Alime-intención

💛 o un preparado delicioso con múltiples beneficios para nuestra salud.
¿Te gustaría conocer la receta?

Aceptar nuestro cuerpo es darnos el permiso de disfrutar con él. Es ser
capaces de dar y recibir placer en el cuerpo y con el cuerpo, a pesar de no verlo y sentirlo “perfecto”.

La aceptación corporal no es algo absoluto, de blancos o negros, de “me acepto o no me acepto”. Es decir, si un día por ejemplo nos sentimos inseguros/as con la forma de nuestras piernas, no significa necesariamente que ya no nos aceptemos y hayamos fracasado en el proceso.

Cuida de tu cuerpo siempre! Aún en los días complicados en que parece no gustarte alguna parte de él.

En nuestra alimentación, la restricción de alimentos y la compulsividad pueden estar activados por diversos estados o sentimientos que nos lleva a sentir . Algunos estados emocionales son los desencadenantes, e identificarlos nos ayudará a ampliar nuestra autoconsciencia.

Es observarnos todo el tiempo, con una mirada curiosa hacia el aprendizaje, sin juzgarnos y con mucho amor, para poder hacer ese puente entre lo físico y lo emocional y logremos tener una relación sana con la comida y con nuestro cuerpo.

Comer cuando se tiene hambre y dejar de comer cuando uno está saciado parece lógico y natural, sin embargo, en la práctica, esto no es tan sencillo ni tan inmediato, y seguro que podemos reconocernos en algunos de estos comportamientos: comer, aunque nos sentimos llenos, privarnos de comer aun sintiéndonos hambrientos, acabarnos la comida del plato sólo por no tirarla, aunque no nos apetezca, etc.

Muchas veces no somos conscientes de todo lo que hay detrás de la decisión de comer. Si sientes que la comida está ayudándote a sobrellevar algún estado emocional, o bien descubres que estas comiendo aún sin tener hambre, mi sugerencia es "haz una pausa y observa", revisa si lo que estás buscado es sentirte reconfortado, entretenido, estimulado o calmar algún estado de ansiedad o de insatisfacción y estás utilizando la comida con ese fin.

Empezar a identificar tus verdaderas necesidades, te ayudaran a alimentarlas sin la necesidad de comida logrando así una relación saludable con tu cuerpo y los alimentos.

¿Habías escuchado hablar de la kombucha?

Esta antigua bebida fermentada no solo es refrescante, sino que también está cargada de potenciales beneficios para la salud.
Desde mejorar nuestra digestión hasta reforzar nuestro sistema inmunológico, la kombucha se ha ganado un lugar en los corazones (¡y estómagos!) de muchos.

Si aún no la has probado, ¡quizás sea el momento de descubrir lo que te has estado perdiendo!

La verdadera salud comienza con una mente libre de restricciones y pasa por comer de todo.

Una alimentación saludable es flexible e incluye el consumo de muchos alimentos a lo largo de toda una vida.

¡Todos comemos de manera poco saludable de vez en cuando! y es importante que sepas que no pasa nada.

La privación y la convicción de no poder comer lo que uno quiere, lleva a futuros excesos y restricciones aún más perjudiciales. En cambio, podemos sentirnos más satisfechos con menor cantidad si comemos con libertad y disfrutando con atención plena.

"Cada bocado es una oportunidad para nutrir tu cuerpo y tu alma. No te prives, mejor elige con amor y consciencia".

La alimentación consciente nos ayuda a dejar de tener miedo a los alimentos, evita catalogar alimentos y no contempla alimentos prohibidos.
En vez de esto, la alimentación consciente te ayuda a encontrar el equilibrio, en el que puedas consumir de todos los alimentos en cantidades saludables a traves de la escucha de tu cuerpo y con atención plena a las señales de hambre y saciedad.

La es detenernos a darnos cuenta y valorar las cosas que damos por sentadas. Es una fortaleza que configura la virtud de la espiritualidad y trascendencia. Practícala agradeciendo diariamente a tu cuerpo por todo lo que hace por ti.

Cuando estamos intentando cambiar algunos hábitos de alimentación es muy probable que en el proceso pensemos que lo estamos haciendo mal porque nos permitimos comer alimentos que tenemos catalogados como "prohibidos", recuerda que la es aquella que no habla de restricciones y a su vez nos permite conocernos mejor a través de los alimentos.
Si por alguna razón dentro de tu proceso de cambio de hábitos te topas con estos reproches hacia ti mismo, te dejo unos pequeños tips para esos momentos en los que sientes que no todo va bien con tu alimentación, practícalos y veras como poco a poco esos momentos se vuelven más llevaderos.

Recuerda: Cada cuerpo tiene su propia historia, la cual no conocemos, por esto, evitemos dar opinión sobre el cuerpo de los demás.
Aunque tu comentario tenga buena intención no sabemos el impacto que tendrá en otras personas. Siempre asegúrate de que tu comentario haya sido solicitado.
Elige otras maneras de alagar a las personas que quite el enfoque de la apariencia física como:
- Te aprecio mucho.
- Eres un buen amigo.
- Me haces reír.
- Me alegra que te sientas genial.
- Te admiro mucho.
- Disfruto mucho tu presencia.

Aquí 4 claves para darle lo mejor a nuestro cuerpo y con ello agradecerle todo lo que hace por nosotros.

Empecemos a hablarnos bonito, a agradecer todo lo que nuestro cuerpo hace por nosotros, a dejar de criticarnos y mejor apapacharnos, empecemos a darle mensajes positivos y de aceptación.
¡Por una mejor versión de nosotros mismos!

La o también llamada “amabilidad” es de los puntos claves a desarrollar cuando estamos buscando mejorar la relación con nuestro cuerpo y la comida.
Cuando nos tratamos a nosotros mismos como lo haría un amigo cariñoso, dejamos de necesitar comer imperiosamente algo.

Seguimos fortaleciendo nuestro intestino y aprendiendo más opciones para mejorar nuestra microbiota intestinal y nuestro sistema inmune.

Recuerda: La persona que somos no tiene nada que ver con la forma de nuestro cuerpo

La microbiota intestinal es parte fundamental en los procesos digestivos; además tiene una función de "barrera intestinal" que impide que agentes patógenos invadan nuestro intestino.
Otra función muy importante es la de conseguir el correcto desarrollo del sistema inmunitario lo que quiere decir que una microbiota saludable da lugar a una buena respuesta inmunitaria.

Aquí algunos tips de como mantener una microbiota intestinal saludable.

Nutriologa Maria Rangel on Instagram: "Aceptación corporal, aquí unos pequeños tips de como puedes empezar a mejorar tu relacion contigo mismo, quererte más y aceptarte sin tener esa necesidad y ansiedad de querer cambiar tu cuerpo. Cambiando la. 7 Likes, 0 Comments - Nutriologa Maria Rangel () on Instagram: "Aceptación corporal, aquí unos pequeños tips de como puedes empezar a mejorar tu relacion cont..."

El intestino también es un órgano muy importante.
A veces nos olvidamos de darle lo mejor, pero si hiciéramos consciente que si el estomago y nuestra flora intestinal están sanos tendremos por consecuencia mejores estados de ánimo, mejor sistema inmune y en general mayor salud seguramente empezaríamos a cuidarlo más y alimentarlo solo con lo mejor.

Querer y amar nuestro cuerpo es muy importante y los escuchamos en todos lados, pero, ¿Qué hacer en esos días en que no me gusto y me cuesta trabajo verle lo hermoso a mi cuerpo?.
Cambia el enfoque!
Si el día de hoy te costó trabajo verle lo bello no pasa nada, no significa que no lo ames, simplemente en esos momentos respétalo y no lo critiques o castigues por no cumplir tus estándares de belleza.
Respétalo por ser tal cual es y sobre todo agradécele porque gracias a él estamos vivos.

"Ser hermoso significa ser tú mismo. No necesitas ser aceptado por otros, necesitas ser aceptado por ti" - Thich Nhat Hanh.

Tener una relación sana y amorosa con nuestro cuerpo es todo un reto porque estamos recibiendo mensajes todo el tiempo sobre cómo debería ser nuestro aspecto.
La aceptación corporal tiene mucho que ver con darnos cuenta y con observar nuestros juicios y la autocrítica hacia nuestro cuerpo.
Podríamos decir entonces que la aceptación corporal no es tanto el conseguir gustarnos al cien por ciento, sino más bien el dejar de juzgarnos activamente.

Darle un poco de movimiento al cuerpo para mejorar tu salud no tiene que ser sufrido, se le llama "Movimiento disfrutable", es aquello que te guste mucho hacerlo al punto que lo disfrutes y deje de ser una obligación para convertirse en parte de tu vida.

El amor incondicional hacia nuestro cuerpo es uno de los pilares a tener presente, ya que puede ayudarte a lograr tus objetivos.
En ocasiones podemos pensar que nuestro cuerpo no es perfecto y reprocharle. Cambia el enfoque y empieza a agradecerle, porque así como está hace ya cosas increíbles por ti.
Cuando tu cuerpo y tu alma hacen equipo, cosas maravillosas suceden.

Cocinar también es un acto de amor propio, es prepararle a tu cuerpo lo que se merece, es nutrirlo con lo que eliges para él en agradecimiento a todo lo que el hace por ti.
Elegir tus ingredientes, la calidad de los mismos y la variedad es algo que al cocinar tu puedes controlar y al hacerlo puede mejorar muchísimo tu salud y tu estado físico.
Si piensas que la cocina es muy difícil, te dejo este post, quizá te ayudará a reconsiderar algunas creencias que tienes sobre la cocina o bien te anime a intentar hacer algo nuevo en la cocina.
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El problema no radica en los alimentos. El problema no son nuestras células grasas, ni el estómago, ni un intestino más pequeño. Todo eso no hace más que tratar de cumplir con su misión.
La solución a largo plazo no es la de alimentarse con productos libres de calorías o a los que se les ha vaciado los nutrientes, ni mutilar órganos sanos...
El origen del problema radica en la mente pensante y el corazón sintiente”
Me encanta este extracto del libro Comer atentos-Jan Chozen Bay

Cuando termina el año solemos replantearnos y mirar atrás para encontrar aquello que queremos cambiar.
Con este mensaje te quiero decir que cualquier cambio en pro de tu salud por mínimo que sea, impactará de manera positiva en tu vida, no necesitas una fecha especial para iniciar y sobre todo no necesitas cambios radicales, basta con decidirte a empezar, puede ser con 15 minutos de caminata, estacionar el coche más lejos para caminar, tomar escaleras en vez de elevador, cocinar tus alimentos en vez de comprarlos, no comer carne 1 vez por semana, etc.
Paso a pasito, hábitos pequeños que se sostengan y se conviertan en grandes cambios en vez de cambios intensos que duren poco tiempo.