrir el por qué, no se arrepienten de haberlos tenido pese a los innumerables enfados, riñas, castigos, etc a los que se ven obligados, los padres, a someter a sus pequeños.

Los niños pueden ser cansinos hasta la extenuación haciéndote desear un descanso de ellos o, sencillamente desaparezcan un rato de tu vida pero, gracias a ellos, precisamente, te das cuenta de que, esa educación o ese aprendizaje que tú intentas darles aun no siendo sus padres pero si siendo un apoyo básico en su crecimiento es bidireccional, es decir, de doble sentido puesto que, aunque tú, como adulto, intentas educarles en unos principios de respeto al prójimo y de si mismo para que en el futuro sean personas rectas y con valores, te das cuenta de que ellos también te están ayudando a ser mejor persona de lo que eres haciéndote crecer como tal sin que apenas te des cuenta, es decir, madurar con ellos.

Aún recuerdo cuando fueron llegando a nuestras vidas sin que yo le diera mayor importancia dado que, no eran sangre de mi sangre aunque era motivo de gozo para sus padres y que yo jamás he sido muy niñero. Ahora, he de reconocer que no podría vivir sin ellos puesto que han hecho de mi mejor persona al obligarme a aprender a cuidar de ellos partiendo, como todos, de cero. Pueden hacerme enfadar hasta conseguir el castigo que se merecen por su comportamiento inadecuado en un momento dado pero, luego, dicen algo que te hace, sin poder remediarlo, reírte para tus adentros intentando mantener esa postura de autoridad que el momento exige sin duda alguna pero que, sin poder disimularlo, te arranca una sonrisa en tu rostro y, por eso, sabes que deseas momentos como esos toda tu vida puesto que sospechas que ellos saldrán adelante dada su pillería innata mientras que tú sigues con tu declive deseando que, llegado el momento, tus enseñanzas y las de sus padres valgan para algo.

El ser unos buenos padres es algo fundamental para que los niños crezcan sanos de mente y de cuerpo. No todos los padres son “papá y mamá” aunque todos puedan dar vida a un descendiente. He sentido que, aunque no soy padre biológico, si se me permite, pudiera ser mejor “padre” que muchos otros dado que me he sorprendido con mi reacción positiva al estar con niños y, por tanto, considero que es motivo de orgullo.

Opino, acertada o no, que los mayores han de intentar que sus hijos no se aparten del camino correcto, como un árbol cuando se tuerce, enderezándolos siempre que sea necesario intentando, bajo mi punto de vista, que tarden lo máximo posible en perder esa inocencia con la que nacen y que te hace sentirte orgulloso de ellos aun cuando sabes que la perderán si o si siendo sólo cuestión de tiempo.
Solo espero, para finalizar, que los padres de mis sobrinos puedan recibir, cuando lo necesiten, todo ese amor que ellos les dan a sus hijos en estos momentos puesto que sería la señal inequívoca de que hemos hecho bien nuestro trabajo pudiendo descansar en paz y disfrutar algo lo que nos quede de vida.

LA MIRADA

El cruel manto de la invisibilidad cubrió el cuerpo inerte de la mirada de aquel hombre para no volver a ver la luz de su sonrisa reflejada en su rostro. La sombra de lo Oscuro había conseguido apagar la cálida luz que alumbraba aquellos ojos color ternura puesto que, la gris daga atravesó el cuerpo de su amada, fruto del desprecio y la envidia. A lejos se oyeron susurros de la Oscuridad, Reina de la Noche, festejando su amargura en compañía de la Luna, a la que se le escapaba una lágrima por esa mirada dada muerte.

CAMBIO DE TURNO

La dulce Luna estaba sentada en su trono, majestuosamente elegante con su largo vestido blanco hecho de los sueños de los Mortales. A su lado, el Libro Sagrado en el que veía los corazones de los habitantes del planeta Tierra. Un suspiro al aire cobro vida fruto del cansancio mientras lo cerraba lentamente. Su compañero de trabajo llama a la puerta. Toca cambio de turno. El Día ocupará, en breve, su sitio con su vigía en lo más alto mientras que la Reina de la Noche aguardará en sus aposentos la hora de volver a su trono.

YA NO MÁS

La lágrima rodaba por aquél caliente asfalto, fruto de aquél amor prohibido encarcelado bajo llave en el baúl del amargo olvido.
Los recuerdos, cristales rotos de espejos de un tiempo feliz, atormentaban el corazón, bullían acaloradamente buscando una ruta de escape para no morir en el Mar Helado del Tiempo Pasado.

La vida arrancaba una hoja tras otra del calendario en aquella pared de tristes azulejos color blanco. La rutina se había acomodado con puro y whisky en él.

Esa lágrima se reunión, con el resto de sus hermanas una vez pasada esa autopista que eran sus verdes ojos, en aquel invisible frasco transparente que contenía amargura y tristeza a partes iguales en la alacena de sus rojizo musculo, esposo y amante de la diosa Deseo, y con un hijo ilegítimo de la Luna, de nombre Sentimientos, y amigo de la Noche.

Un cortocircuito hizo que la corriente dejase de llegar al centro de su alma y que su bomba dejase de funcionar. Todo estaba condenado a una única salida.

Cerró los ojos, mutilados por el dolor, y lanzó un grito silencioso, lleno de rabia, nacida de sus entrañas más profundas que inundó la vacía estancia de cólera reprimida por sentir las crueles cicatrices de la traición más vil de todas, la de su amada.

El rojo dio paso al gris, para pasar al negro sombrío y siniestro. Tapió, con altos muros, el acceso a la alegría y a la bondad encerrándolas con fuertes grilletes impidiendo cualquier acto de libertad pasional.

La cerilla cobró vida con un fuerte movimiento de la muñeca cayendo lentamente, frame a frame, como en una cámara superlenta dirección al suelo. Las llamas se alzaron majestuosas, viriles, sádicas mientras que purificaban su alma de restos de dolor y llanto amado hasta que las cenizas conquistaron su reino.

Ya no más ataduras, ya no más sufrir, ya no más……tú.