No puedo, juegan los PANTHERS a esa hora

Carolina (2-14) 0 @ 26 Jacksonville

Un enorme paso hacia atrás

A horas de terminar este nefasto 2023 en materia footballística no haremos leña de este árbol caído que son los Panthers, hoy realmente han jugado como un equipo 2-13 y han hecho merecimientos en cada snap para ahora ser 2-14.

De la defensiva poco que hablar, llevan ahora dos juegos sin presentarse en campo y ya parece demasiado, en especial para aquellos que esperaban jugosos cheques para uniformarse con los colores de nuestro club la temporada siguiente, solo un pequeño puñado ha vuelto a salvarse hoy del incendio pero convengamos que en líneas generales ha sido otro juego ausente que queda más en exposición por otro detalle no menor...

La ofensiva, el CERO también a ellos los califica, y más allá de algún arresto personal o de que QB Young mostrara mucha actitud el football estuvo ausente para él y para toda esta unidad en toda la hora de juego.

Creímos que tras una victoria que devolvió sonrisas y de un buen juego en ofensiva frente a GB la semana pasada este equipo estaba en condiciones de entablar lucha ante un muy parchado equipo de los Jaguars que alineó un QB que por años no había pisado campo.

Nos equivocamos y el equipo tuvo uno de sus peores juegos, sino el peor, en toda la campaña.

Tras 21 años volvimos a irnos con CERO en el score y por cierto ya aseguramos el pick #1 para CHI en el siguiente draft, no hay peor modo de terminar 2023.

Pero queda aún un paso más en esta batalla perdida y será vernos las caras nuevamente con los Bucs, en casa, el siguiente domingo, cero expectativas, solo pedimos que sea un trámite rápido.

Porque al equipo lo llevamos en la piel y siempre estaremos ahí para acompañarlo, pero este plantel (y el staff y la gerencia y la presidencia)... Dios... que año horrible nos han dado.

Keep Pounding!

Carolina (2-13) 30 – 33 Green Bay

Feliz y finalmente el día llegó, y fue en la víspera de Navidad.

Llevábamos meses en la cosa, me entiende? Y no vimos ninguna señal positiva a través de 13 encuentros previos, pero finalmente, y más allá del score final, tuvimos algo de paz interior al ver la primer señal en campo de que Bryce Young si podría ser un QB profesional titular para siquiera uno de los 32 clubes de la NFL, porque seamos justos: no fue sino hasta esta derrota con los Packers a que vimos en él condiciones para estar frente a una ofensiva más allá de lo que ésta tenga o no resuelto y que pudo –por si mismo- elevar el nivel de su unidad, de eso se trató siempre pero hasta ahora simplemente no había ocurrido.

Bajo este manto de alivio el resto quedó resumido a una mera anécdota.

Un crew arbitral con llamadas inexplicables y asimétricas, una defensiva local que eligió un mal día para tener uno de sus rendimientos más flojos en el año, E. Piñeiro sintiéndose en Georgia y todos los pequeños detalles que hicieron que un juego que debió ganar Carolina, fuera arrebatado por la visita que no deja de ser sino otro de los mediocres equipos con los que nos tocó medirnos en 2023.

Insólitamente durante todo el primer cuarto de juego y sabiendo que probablemente los Packers apelaran a mover el balón acarreándolo estos sumaron yardas y puntos apelando prácticamente en todas sus jugadas grandes al mismo esquema de bloqueos que, por poderoso que sea, tiene que ser desarticulado antes por el frontal defensivo y obligar a modificarse lo cual ocurrió algo tardíamente y si: tal lo esperado, no hubo otro que resultara tan eficaz y el partido de a poco fue pasando a manos de QB Love que con todo tuvo un primer medio razonable y hasta algo afortunado luego de que un muy buen pase culminara en un fumble en mediocampo pero que fuera recuperado por TE Deguara en lo que fue su único aporte en el juego, eso trajo más puntos en el momento en que más lo necesitaba la visita ya que la ofensiva local, inesperadamente, daba señales sostenida de salud.

Con 13 puntos de margen en el score para la Packers nada hacía pensar que viviríamos una segunda mitad con tanta actividad, los Panthers volverían a anotar para apretar los números en el tercer cuarto a poco que la defensiva logró alguna parada (solo el reloj detuvo a los Packers en el primer medio) y pese a otra anotación de la visita, Carolina logró responder con otras dos para el empate en 30 con una ofensiva de calidad.

Lo que siguió más allá de alguna bronca es anécdota.

Y permítanme un apunte más: hoy los WR lograron separarse, tuvimos un TE fantástico, los RB no fueron tan ineptos (bueno, si Sanders pero esa es otra historia) y la OL no resultó abrumada por frontales defensivos rivales. ¿Cuál fue la llave de que todo funcionara? Funcionó plenamente el QB.

Así que si me entiende… brindemos que ya es Navidad.

Keep Pounding!

Carolina (2-12) 9 – 7 Atlanta

No fue lindo, y mucho menos lucido. Y es propio de nuestros juegos frente a los flojos rivales del schedule, pero en tantos juegos feos en los que tocó perder el ganar uno tras casi dos meses se sintió reconfortante.

Más reconfortante aún cuando los Panthers lograron torcer el rumbo del encuentro que perfilaba un mejor trabajo de los Falcons tras el primer medio pero que terminó siendo dominado por el local con una suma de consecutivos esfuerzos.

En el renglón de lo interesante contamos naturalmente otro buen esfuerzo defensivo, esta unidad que logró mantenernos en juego en por lo menos 9 de las 12 derrotas hoy volvió a hacerlo y además produjo dos dolorosos cortes de balón para la visita los cuales decidieron la suerte del juego haciéndose presentes por toda la hora de football.

La lluvia ayudó a la causa del local emparejando las chances de crear football, para ambos, a una expresión sencilla, así el partido se transformó en un juego 50/50 y para poder tomar provecho de esto resultó fundamental poder correr el balón, 129 yardas totales con 87 de Hubbard e interesantes 4 toques de balón de Ihmir Smith-Marsette mantuvieron la ofensiva en campo y permitieron 3 excursiones muy profundas que, aunque refrendaron nuestra falta de potencia para llegar a anotar siquiera en una de ellas, abrieron camino a 3 patadas sencillas de Piñeiro que a la postre nos daría la victoria.

Siendo puntuales aquello de no poder anotar en ninguna de nuestros drives profundos no es del todo preciso, de hecho, en el último de ellos fue RB Hubbard quien evitó llegar al goal ya que estar en yarda 1 y disponer de la potestad de acabar con el reloj durante el intento de FG era a todas luces la mejor llamada estratégicamente hablando, ya los Falcons no disponían de TO de modo que el partido quedaba en un 90 y más % tras esa decisión que como “bonus” no devolvía el balón al rival.

Esa sí fue una buena llamada, pero en ofensiva regularmente la selección de jugadas no fue buena y otras tantas veces no lo fue la ejecución, entendamos que Carolina tuvo 10 drives de los cuales solo 3 fueron algo exitosos incluyendo uno iniciando en yarda 24 del rival, se siente bien la tarde porque un juego que perfilaba dentro de lo habitual del año (o sea un rival apenas mas organizado que hace lo justo para ganar) se transformó en uno de marcado dominio desde el cierre del tercer cuarto que incluyó dos drives anotadores y en medio una INT que quitó puntos seguros a la visita.

¿Y qué del amigo Young? El QB titular jugó al menos el 75% del juego dentro de su normalidad: dudas, pases erráticos, lecturas incompletas. Lo de siempre. Pero resultó muy interesante ver como manejó las cosas desde el tercer cuarto en lo referente a ayudar a la OL a protegerlo y darse tiempo para lecturas y pases. Mostrándose mucho más móvil, en un piso hostil para hombres “frontales pesados”, el QB tuvo interesantes movimientos dentro y fuera del pocket y logró encontrar a sus objetivos al menos en el largo drive final, no todos los pases fueron lucidos pero si lo suficientemente buenos para hacer lucir a sus receptores, que tuvieron una tarde mucho más interesante que las pretéritas en el renglón de separación. Posiblemente la atrapada del juego sea la única que logró en la hora DJ Chark, pero antes y después Mingo, Tremble y sobre todo Thielen, sumaron a la causa de Young.

En resumen casi que más de lo mismo, con mejoras en la OL (interesante el trabajo de Mays a la hora de correr), mejoras entre los WR y un QB que fue “mejor” por un ratito pero que fue suficiente como para poner en apuros a los Falcons que apenas dos semanas atrás eran líderes divisionales y hoy con la derrota y a falta de 3 juegos han quedado por debajo de 2 equipos, siempre se siente entretenido hacer una pequeña maldad a un rival divisional aunque el equipo no mostrara sino apenas algunos síntomas de “mejora en su deficitario cuadro”.

Quedan tres juegos: Packers, Jags y Bucs, solo visitaremos JAX el resto será en casa, los 3 equipos están en la carrera de postemporada, quién sabe si no volvemos a meter la cola de aquí a fin de la campaña…

Keep Pounding

Carolina (1-12) 6 @ 28 New Orleans

Créame: uno quiere querer a este a este plantel, busca motivos hasta donde no existen para empatizar y confiar en ver algo de football vestido con nuestros colores antes del final de la campaña, cualquier cosa nos ilusiona y le creo, seguro que a ud. le pasa lo mismo que a mi.

¿Y qué obtuvimos? Lo habitual, la nada, lo opaco, lo triste, así es hoy el football de Carolina.

Y nada cambiará en lo que reste de la campaña, sé que cada domingo llegaremos a la hora del juego con la esperanza de que algo –por insignificante que sea- progrese, pero también tengo la certeza de que a poco que veamos el progreso del juego recordaremos los porqué de un año así de pésimo que desde ya les digo es aún peor que el año 1-15 y que el 2-14, pero por mucho.

Hoy la desilusión venía maquillándose hasta el inicio del cuarto final; por entonces aunque inofensivo, nuestro ataque superaba ampliamente en yds. a los locales pudiendo establecer la corrida como nunca antes en el año y el pésimo juego de QB Young y “sus magos receptores” casi que quedaba en un segundo plano y no tan expuesto ya que por un lado algo funcionaba (la ofensiva de acarreo) y por otro la defensiva (sobre la cual apenitas teníamos algo de que quejarnos) nos mantuvo siempre en juego y con expectativas ya que apenas logró enhebrar el local un drive durante esos 3 cuartos y si no hubiera mediado el error de asignaciones que facilitó el bloqueo del despeje (que ni llego a ser despeje sino una bola suelta) y el posterior TD el marcador hubiera llegado aún más apretado el cuarto final que el -8 que marcaba la pizarra.

Ahora bien, recuerdan aquello de querer amar a este equipo? OK, entonces veamos todas las cosas por las cuales tras solo 9 minutos de football en el parcial final uno termina resignándose a odiarlos con toda su alma:
Iniciando el cuarto en zona roja rival es de Perogrullo afirmar que era el momento de dar el golpe, mover alguna vez mas las cadenas y sumar y hasta sumar 8 para un eventual empate parcial o al menos 6 para que el juego esté a un FG de distancia o al menos 3… y si, al menos 3 porque claro… en 3er down y 8 y como pasó casi toda la tarde en 3ra y largas, la defensiva local mandó cargas y una captura nos retrasó obligándonos a tomar un intento de FG razonablemente accesible (41 yds) que tomó un feo efecto al atravesar la end zone y que culminó su recorrido dando en uno de los postes.

Estoy absolutamente seguro que de haber sumado esos puntos el cierre del juego habría sido totalmente distinto, pero el marrarlo tuvo un efecto de KO sobre estos Panthers.

La defensiva tuvo una serie más para lucirse pero sería por última vez en la tarde y la ofensiva que volvía al campo a buscar un empate quimérico tuvo que lidiar con una pésima llamada a jugada de pase en 4ta&1 en yarda 36 local la cual no pudo superar. La llamada fue pésima desde todo punto de vista, Young que no demostró aún ser un QB confiable en situaciones de cierta comodidad no está para tomar el protagonismo en este tipo de jugadas, más aún cuando de algún modo habíamos logrado cierto éxito corriendo el balón, era una mísera yarda para mantener la llamita de la ilusión de siquiera ser relevantes y cuanto menos “asustar” un tanto a los locales, pero nada, ni eso. Y en ese mismo momento (8.15 para el cierre) el equipo desapareció en todas sus líneas.

Así las cosas todo fue para los locales que lograron un segundo drive exitoso en la tarde (y mucho más pirotécnico frente a una defensiva ausente) para llegar a su 3er TD, a esto le siguió una entrega por downs en nuestra yarda 25, otro TD local, y otra entrega de balón por downs ahora ya en territorio rival.

Odioso, triste, devastador, odioso.

Los Saints son hoy día un muy humilde equipo de football, nosotros ni siquiera eso. Nuevamente toca perder (y sin atenuantes) frente a un equipo del peor tercio de la liga al cual solo pudimos anotarle 6 miserables puntos pese a haber controlado el balón y reloj hasta aquella fatídica patada.

WR Thielen pareciera ser el único receptor de categoría que tenemos y el colmo de males es que al mal trabajo hecho por nuestro QB se suma que de los pocos pases acertados por él un alto porcentaje fueron dejados caer por un cuerpo inepto de receptores.

La OL hace lo que puede y hoy al menos nos permitió correr el balón, pero el resto de la ofensiva es escandalosamente y espantosamente ineficaz.

Otro partido que pasa, otra derrota, un año que se perfila por juego y por récord como el peor de la historia del club y la asfixia que provoca otro año en retroceso para una reconstrucción que desde 2019 se viene planteando sin punto de partida.

¿Será en 2024 ese re inicio? ¿Podremos mantener hasta entonces a nuestra eficaz unidad defensiva? ¿QB Young dará muestras al menos de poder ser uno de 32 titulares en su posición para esta liga? ¿Quién será el siguiente Coach en la lista?

Demasiadas dudas y tan poco football que ya ni siquiera duele.

Carolina (1-11) 18 @ 21 Tampa Bay

Otra derrota, si.

Pero tal vez, no otro paso en falso para el equipo, y eso es algo.

¿Cosas que siguen sin funcionar? sin dudas, pero no podremos achacarle a este equipo que hoy se presentó en el Raymond James falta de enjundia en la hora de football.

Definitivamente el lenguaje corporal de los jugadores, dentro y fuera del campo, mostraba otro ímpetu que el habitual de apatía que fue (hacemos votos) sello de equipo en la administración Reich.

¿Volvemos a hablar de football? Bueno si, porque en materia ofensiva, y siempre dentro de nuestra reconocida modestia, hoy el equipo movió las cadenas durante la hora de juego. Tuvo poca suerte cuando en uno de los mejores drives de la temporada debió conformarse con solo sumar un FG, pero más adelante en el juego otras dos marchas que articularon correctamente culminaron en zona de goal local (Hubbard por dos).

Por primera vez en el año algo parece salir bien y hoy esa ofensiva pudo correr positivamente y de hecho Chuba –más allá de las anotaciones- tuvo un juego de 104 yds en 25 toques.

Y ese detalle hace que pequeñas ventanas se vayan abriendo y posibilitando algo de comodidad para el juego de pase, pero claro está que hay una mala mezcla entre las capacidades de la OL, del QB y del cuerpo de receptores, de suerte tal que las combinaciones positivas son escasas a lo largo de cada juego y necesitamos que se empiecen a multiplicar para tomar victorias en juegos accesibles como el de hoy.

¿Tampa fue el peor equipo que enfrentamos? No, lo que puso Chicago en campo ese jueves por la noche todavía lo mantienen como el peor, pero Tampa demostró porque es un equipo con récord deficitario y nosotros porque poseemos el peor, negro sobre blanco: los Bucs mostraron que traían poco y sin embargo se impusieron por 2 jugadas puntuales en ofensiva (ambas para su WR1 lo cual es menos perdonable por capaz que aquel sea) ya que en toda la hora solo lograron UN drive positivo que trajo su último TD, los dos anteriores provinieron o se marcaron directamente de aquellas 2 jugadas.

Dos jugadas que jamás debieron ocurrir y que de hecho no venían ocurriendo incluso frente a receptores que hoy día están por sobre las capacidades de Evans.

Tengamos una mirada positiva sobre los acontecimientos del día, se pudo avanzar el balón casi como un equipo normal, se defendió básicamente bien más allá de lo puntualmente antes mencionado y los equipos especiales estuvieron dentro de la media y sin sustos.

Que entonces sea este un lugar irrenunciable de piso para empezar a proyectarnos en las pocas semanas disponibles en la campaña a fin de tomar experiencia (quienes la necesitan) y conclusiones válidas (quienes deban tomarlas).

Keep Pounding!

El hilo -una vez más- se ha cortado por el tramo más delgado. Esperamos que la "cirugía mayor" que necesita este equipo no se detenga.

Carolina (1-10) 10 @ 17 Tennessee

Otro paso en falso, y van…

No hay caso, por más buena voluntad que todos en derredor de la organización podamos poner no logramos ocultar el sol con la mano, esto es un fiasco de dimensiones considerables.

Teníamos nuestro estándar de “fiasco” medianamente consolidado con el triste paso de Matt Rhule por Charlotte, esto renueva los niveles de fiasco a algo más bien patético y triste.

Podríamos hablar mucho sobre el juego pero lo invitamos con la guía que a continuación ofrecemos que tomen cada tópico y elijan cualquiera de los anteriores 10 juegos de la campaña y lean lo que ahí pasó, porque también hoy pasó eso.

1.- La defensiva sobrellevando lesiones jugó un partido suficientemente bueno como para pretender un triunfo.

2.- La ofensiva no logra sino con un sinfín de peripecias mover las cadenas.

3.- La OL es, mas menos ausencias, de papel (hoy pueden agregar que los tackles tuvieron un día espantoso, sí, ambos)

4.- Bryce Young no está listo (¿Lo estará?) para comandar ofensivamente a un equipo profesional de la NFL.

5.- Las llamadas a jugadas desde la banda dejan mucho que desear.

Los problemas son tan profundos en este equipo que sobrepasan lo que eventualmente puede hacerte perder un juego, esto es del tipo que da a pensar que improbablemente puedas ganar algún otro salvo una circunstancia muy especial.

Y tengamos en cuenta que la calidad de los 11 rivales ha sido una mezcla muy favorable a nuestra causa, sino difícilmente hubiéramos sobrevivido a ser permanentemente vapuleados.

No hubo (ni habrá afortunadamente) equipos contendientes, apenas un puñado de pretendientes, Miami, Detroit, Dallas y Seattle, sumemos a los Jaguars y aceptemos que alguien ganará la fea NFC Sur y que ese será seguramente el único campeón divisional que se enfrentó. Algunos de los nombrados no llegará a playoff, y tal vez ninguno sobreviva a la ronda de wild card y esos son los 5 rivales más duros, del resto, ya lo dijimos: “están en nuestra liga”, pero ya quedó claro que de todos ellos nosotros somos el peor.

¿Numeritos? 13-13-10-10 pudo ser el parcial por cuartos de algún club, para nosotros es el resultado del score de los últimos 4 juegos y ni siquiera todos esos magros puntos lo sumó la ofensiva.

¿Más números? Vamos con ordinales: “29º” parece ser el mágico => en ofensiva aérea, ofensiva terrestre y ofensiva total, pero “31º” sorprende y duele => cantidad de puntos encajados.

Fitterer no logró conformar un plantel siquiera competitivo, Reich tomó esos hombres y no logra que jueguen a algo, los jugadores parecen no tener ni la técnica ni la velocidad suficiente y esto en materia ofensiva es un dislate.

Por cierto hoy los LB externos fallaron, también.

No sé cómo diablos se les ocurrió venir a leer estas desganadas líneas, pero ánimo, solo nos quedan unas 6 más, quién sabe sorprendamos dando un juego digno antes del derrumbe.

Carolina (1-9) 10 vs 33 DALLAS

Hubo otro tiempo, otros.

Vivimos otra realidad, otras.

¿Saben? Hubo un equipo apenas llegado a la NFL que se codeó con equipos de leyenda llegando a la final de conferencia claudicando solo frente al futuro campeón, que sí, después se fue desgranando, y si cambió de mando, pero que dio batalla hasta el fatídico 1-15 de aquel equipo de un “veterano” QB roockie que fue digno en cada tarde. Claro que hubo otra realidad.

Y aquella dignidad de la que hablábamos hizo posible que un golpe de timón, con la llegada de dos grandes entrenadores especialistas en defensa, hiciera crecer a esa unidad y con una ofensiva apenas regular dar un saldo de 7-9, y saben? a poco de que llegara algún refuerzo entre los WR, RB y un loco QB pistolero (pero consistente) aquel equipo 1-15 llegó al Super Bowl y tras ello dio otros 4 buenos años que incluyeron viajes a postemporadas e inclusive un arribo al juego de campeonato de conferencia. ¿Cayó en desgracia este equipo? Si y tuvo un año fatal (2-14) en los que parecía que nada salía…

Pero hubo otro golpe inmediato de timón y con la llegada de un nuevo coach llegó un chico que hizo por años sentir que podíamos imponernos, sin importar a quien enfrentáramos, ni cual fuera el contexto previo del juego. Y eso no tiene precio.

Hubo otros tiempos, otras realidades, y otros hombres. No solo teníamos en crecimiento a aquel chico del que les hablamos en el párrafo precedente sino que con un pick de primera ronda, tomamos al quien será nuestro primer HOF (puro de Carolina), lo cual es pura justicia para quien fuera nuestro mejor jugador de football en todos estos años. Otros tiempos, otras realidades para un equipo que tocó el cielo, sufrió algo de resaca y volvió a resurgir con nuevas llegadas de modo inmediato.

Algunos dirán que la buena estrella de ese equipo se eclipsó con un sack, bueno, podría ser, pero creemos que ya había terminado un viernes de diciembre pero del año anterior con una oscura publicación.

Y desde ahí esta realidad y este tiempo, gris, penoso y que parece sin final.

Un proyecto añoso se dijo nos sacaría de esto, en vano, temporada tras temporada las cosas empeoraron. El proyecto añoso solo duro poco más de dos temporadas, tras ello un buen interinato fue ignorado en favor de un proyecto explosivo y de hecho lo fue, explosivo pero en las mismas manos de los responsables.

Hoy se esperaba una derrota, se dio la derrota y todo lo que se esperaba en un pronóstico pesimista se plasmó –tarde o temprano- en campo. ¿En serio quieren leer algo sobre esto?

No, no será aquí, por hoy solo recordamos que hubo otros tiempos, otros hombres, otras realidades…

¡Keep Pounding!

CAROLINA (1-8) 13 @ 16 CHICAGO

Indigno.

Parece ser un adjetivo elegante y certero para lo visto.

Seis míseros puntos en una hora de football frente a una defensiva del peor cuarto de la liga nos eximen de todo análisis.

Nos ha ganado Chicago y ni siquiera con su QB titular sino con un chico muy guapo pero enormemente limitado que, mas allá de eso, dio un juego suficiente para la victoria.

Pésimas llamadas ofensivas, peores ejecuciones, una OL probadamente ineficaz, un QB que no lidera ni muestra señales de ser el “esperado”, balones dropeados aquí y allá, corredores incapaces de ganar un palmo de terreno y millones (sin contar picks y jugadores) que se han ido para crear este monstruo que no logra sumar sino de a 13 o 15 o 17 puntos por juego.

¿Realmente alguien tiene esperanzas de que haya una persona en el staff que pueda solucionar eso? Nosotros no. Entonces no perdamos más tiempo, se entiende?

Y si, ya sabemos, el problema empieza más arriba, ahí nada se puede hacer.

No tiene caso siquiera hacerles perder tiempo con eso, el juego es ”incomentable”, si gustan les leo en comentarios, ahí hay espacio para todos.

Y no compren “humo” dentro del campo tampoco hay quien pueda ayudar con esto.

Gracias por venir.

Carolina (1-7) 13 vs 27 Indianapolis

Que triste. Y apenas hay horas para recomponernos anímicamente del peor juego del año de nuestro equipo.

Hoy los Panthers dieron un triste juego bajo los comandos ofensivos de QB Young, quien pasó de una mini primavera victoriosa la semana pasada a ser el responsable de la derrota hoy. No busco generar coincidencias con esto, ni mucho menos adoctrinar.

No podemos pedirle mucho más a esta defensiva, ha perdido titulares, de hecho hoy en campo otros jugadores han debido abandonar el juego y sin embargo logró apagar lo suficiente a la visita (finalmente logramos defender la corrida por debajo de las 100 yds.) como para mantenernos una vez más en juego. Y hasta los equipos especiales tuvieron su mejor tarde en la campaña incluyendo la recuperación de un balón.

Pero esta ofensiva no hay como verla bien, la OL inició mal pero según pasaron los minutos logró que algunas cosas pasaran, aunque en lo que respecta a la ofensiva de pase su motor, hoy, lució averiado. Es que Young jugó claramente su peor juego como profesional y esto antes de tener uno de modo sólidamente bueno previamente.

Me sobrevuelan miles de ideas sobre nuestro supuestamente prodigioso QB así que prefiero organizarlas por las siguientes horas para luego compartirlas con Uds.

Claro que pueden compartir las suyas sobre el asunto en esta misma publicación a modo de comentario.

En un día en el cual si pudimos correr (algo) el balón, sumando 138 yardas, Young se encargó por las de él de hacernos sentir miserables con dos intercepciones devueltas para TD que básicamente marcaron en el score la diferencia entre clubes, eso más una tercera –algo tardía- que terminó con el juego, y en medio de todo eso siguió “liderando” una ofensiva timorata y sumando % de completos con pases de 1 a 5 yardas que no hicieron sino eternas y finalmente inofensivas a los drives, con la salvedad del primero del segundo medio que fue largo (8 min) y penoso pero al menos nos trajo algo de esperanzas con la recepción anotadora de DJ Chark.

Otro día para olvidar y rápido si no queremos hacerles dar un festín a los Bears que querrán asegurarse el pick 1 del siguiente draft con otra derrota de sus benefactores.

Carolina (1-6) 15 vs 13 Houston

Finalmente llegó este demorado primer triunfo de la campaña y no pudo ser más dramático el final, llegando a la advertencia de los 2 minutos la ofensiva llegaba a yarda 30 rival con un primer down, eso y los 3 TO disponibles para la visita nos pusieron frente a un mini drama: ¿Cómo mover en 3 acarreos 10 yardas el balón? Con eso lograríamos el control total y solo dependeríamos de Piñeiro que, más allá de ser un kicker confiable, siempre vivirá en nuestra mente con la sombra del doble yerro en ATL que nos costó aquel juego. Así que claramente el “drama” era doble.

¿Se resolvió? Increíblemente, si. Primero con Chuba Hubbard peleando cada pulgada en 3 downs consecutivos (rematada con un volado de sí mismo en tercer down) para lograr renovar un primer down para tener control definitivo del reloj, luego sin errores se llegó a la patada la cual se realizó no una sino TRES veces hasta la válida, infracciones consecutivas de T.Thomas, nos llevaron a patear desde la 20, luego la 10 y finalmente desde yarda 5 y los asistentes que llevaban rato esperando celebrar una victoria al menos pudieron celebrar un par hoy a fuerza de tanta repetición antes de cantar “Sweet Caroline”.

Yendo al juego diremos que Houston está en nuestra liga de equipos y que ya era hora que algún rendimiento por sobre el promedio nos diera una victoria frente a otro equipo al que nada le sobrara. Claramente la defensiva local dio ese paso al frente hoy y salvo por dos muy extensas marchas de la visita que terminaron en anotaciones (una por medio) controló el juego de pase e hizo lo suficiente contra la corrida (otro juego +100 sobre nuestras espaldas) como para detener a CJ Stroud (16/24 para 140 yds).

Lo de la defensiva es para destacar, Houston llegaba con muy buenos números en ofensiva de pase y hoy, salvo momentos, no lograron inquietarnos.

En ofensiva seguimos viviendo un drama y más allá de la falta de playmakers de jerarquía lo que falta es una línea ofensiva “medianamente” eficaz. Sinceramente se hace casi imposible jugar así, planteemos el panorama general: una ofensiva con un QB novato que no tiene, pero ni de cerca, la chance de descansar en su juego de acarreo, y muy por el contrario necesita imperiosamente montar un juego de pase el cual se dificulta por la escasa protección que le damos a Young. A resumidas cuentas no podemos correr y ponemos toda la carga y responsabilidad de la ofensiva sobre las espaldas de Young con pocos receptores de jerarquía y con muy poca protección… ¿Qué difícil no?

Hoy ganamos pero con 15 puntos anotados en la hora de football, eso nos acercará a más derrotas a futuro, si seguimos sin resolver lo importante. Revisemos numeritos: QB Young fue 23/31 para 235 yardas con TD (fue capturado además 6 veces para 55 yardas perdidas), podemos darle crédito por el triunfo de hoy. Corriendo todo es gris: 44 yardas totales en la tarde (de los cuales 10 corresponden a la secuencia de los últimos 2 minutos del juego) y sí, ya se sabe, WR Thielen tiene las manos más seguras del cuerpo de receptores, hoy con 8 recepciones para 72 yardas lideró el grupo y tomó jugadas sumamente importantes para el resultado final (incluyendo una en cuarto down en el drive final).

En tanto se indujo al anillo del (por ahora) Bank of America St. a dos cracks como lo fueron WR Muhsin Muhammad y DE Julius Peppers, que siempre traerán a nuestra mente grandes equipos y grandes momentos vividos, los fanáticos locales pudieron finalmente hacerse sentir (lo cual esperábamos ya que los “jóvenes” Texans no tienen una base de fanáticos en todo EEUU) y festejar una victoria.

Queda más que mucho por resolver aquí, pero suelen ayudar las victorias a los procesos, ojalá también sea este nuestro caso.

Carolina (0-6) 21 @ 42 Miami

No estuvo mal, para nada.

Finalmente tras 5 juegos para el olvido los Panthers nos dieron una pequeña dosis de ofensiva dinámica, anotaciones y paradas defensivas (y todo a la vez) para dominar por completo a los dueños de casa a lo largo de todo (casi) el primer cuarto y mostrarnos a donde debemos apuntar en cuanto a expectativas.

14-0 tras dos drives anotadores con dos paradas de 3&punt para los locales fue algo que no vimos venir y que disfrutamos, sin dudas, aunque todos sabíamos que la posibilidad de sostener ese nivel a lo largo de una de football, era algo muy remoto.

A falta de 0.06 se jugó la última bola del cuarto, QB Tagovailoa, totalmente eclipsado hasta entonces, encontró a WR T.Hill para una ganancia de 27 yardas logrando renovar finalmente un primer down y abriendo oficialmente el juego para los locales.

Lo que siguió fue el juego que todos esperaban, la ofensiva 1 de la NFL en su casa frente al único club que aún no consigue victorias: en 4 minutos llegó el descuento, en 8 el empate e inmediatamente tras la pausa de los 2 minutos finales del medio los Phins ya estaban 7 puntos por delante en la cuenta. Y pese a que hubo tiempo para una ofensiva sostenida los Panthers no lograban sumar un FG en el instante final del cuarto.

El segundo medio solo trajo más distancia en el score y nada de puntos para nuestra ofensiva (solo sumamos por un pick 6 cortesía de CB T Hill quien devolvió el balón a goal por 61 yardas).

En el renglón de buenas noticias tenemos a RB Hubbard quien tuvo una tarde sólida con 88 yardas (TD) en 19 acarreos y el regreso de R Blackshear, y por supuesto otro juego de alto nivel para WR Adam Thielen con 11 completos (s/13) para 115 yds (TD), QB Young se vio muy bien en el inicio y paulatinamente, según llegaban los ajustes de los locales, se fue apagando junto a la ofensiva, un buen punto para él es que por primera vez en el año no entregó ningún balón y de hecho no hubo entregas hoy para los Panthers.

La defensiva tuvo que enfrentarse al peor rival del calendario en un pico máximo de ausencias y con alguna que otra baja de consideración durante el juego, no se pronosticaba una tarde sencilla y de hecho no lo fue, pero nos queda ese casi impecable primer cuarto para –aca también- ver hacia donde es el camino.

Cero ganados y seis perdidos es un balance que nadie esperaba al llegar el bye, tenemos 14 días para preparar un juego más que complicado (con todo y el morbo del choque de las dos primeras selecciones del último draft) en semana 8, ojalá volvamos más cerca del equipo de hoy que el de las primeras semanas.

Es por ahí.

Keep Pounding!