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La Iluminación de escaleras no solo cumplen una función práctica, sino que también añaden un componente estético y de diseño crucial a cualquier espacio.

Al mismo tiempo, las escaleras son mucho más que simples elementos de transición; son protagonistas en la narrativa de un espacio. Su diseño y colocación pueden influir en la percepción del diseño interior. Ya sea en una residencia, un lugar de trabajo o un espacio comercial, la importancia de las escaleras radica en su capacidad para mejorar la estética y la funcionalidad.

La iluminación en escaleras interiores juega un papel importante en la creación del ambiente deseado. Además, cumple la función básica de iluminar el espacio para dotarlo de luminosidad.

Las principales funciones de las luminarias son:

Protección de las lámparas

Contener circuitos de alimentación y control remoto

Orientación y distribución del flujo luminoso

Control de la temperatura de las lámparas

Decoración

La luminaria es todo el conjunto de dispositivos que sirven de soporte a las lámparas, e incluyen todo el equipamiento y los accesorios para su instalación. Las lámparas se sitúan dentro de las luminarias y estas controlan la luz emitida, dirigiéndola o filtrándola.

Una lámpara está formada por un pie (la base o soporte), un brazo (que es flexible en algunos modelos) y una pantalla o tulipa (atenúa la iluminación y difumina la luz). Esta estructura, por supuesto, puede cambiar de acuerdo al tipo de lámpara y a la creatividad de los diseñadores.

Los LED (Light Emitting Dioses ó Diodos Emisores de Luz) son lámparas de estado sólido construidas a base de semiconductores, por lo que no requieren ni filamentos, ni gases para descarga. El semiconductor está unido a dos terminales cátodo y ánodo, y recubierto por una resina epoxy transparente. Al circular corriente por los terminales se produce luz. A este efecto se le denomina electroluminiscencia.

Son muy eficientes ya que utilizan menos energía por cantidad de luz emitida que los otros tipos de lámparas y son de alta durabilidad.

Es posible distinguir entre una amplia variedad de lámparas, entre las que se encuentran las siguientes: las de pie (son aquellas que se apoyan en el piso); las de techo (cuelgan desde lo alto, generalmente desde el cielo raso); las de mesa (se ubican sobre distintos tipos de mesas y escritorios).

La luminaria es todo el conjunto de dispositivos que sirven de soporte a las lámparas, e incluyen todo el equipamiento y los accesorios para su instalación. Las lámparas se sitúan dentro de las luminarias y estas controlan la luz emitida, dirigiéndola o filtrándola.

Las principales funciones de las luminarias son:

Protección de las lámparas

Contener circuitos de alimentación y control remoto

Orientación y distribución del flujo luminoso

Control de la temperatura de las lámparas

Decoración

De acuerdo a la distribución del flujo luminoso que realizan pueden clasificarse en luminarias difusoras y luminarias reflectoras, aunque la mayoría suele presentar características mixtas.

Es un tipo de lámpara incandescente en la que la ampolla se rellena de un compuesto gaseoso con halógenos que se encarga de regenerar el filamento conforme se va evaporando, evitando al mismo tiempo el ennegrecimiento de la bombilla y la descomposición del filamento.

Todas las lámparas que utilizamos convierten la energía eléctrica en luz , y se pueden dividir en tres grupos según el procedimiento que utilicen para realizar dicha conversión.

Ésta lámparas emiten luz por la incandescencia que alcanza un filamento de material conductor, al pasar una corriente eléctrica a través de él. El tungsteno es generalmente el material utilizado para el filamento, el cual es encerrado en una ampolla de vidrio en la que se ha hecho vacío o rellenada por un gas inerte.

¿Por qué usar una lámpara de pared? En general las lámparas de pared o apliques los usamos en las siguientes circunstancias:

1-Para iluminar una zona concreta de una pared, potenciando un elemento concreto, por ejemplo: un cuadro o una vitrina. En este caso empleamos pequeñas lámparas que focalicen la luz hacia un punto concreto.

Si quiere ser muy preciso y técnicamente correcto, sólo debe utilizar los términos luminaria e iluminante. Como se ha descrito anteriormente, la palabra lámpara es muy general, y dependiendo del contexto, puede significar tanto la luminaria como el iluminante.

Especialmente si se busca online una nueva luz para el techo, la diferencia entre una lámpara y una luminaria se hace evidente. Si usa el término de búsqueda “luminaria” lo más probable es que encuentre el resultado correcto, por contra si usa el termino “lámpara” puede encontrar cualquier cosa.

Estrictamente hablando, una lámpara LED puede ser una luminaria o una fuente de luz. Una lámpara de escritorio LED significa claramente una luminaria, y una lámpara LED E26 significa inequívocamente una bombilla LED con casquillo E26.

Es importante destacar la diferencia entre lámparas y luminarias al momento de elegir el tipo de iluminación para un proyecto, ya que la lámpara es el cuerpo que despide luz, mientras que la luminaria es el aparato que colgado, o sotenido en un pie, sirve de soporte a una o varias de estas lámparas.

La luminaria es la construcción completa alrededor de la fuente de luz. Consiste en varios componentes como la estructura, el portalámparas, el reflector, la pantalla o la cubierta de vidrio. Dentro de la luminaria está la fuente de luz, que es el iluminante (bombilla).

Pese a ser luminaria el término más adecuado para referirnos a lo que todos conocemos como lámpara, apenas se usa. ¿Ha escuchado a alguien alguna vez decir luminaria de mesa o luminaria de techo? En cualquier caso, decir lámpara de escritorio es correcto también.

Hasta hace unos años, la mayoría de las luminarias estaban equipadas con bombillas esféricas incandescentes normales, pero desde la difusión de nuevas fuentes de luz con diferentes formas, el término iluminante se está estableciendo con fuerza.

Debido a las muchas nuevas técnicas de iluminación, el término bombilla no es capaz de cubrir toda la variedad de fuentes de luz. Por el contrario, la palabra iluminante define muy bien a la fuente de luz real. Nunca llamaríamos a una tira LED como bombilla, pero si iluminante o fuente de luz.

Por esto, el término bombilla queda relegado a aquellas fuentes de luz con forma de “bombilla clásica”, mientras que el término iluminante se puede usar tanto para las bombillas tradicionales como para cualquier otra fuente de luz moderna.

Las palabra “lámpara” es una de las que más confusión causa. Si va una tienda y simplemente pides una lámpara, el vendedor probablemente no sabrá lo que quiere y en la mayoría de los casos le traiga una simple bombilla.

Sin embargo, si combina otras palabras con lámpara, el vendedor no durará en que quiere. Por ejemplo, si pregunta por una lámpara de escritorio, de techo o de pie, entenderán que se refiere al aparato completo: estructura, cable, interruptor, bombilla, etc.
En muchos ambientes técnicos el término lámpara se refiere a la bombilla sola, como por ejemplo en el mundo de la iluminación del automóvil. Por contra, en el día a día de las familias se conoce como lámpara al conjunto completo de estructura y bombilla.

podemos afirmar que el mundo de la iluminación es bastante sencillo en comparación con otros campos de estudio como la termodinámica, la mecánica de fluidos, la electrónica o incluso el sonido. Sin embargo, la iluminación sufre de tener una terminología muy confusa.

Las razones principales por la que se confunden los términos lámpara, bombilla, luminaria y accesorio de iluminación son; Por un lado por culpa de traducir esos términos del inglés y por otro lado por la falta de un convenio internacional para determinar cómo llamar a cada cosa.

Principales características de una lámpara de pared.

1-Si hablamos de un aplique de pared tendremos una luz muy focalizada y orientada hacia un punto concreto o una zona muy delimitada. La luz no suele iluminar más de un metro cuadrado de superficie. (un pequeño pasillo, un lavabo, un cuadro, una estanteria, etc…)

3-Necesitamos iluminar una zona concreta por un determinado motivo. Por ejemplo en un baño o aseo. En este caso colocamos un aplique de pared para dar luz a un espacio muy reducido para poder desarrollar un actividad o hacer algo que necesite bastante luz: asearnos, afeitarnos, etc…

Pero por lo general, cuando recurrimos a una lámpara para la pared no buscamos una gran luminosidad, estamos más bien, recurriendo a un elemento decorativo para añadir algo de estilo a la habitación. Salvo en el caso de baños o aseos, en este caso si es necesario pensar un poco en la luz que vamos a conseguir.

2-Cuando necesitamos iluminar todo un paño. Solemos hacer esto cuando queremos darle importancia a una pared, bien porque en ella hay una estantería, tiene un color diferente al resto de paredes o por cualquier otra circunstancia.

Las lámparas de pared o apliques de pared son iluminaciones que se colocan en los paramentos verticales o paredes. Suelen ser de tamaños reducidos y no destacan por su gran luminosidad. No es lo mismo un aplique de pared, que una lámpara de suelo empotrada. Las primeras se usan para iluminar zonas concretas y las segundas tienen como objetivo potenciar todo el paramento, por ejemplo fachadas de monumentos, edificios completos, etc..

El voltaje es la “presión” que hace que la carga eléctrica se mueva. La corriente es el flujo de la carga, es decir, el promedio en el cual la carga se mueve por el conductor medido en un punto en particular. El conductor ofrece una cierta cantidad de resistencia a este flujo, el cual varía dependiendo del tamaño y composición del conductor. El voltaje, la corriente y la resistencia están correlacionados – no puedes cambiar uno sin cambiar otro.

Por tanto, hablemos de los interruptores inteligentes, un dispositivo que podrás colocar en tu interruptor empotrado existente.

Sin embargo, hay una tercera solución que es mucho más simple y limpia que las dos anteriores. Además, puede que hasta más económica y no implica, en el tema de la iluminación, cambiar también cada una de las luminarias que quieras controlar. Es más, no siempre es lo ideal porque son flúorescentes u otro tipo de luces mucho más interesantes que las bombillas que ahora mismo son tan populares.