Cosmovisiones

Cosmovisiones

Contact information, map and directions, contact form, opening hours, services, ratings, photos, videos and announcements from Cosmovisiones, Education Website, .

23/10/2021

😏

27/09/2021

🤙🌵🔥

09/08/2021

Como las piedras que se limpian con el sal de mar, nuestros corazones se limpian con el tiempo. Como quisiera querer querer.

09/08/2021

🌍❤️

29/05/2021

Nieve 🌨 en la cordillera ♥️ 🇨🇱

22/05/2021

🐌 🐌

04/03/2021

MAR EGEO

En el reino de dios las letras son hermosos símbolos, son colores verde brillante, son frecuencia y elementos; ahora viento, mucho viento. El tocaba las puertas del reino.

Se acercaba y susurraba de cerca. Un susurro que cargaba el aliento del jaguar. De niño, el viento lo cargaba en su espalda; ahora lo acompaña en ser. Pero de niño lo montaba... susurraba con amor y orgullo el pelaje del jaguar y cada exhalación pausada cuando se encontraba al asecho. Lo vivía con todos sus sonidos, se perdía en Él.
Y cómo no hacerlo, quién de nosotros no lo hizo alguna vez, quien no ha podido perderse en un flujo que sea tan sutil que sea presente. Un flujo que se sabe que está ahí. En éste caso, el flujo del viento, traía de nuevo el susurro de los animales. Traía sus gruñidos. Y a veces sonidos fétidos, esos también los traía, el viento no era juicioso, pero de niño lo fue.

Photos from Cosmovisiones's post 18/11/2020

Al inicio sólo hay cantos, muchos cantos. Después inicia la energía femenina el movimiento. Empiezan a separar los pétalos de rosas rojas y blancas. Pasan horas. Cantos. Danza. Y los pétalos empiezan a tomar forma. Forma hermosa, encima de ella, ellas. Y hacen una figura, al dios del maíz. Ellas. Agua. Hacen una figura. Que ellos toman, sutilmente, suave y uno a uno sus pétalos, se apoyan sobre un bastón. Uno rojo y uno blanco. Uno blanco y uno rojo. De ambos lados, de todos los lados. Pasan horas. Cantos. Danza. Y después uno está agotado, con ganas de dejarse caer y amanecer con ella. De sólo abrazarla. Sentir su piel, un poco fría, y besar su cuerpo hasta que la noche explote.

Y explotan... Explotan las caracolas 🐚, en sus manos y las montañas cantan. Tanta paz después.
Y así en esa paz, bajan de las montañas seres. Tribus. Personas. Algunas han caminado días. Responden las caracolas en la montaña. Cada vez más cerca.

Y cuando llegan se reúnen pero sólo un instante y después suben. De todos lados son. Suben al templo del maíz y cuando se dan cuenta que hay fuego nuevamente moviéndose bajo sus pies. Bailan. De nuevo. Esta vez esperan el sol, Todos bailan. Danzan. Entierran sus pies en el piso, firman el suelo, y vuelven a pisar. Por los elementos, por todo. Solamente pisan el piso. Cada vez más rápido. Intenso. De ese intenso que se disfruta. Danzas del maíz, del agua, del viento, del águila, danzas del conejo, danzas. Danzan todos. Esperando al sol. Lo esperan salir por la orilla de la montaña, por esa orilla con forma de serpiente. Una que vuela. Emplumada.

Y sale. Finalmente sale el sol y lentamente dejan de danzar. Tan lento como el agua lo siente.

28/09/2020

Atardeceres:

No existe duda al mirar el contorno de un atardecer, el día acaba y nosotros con él. No debería haber duda en nada más, el día acaba y nosotros con él. Aunque algunas veces por más que acabe el día no acaba la preocupación. Nos persigue hasta la cama y se arrincona en las esquinas oscuras como serpiente enroscada esperando cazar. Es cuestión de mirarla, de realmente verla, así, de frente. Ojo con ojo. Y acaba, uno pensaría que no, pero igual acaba, se desvanece con el día, diluido en colores pastel, se van él y todos nuestros congojos. Se despiden al horizonte, no sin antes dejar la promesa de volver al día siguiente. Y vuelven... Aunque ya sin peso, acompañados del amanecer, no son más púas, son flores, son el síntoma más claro de estar tan vivo.

🏔️🏜️🏔️🏜️🏔️
El Reposo, Chile.

18/09/2020

CREER Y CREAR

La "creación" nunca pasó sobre la cabeza de alguien, fuimos nosotros.
Nuestro deseo de poseer más.
Caníbales.
Roedores de nuestra propia carne.
Buitres de nuestras ideas en putrefacción.
Almas jóvenes en la conciencia.
Con deseo de desear.
Pidiéndole prestado oxígeno a los árboles para jugar a ser Dios.
Agujeros negros de bolsillo.
Represores y reprimidos.
Seres evolucionados con uñas para aferrarse a su centímetro cuadrado de existencia.

Y de pronto una abertura, un ligero rasguño en el telón de la conciencia, una luz de esperanza, de lucha, de protesta, de contienda, de expansión, un recordatorio de lo más antiguo, un flujo casi imperceptible.

Una semilla germina.

Resistencia pueblo mexicano.
Resistencia pueblo chileno.
Resistencia pueblos originarios.

🌵🌵🌵
Campo Lindo, Chile
Foto:

21/04/2020

COMO UN RELÁMPAGO QUE ESPERA

El punto central, el ahora, es el único tiempo espacio que había. En el pasado era recuerdo, en el futuro era una profecía. Hasta que el tiempo cambió, ahora soy el pasado y de igual modo soy el futuro. Aquí y ahora estoy en ambos lados y en ninguno. Todas las posibles espirales convergen aquí, en todas mis existencias en conjunto. Todas hilando y deshilando el hilo de la historia, nuestra historia... La historia, al menos, de este sueño.

Recuerdo la oscuridad. La Cuadrícula, también recuerdo la Cuadrícula. Cristales. Brillos. Casi invisibles, minúsculos brillos. En el techo; Una luz que no brilla anuncia su llegada. Llega y bajan. Bajan los tentáculos. Bajan.

Cada noche tenía un sueño recurrente, en el cual despertaba dentro de una habitación oscura.

Todos los días hacía la misma rutina. Me levantaba a traspiés de mis talones, cubría mi cuerpo desnudo con una túnica de seda marrón. Tomaba una ducha seca con sólo pensarlo. Contemplaba mareada y borrosamente las cuatro paredes de acero que me contenían. El acero carmesí estaba quemado con símbolos, un nuevo símbolo aparecía con sólo pensarlo, un día más representaba esa hi griega dentro de un círculo. Se marcaba al rojo vivo en la pared mientras lo imaginaba. Por último me sentaba sobre mis tobillos al centro de la habitación. En mi mano la espina aparecía, una mezcla de calmantes, nutrientes y veneno, para inmovilizar mis piernas, mis brazos, mi cuello pero más importante mi cabeza. Los casi inútiles músculos de mis piernas ardían, el efecto del día anterior cedía, temblaban los muslos, dolían. Quería salir, quería existir, quería venganza, quería cumplir con mi destino fuera de ese cubo pero aún no era tiempo. En el techo un símbolo de protección marcado con sangre y mi nombre tallado, en el suelo de concreto casi invisibles y junto a mis talones los rasguños de mi libertad deseada.

Frente a mis ojos se dibujaba lentamente la misma palabra.

Aplicaba la inyección ahí, justo a tiempo. Me hacía dormir de inmediato, caía mi cabeza sobre mi pecho.
Y despertaba...

Veía a mi amado esposo, me levantaba sin pena por dejar las sábanas de seda. Caminaba descalza por el piso de pino, y de mi ventana respiraba la ligera brisa fresca del mar. El sol nacía y dejaba caer sus primeros brillos mientras un pequeño nerviosismo me acompañaba paso a paso por unos cuantos segundos hasta que entraba a su habitación y la veía, mi amada hija. La despertaba con un beso y al besarla el tiempo cambiaba.

Acaricio su frente que se siente calentita, sus ojos violeta me miran con cariño, le doy un beso más y bajo por las escaleras. Son de madera pintada y bajan en espiral hacia la cocina, preparo un café que huele en toda la habitación, lo llevo a la mesa frente al ventanal y mientras le coloco azúcar me pierdo por un instante en la maravillosa vista de las montañas.

Casi puedo sentir el frío y la humedad en mi piel mientras las veo a la lejanía. De fondo, tras de mi, las olas del mar. Regreso al momento presente con el olor de mi café y con un nuevo estímulo, huelo algo... Es pan tostado con mantequilla.

No recuerdo cuando lo preparé, siento como si lo hubiera creado. Parpadeo un poco confundida, me surge un recuerdo fragmentado de poner la tostadora en algún momento antes. Mi esposo baja las escaleras blancas, me sonríe. Trae un pan también, le sonrió de regreso. Un último momento de gozo me regalo al cerrar los ojos e inhalar el delicioso olor de mi café colombiano.

El tiempo pasa más rápido con cada actividad que realizo. Ayudo a mi hija a bañarse, a vestirse, la llevo al colegio y estoy de nuevo en la silla frente a mi mesita circular. No recuerdo muy bien el trayecto, ni haber colocado el pollo en el horno pero ahora arde y las especias inundan la casa.

Salgo por la parte de atrás de la casa, disfruto del pasar del día mientras leo un libro frente al mar. Entre mis dedos siento las caricias de la arena, y de pronto me siento ansiosa, un recuerdo breve me preocupa, un chispaso, una memoria, un flash, ¿mi hija?, pienso.

Parpadeo, percibo un llamado hacia el fondo del mar, miro el mar sin ver las olas, veo más allá, el azul infinito me da un aire de paz, por un instante al cerrar los ojos siento que me transporto al medio del mar y las olas se aproximan a mi de todos lados. Yo floto, las gigantes azules no me asustan, mis ojos abiertos completamente observan el cielo, las inmensas olas como montañas me mecen hasta que una como tempestad me sumerge. Grito, trago agua... Cierro los ojos... Sigo en la playa con mi libro, ¡Qué hora es!, pienso alterada. Volteo a ver mi reloj y casi veo la hora cuando las escucho, las razones de mi felicidad abren la puerta corrediza detrás de mi. Se acercan, ella corre y me abraza. Él se queda desde la puerta, un parpadeo. Su ropa es color negro, sus brazos están completamente tatuados, su cuello y parte de su rostro también. Hay sangre en su cuerpo. Un parpadeo más, viste la misma ropa casual, me sonríe, me cierra los dos ojos, se que me llama con la mirada.

El tiempo pasa rápido. Después de la cena arropo a mi hija. La beso y casi de inmediato ella duerme. Está tranquila. Me deslizo a mi habitación. El olor de su fragancia inunda el cuarto, me siento en la cama y despego mis dedos lentamente para sentir, por un instante más, el frío piso de madera. Me quedo un segundo sentada en la cama pensativa, no se si quiero dormir, un pestañeo más. Siento mi respiración tranquila entrar en mi cuerpo y mi barbilla rozando mi pecho, otro pestañeo. Me tiro sobre las sábanas blancas. Él mira mi totalidad con amor, yo abrazo la profundidad de su ojos. Se acerca deslizándose y me acaricia la mejilla, sigue con el cuello. Una caricia tras otra, nuestros cuerpos se hunden en uno mismo, con mis piernas lo acerco tanto hacia mi centro, sus ojos delatan espasmos, todo mi ser lo envuelve. Baila su pecho suavemente sobre el mío mientras termina y deja dentro de mi un corazón, una vida, lo puedo sentir.

Se mantiene sobre mi acariciando mi rostro, después se queda dormido, gira hacia su lado de la cama, yo miro al techo de madera blanco.

Una melodía en mi cabeza, siento la sensación de la seda una vez más, mi corazón palpita lento sin embargo una muy pequeñita fracción de mi está completamente aterrada de quedarse dormida. Pienso en el día por venir, en ella, en él, en el mar, la arena, el olor del café, la comida, la textura de mi libro, la arena entre mis dedos, en mi hija una vez más. Me quedo dormida.

Despierto con el olor del café aún en mi nariz, creo que siento la seda aún bajo mis manos, no abro los ojos aún, siento el brillo y me parece escuchar el mar. Una pequeña preocupación, ¿cómo habrá despertado ella?, pienso. Lentamente abro los ojos, no hay más olor a café, no hay mar, no está ella. Mi vista está borrosa, simbolos, veo símbolos en una pared de acero frente a mi. Un pestañeo, se marca una ye envuelta en un circulo en la pared como si un dedo de fuego la dibujara, no entiendo porqué pero sé que representa un día más.

Ese día al dormir, no dormí más. Desperté del otro lado del sueño. Toda mi vida soñando lo mismo, toda mi verdadera vida contando los días, preparándome. Cómo explicarlo... el momento. Eso es. Preparándome para el momento. Como un relámpago que desgarra toda una eternidad el vacío para cocer por un instante el viento, el cielo y la tierra.

Un parpadeo más, escucho su voz dentro de mi, es la voz del padre de mi hija:

"Una esfera de todas las dimensiones, su brillo me recordaba los reflejos de las pompas de jabón y la superficie de jupiter. La gravedad como en el columpio de Hudwing se enredaba en espirales concentricos. Provenía como olas en altamar, como en el naufragio de Elhim, de todos lados. Como en los primeros tiempos, su vibracion se expandía. El espacio se curbaba. Los látigos de fuego como el horno de Adbed hervían hacia el centro, su núcleo intraspasable era yo, el núcleo y el eterno resplandor. Mil voces convocaron su voz. Resonaron las trompetas de Altair y el tiempo cambió. El espacio, la luz y el sol se unen para que llegue la noche. El séptimo amanecer empieza ahora.

Nace..."

Un parpadeo más.
La espina aparece entre mis dedos con sólo pensarla, pero esta vez no la aplico.
Ésta vez no.
Llegó el momento de salir a la superficie.

Texto: David Calderón
Fotografía: Antonio Perez

Photos from Cosmovisiones's post 02/04/2020

Mirar con claridad a veces requiere cambiar los filtros a través de los que vemos, una nueva conciencia se está gestando en la tierra y depende de nosotros escoger qué queremos escuchar, al miedo o al amor. Así de simple, hablarse a uno mismo desde el amor o desde el miedo, en cualquier circunstancia. El caos remueve las profundidades del ser y la oportunidad de cambio está ahí, en las raíces, la pregunta es cómo te vas a tratar en la crisis, qué mensaje te vas a dar cuando las emociones te abran de par en par. Es un trabajo diario... La naturaleza siempre da mensajes claros al que observa y escucha. No es una nueva creencia, no es una moda, es nuestro propio lenguaje incrustado en cada una de nuestras células. Somos la misma vida hablándonos a nosotros mismos, enseñándonos a vivir, a pensar y a convivir en armonía.

Gracias gran Espíritu, gracias Madre Tierra, gracias ancestros, gracias padre y madre, gracias abuelos, gracias amigos, conocidos y no conocidos, gracias vida.

🗻🗻🗻🗻🗻🗻🗻🗻🗻
Parque Nacional El Cañi, en Mapurungun hacía referencia a mirar con claridad. @ Santuario El Cañi

Timeline photos 10/03/2020

Gracias San Pedro ¡Hasta pronto!

🌋 🌋 🌋 🌋 🌋 🌋 🌋 🌋 🌋 🌋

Timeline photos 15/02/2020

Las notas del alma:

Ella susurró te amo y se abalanzó sobre él.

Él flotaba en infinitos granos de arena.

Ella rescató un reclamo y se alejó de él.

Él sintió al mar recoger sus aguas.

Ella volvió y se fue mil veces.

Él siempre la recibió.

Timeline photos 31/12/2019

Reconozco el piso que tocan mis pies.
Reconozco los Apus a mi alrededor como sagrados.
Y me reconozco a mí mismo como Apu.

Aho! Gracias vida por un año más, gracias por tanta abundancia de bendiciones siempre.

Gracias...

------

📍Volcán Laskar 5.500 mts. En Kunza quiere decir Lengua de Fuego 🔥

Timeline photos 23/05/2019

16 de Junio de 2017
Colonia, Uruguay 🇺🇾

"Me encuentro fuera de mi centro, girando a máxima velocidad y me surje la inevitable pregunta.

¿Cuándo es correcto salirse de nuestro centro?... ¿Nunca? ¿Siempre? ¿Debemos esperar a que sin esfuerzo extra las cosas simplemente se manifiesten, o debemos empujar tan fuerte como podamos hacia el destino deseado? Hoy te bendigo y te maldigo, libre albedrío, por dejarme ser el capitán de mi vida".
.. Hoy 2019 creo que tenemos que empujar con paciencia, poquito a poquito, ¿ustedes?

Timeline photos 18/05/2019

Un pequeño cuento sobre esta foto tomada en la reserva de Sian Ka'an, México 🇲🇽 hace como un mes:

http://bit.ly/menosdelmar

Timeline photos 16/05/2019

Lo miró con ojos de amor, recordando que la inocencia nos enaltece y nos recuerda que un día no hubo palabras ancladas, ni recuerdos que anhelar. Y aún así, encontrábamos porqué llorar. Yo me pregunto algunas tardes frente al mar si alguien me mira con ternura mientras transito el vaivén de los deseos, si alguien me escucha mientras escucho yo mis pensamientos y si acaso alguien me abraza sonriendo en un eterno silencio aunque yo, empedernido y embelesado, no pueda sentir sus brazos.

Porto Alegre, Brasil 🇧🇷 2017

Timeline photos 10/05/2019

Aún si pudiera deshilarte vida mía, aún si pudiera saber lo que espera a la vuelta del camino... no lo haría, no adelantaría una sola vivencia... Todo a su tiempo ⏳

Timeline photos 18/04/2019

El Faro de Mario Benedetti

A aquel faro le gustaba su tarea, no sólo porque le permitía ayudar, merced a su sencillo e imprescindible foco, a veleros, yates y remolcadores hasta que se perdían en algún recodo del horizonte, sino también porque le dejaba entrever, con astuta intermitencia, a ciertas parejitas que hacían y deshacían el amor en el discreto refugio de algún auto estacionado más allá de las rocas.
Aquel faro era incurablemente optimista y no estaba dispuesto a cambiar por ningún otro su alegre oficio de iluminador. Se imaginaba que la noche no podía ser noche sin su luz, creía que ésta era la única estrella a flor de tierra pero sobre todo a flor de agua, y hasta se hacía la ilusión de que su clásica intermitencia era el equivalente de una risa saludable y candorosa.
Así hasta que en una ocasión aciaga se quedó sin luz. Vaya a saber por qué sinrazón mecánica el mecanismo autónomo falló y la noche puso toda su oscuridad a disposición del encrespado mar. Para peor de los males se desató una tormenta con relámpagos, truenos y toda la compañía. El faro no pudo conciliar el sueño. La espesa oscuridad siempre le provocaba insomnio, además de náuseas.
Sólo cuando al alba el otro faro, también llamado sol, fue encendiendo de a poco la ribera y el oleaje, el faro del cuento tuvo noción de la tragedia. Ahí nomás, a pocas millas de su torre grisácea, se veía un velero semihundido. Por supuesto pensó en la gente, en los posibles náufragos, pero sobre todo pensó en el velero, ya que siempre se había sentido más ligado a los barcos que a los barqueros. Sintió que su reacio corazón se estremecía y ya no pudo más. Cerró su ojo de modesto cíclope y lloró dos o tres lágrimas de piedra

Timeline photos 28/02/2019

Zamá para nuestros corazones ❤️... La historia cuenta que el dios del aire se acercó por el mar, guiado por la búsqueda de unas cuantas almas y su gran necesidad de aprender, de evolucionar. Kukulcán navegando el viento transmitió sus enseñanzas... Hasta el día de hoy en la ciudad de Zamá, que quiere decir amanecer, descansa su antigua enseñanza esperando el despertar, esperando el amanecer.

Timeline photos 27/02/2019

Cuando cambio la forma en que miro las cosas, las cosas que miro cambian.

Timeline photos 07/02/2019

El movimiento de las olas,
día y noche, viene del mar,
tú ves las olas, pero, ¡qué extraño!
no ves el mar.

Cada momento se precipita hacia nosotros desde todas partes
la convocatoria del Amor.

–Rumi

Brasil 😍

08/01/2019

De nuevo el balanceo... parece haberme seguido toda la semana, o quizá, toda la vida.

Retiré la delgada línea de mi pupila que capturaba los reflejos de ella, sentí inmediatamente la contracción, y luego la calma.

Ella tenía mil rostros y yo, sólo uno. Todo era como un sueño lúcido o una película interminable... una que nunca se sintió del todo real.

Solamente durante el balanceo, siempre ahí, en ese místico momento.

Regresé la mirada y enfoqué, tan agudo que pude presenciar sus ojos equilibrándose en los de ella, estaba a punto de pasar, estaba seguro.

Dos a punto de olvidar lo fútil de éste sueño, dos a punto de explotar en el ligerísimo movimiento de dos almas en beso, dos en ese tan breve y frágil balanceo.

Sanar - Jorge Drexler 23/12/2018

Llevo varios días queriendo escribir esto, y bueno, hoy después de ver una(1/2😮) obra muy linda que habla sobre la familia, me nace por fin escribirlo.

Es un sentimiento personal y profundo, sin embargo lo comparto para mi familia, y también para mis amigos que están lejos de su familia.

Tengo, por delante, el segundo viaje largo en mente. En palabras de cualquier mochilero sonaría algo como "arranco". Y el dilema no es arrancar, es: amar y soltar... repetidas veces, y en este caso, repetidas personas y esas son mi hermosa familia.

Hoy que lo siento, lo escribo, porque sé que cuando "arranque" mis ojos embelesados habrán soltado mi parte del miedo y sonreiré con cariño, sin pesar y sin alguna prisa, aguardando el siguiente encuentro.

He aprendido que ningún sentimiento es malo, que todos nos están enseñando si decidimos prestar atención. Así que decido expandir esta nostalgia y plasmarla para verla de frente:

En economía hay un término, "valor de pérdida" y hace referencia a los recursos perdidos al tomar una decisión excluyente. El ejemplo más sencillo es: alguien te ofrece tomar agua de sandía o de melón y sólo puedes escoger una. El valor de pérdida es el agua que no escogiste.

Creo que se entiende al punto al que voy, esta vez, por segunda vez apunto a la aventura. Conociendo, un poco más, los múltiples valores de pérdida y las grandes ganancias. Y ninguno me pesa más que uno y ese es el tiempo y el espacio. El tiempo que no voy a tomar un café con mis papás sonrientes frente a mi, el espacio que me separará de darle un abrazo a mis tiernas y cansadas abuelitas. El sonido distorsionado de la risa de mi hermana por el auricular. Es preciso cuando se ve de esta manera, aprovechar los momentos juntos y tener cerca del corazón las memorias… La pregunta que me hice a mi mismo es, ¿aún así te quieres ir? Y me respondí que sí...

Porque lo siento, con una fuerza tan suave y sutil que cada que en verdad estoy atento es imposible no percibirla. Porque durante estos 10 meses en México he tratado de aprovechar los momentos, de realmente pasar tiempo y no sólo sentarme cerca. Porque cada uno tiene un camino y hay que ser feliz para poder compartirlo.

Hace unos días un sentimiento me abatió y me dije a mi mismo: "David, ¿en verdad te tienes que ir? Puedes tener un trabajo aquí en la ciudad, ganar buen dinero y estar cerca de tu familia". Me salieron lágrimas de los ojos... Mi camino no va por ahí, más allá del dinero y la seguridad existe un sentimiento en mi, uno que se aprende a escuchar cuando viajas sin rumbo, sin plan, ni mapa. A mi me gusta llamarlo intuición y está plasmado eternamente en mi pecho. Es el llamado de dentro, es casi como una brújula interna que muchas veces contradice a la razón. Una vez que la escuchas... una vez que te escuchas, es imposible ignorarte.

En mi último Temazcal, cuando nos pidieron que pusiéramos en el fuego algo que quisiéramos quemar, yo quemé el apego; y cuando nos dijeron que pidiéramos algo, yo pedí valor para seguir lo que siento, y lo pido hoy una vez más. Y es que en mi familia, si algo nunca faltó fue amor. Y quiero siempre pagar con la misma moneda.

El cambio es contrastante y emocionalmente cargado, un viaje en todas las dimensiones, y para mi, uno de los más grandes maestros.

Por eso hoy quiero decir, escribir, plasmar y dedicar a los que amo y están cerca, a los que amo y están lejos: Que ahora que estoy cerca me llena el corazón abrazarlos, que cuando esté lejos... donde quiera que me encuentre mandaré mi amor, y confío que viajará cruzando el espacio. Y deseo a los que nos amamos y estamos lejos, que siempre nos despierte en la noche un suspiro, un abrazo del alma que diga: "aunque no esté, te prometo… estoy contigo". Y que sea verdad esta promesa, más allá de la física y de la razón. Que realmente una parte de mi esté ahí contigo.

Pd: Estoy feliz, sólo quiero compartir un sentimiento interno que me ha dado vueltas...

Sanar - Jorge Drexler IMPORTANTE | IMPORTANT [no soy dueño de ningún copyright de esta canción, mi intención es sólo difundir para mostrar el talento de este gran artista] [I do n...

22/11/2018

¿El lugar da poder a la creencia o la creencia da poder al lugar?

¿La fe nació vacía o el hombre ha puesto tantos nombres a Dios por algo?

23/10/2018

El punto más alto al que he llegado fue unas pocas horas después de esta foto, aproximadamente unos 5,600 msnm. Lo impresionante no es la altura, es lo bien que me sentía.

Por ahí hay gente que dice que "tus experiencias definen la persona que eres". Me encanta pensar sobre esto en una linea rítmica que tiene subidas y bajadas, a qué me refiero con esto:

Creo yo, que definitivamente lo que vivimos nos define y no sólo metafóricamente o en cuestión de aprendizaje, lo que vivimos cambia la forma en la que nuestros genes se expresan, así que no sólo eres una mente-percepción en circunstancias diferentes, eres un ser biologicamente diferente... Puuuum qué explosión mental.

Y luego regresas a un ambiente conocido, casa por ejemplo, el cerebro sufre una falta de excitación neuronal. Por eso duele regresar del viaje. La pregunta de todo viajero, ¿cómo mantengo mis ojos (cerebro) abiertos como si todo fuera desconocido aún en casa? La respuesta... LCD jaja no es cierto, la respuesta no la sé, aunque tal vez pueda ser seguir aprendiendo. En mi caso, fue decidir que estoy en el lugar que estoy por una razón y que me está llevando a un aprendizaje, motivo por el cual debo mantenerme con los ojos abiertos, dos, decirle a mi cuerpo y mente que si no se viaja se construye y que el viaje está por regresar y tres, buscando actividades y conociendo gente nueva en la ciudad (me mudé al centro en CDMX).

Viajeros, ¿cómo se mantienen con los ojos abiertos en casa?

Abrazo,

David Calderón

10/10/2018

La puerta a la felicidad.

Hace mucho tiempo un maestro que había alcanzado la paz interior recibió una visita inesperada. A su puerta se encontraba un viejo amigo que llevaba de la mano, casi cargando, a un niño sucio y arañado que no dejaba de llorar. El viejo amigo explicó que los padres y hermanos del niño habían mu**to en un incendio. Le pidió durante largo rato que adoptara al niño como suyo. El maestro consternado por la mala fortuna del niño al fin aceptó.

Los años pasaron y el niño se convirtió en un joven fuerte e impetuoso. Desobediente e irreverente ante los consejos del maestro.

Después de mucho meditar un día el maestro decidió enseñarle al joven a ser feliz. Lo llamó a su recinto y le anunció: "Hoy voy a ayudarte a dar el primer paso para ser feliz". Como era costumbre el joven refunfuñó y estaba a punto de dar media vuelta e irse cuando el maestro le dijo: "Antes de ayudarte debo decirte... —dijo el maestro tragando saliva—. Por mucho tiempo cargué tus p***s conmigo, te escuchaba llorar a tus padres por las noches e incluso solté lagrimas por ellos. Miré tu alma solitaria y a pesar de tus palabras hirientes hacia mi, te abracé. Sentí tu espíritu pesado y acepté llevar en mi espalda el trabajo de la casa que te correspondía. Palpé tu deseo impaciente por paz y te escribí en poesía mis aventuras, para que así viajando conmigo pudiera absorber tu corazón mi paz. Sin embargo nada sirvió. No importaba cuanto dolor quisiera tomar de ti, no curaba ni un poco tu carga. Sin embargo hoy el día me ha dado un gran regalo, uno que hace tiempo había olvidado... hoy me sentí ligero y todo fue ligero a mi alrededor, hoy me sentí alegre y todos sonreían en la calle. Hoy descubrí que no había libro que pudiera darte, ni carga que pudiera tomar de ti. Hoy al ver el mismo hastío con el que me recibes cada mañana le he regresado una sonrisa de amor. Hoy querido hijo... es el último día que me acompañas aquí. Entiendo que no es que no me ames, es que has vivido donde no has querido vivir. Y no importa que miel te diera, era amarga para ti. Hoy te regalo mi último consejo: Cuando salgas de esta puerta y no regreses, no culpes a nadie por ti. No alabes, no ames, ni llores sin saber que lo haces por ti. Sin embargo hijo mio un día, de un gran brillo carmesí. Tomarás el corazón en tus manos y aprenderás a amar por que sí. No por ellos los que te piden, ni por que vivas en un frenesí. Amarás por que la vida una flor ha sembrado en ti.

Se despidió el maestro amoroso y le pidió que tomara las monedas que guardaba desde antaño. El corazón del joven atormentado, confundido y alterado se movió a traspiés hacia su habitación. Tomó sus escasas cosas y arrastrando un poco el pie se encaminó a la salida. Titubeó, volteó y retrocedió, sin embargo, el corazón testarudo del pecho lo lanzó y pasó que al cruzar la frontera entre la casa y el hollín, el corazón del joven guerrero se convirtió en un colibrí. Bombeó tal sangre a los ojos que parecía este ser, de todos los amaneceres el que soñaba sin fin.

Un día en la puerta del maestro sonó un sonido estridente, con el peso de los años movió el viejillo su cuerpo, tomando en cada movimiento una breve inhalación. Al abrir el pesado portal, recibió un encanto de magia, un divino viento de cambio y una sonrisa para si. Estaba en la puerta sonriendo un hermoso colibrí. Ese día y sin ningún peso extra el maestro soltó de si, toda su existencia y todo su porvenir. Había encontrado en su vida como pasar su intención. Como conectar un alma y realmente ser feliz.

26/08/2018

"Decidimos llegar a un consenso y hacer una declaración para el público que no es científico. Es obvio para todos en este salón que los animales tienen conciencia, pero no es obvio para el resto del mundo. No es obvio para el resto del mundo occidental ni el lejano Oriente. No es algo obvio para la sociedad."

—Philip Low

Videos (show all)

Website