Conchi Escudero, Terapeuta.

✋Límites✋

La mayoría de nosotros no hemos aprendido a poner límites.

En nuestra historia, lo más común es que al poner límites, nos hayan obligado a obedecer, hacer caso, no molestar, atender más la necesidad del otro que a la nuestra.

Y seguramente, cuando hemos puesto límites, se nos haya culpado de hacer sentir mal al otro, de ser "niñxs malxs".

Por tanto, a muchxs de nosotros se nos hace muy difícil poner límites.

Pero lo cierto es que poner límites es fundamental para nuestra salud mental, emocional e incluso física, así como para establecer relaciones sanas en las que no nos perdamos en las necesidades del otro.

No poner límites puede llevarnos a un desgaste que al final será devastador tanto para nosotros mismos como para nuestras relaciones.

Aprender a poner límites, qué límites y cómo ponerlos, puede ser el inicio para tomar las riendas de tu vida, para empezar a darte tu sitio y darle su sitio a los demás.

Si quieres, me encantará ayudarte a conseguirlo.

🌹📚 Día del Libro📚🌹

Para celebrar este día te comparto un libro que creo que todos deberíamos leer.

Aunque se considera infantil, es una historia que para mí tiene cabida a cualquier edad.

Una historia que pone en valor nuestro tiempo, las pequeñas vivencias que nutren nuestra vida, disfrutar del momento.

Los hombres grises decían "el tiempo es oro, ahórralo", Momo respondía "el tiempo es vida, y la vida reside en el corazón".

El Trabajo Social Clínico (TSC) es una especialidad terapéutica dentro del Trabajo Social que aborda el malestar psicosocial de las personas, familias, grupos, de forma integral, teniendo en cuenta las dificultades y las fortalezas individuales de la persona, pero también las circunstancias relacionales, familiares, económicas y sociales que rodean a la persona y a su situación.

Además, como Trabajadores Sociales, podemos intervenir en el contexto y ofrecer asesoramiento y gestiones de recursos que tanto el individuo como la sociedad tienen y que pueden ayudar a mejorar la situación de las personas que acuden a nosotros.

¿Conocías esta especialidad del Trabajo Social?

El camino para encontrarte a ti mism@ es el único que te llevará a donde de verdad quieres y mereces estar. No será fácil, no será rápido (o quizá sí, quién sabe), pero será apasionante y convertirá tu mundo en un lugar nuevo, porque tú serás alguien nuevo.

Lo normal es pensar que no nos desarrollamos o no nos atrevemos a dar ciertos pasos porque tenemos miedo al fracaso.
Y sí, es cierto, eso puede tener mucho que ver, claro. Lo gracioso es que, en muchísimas ocasiones, pero muchas muchas, me encuentro con personas que al final descubren que también tienen un miedo atroz al Éxito. Sí, sí, al éxito. Que conocen sus capacidades, que saben que en realidad son perfectamente capaces de hacer eso que llevan queriendo hacer desde que recuerdan, pero que lo ignoran, lo dejan pasar, se "hacen los locos", ponen excusas y al final se sigue quedando todo en un sueño utópico.
Y es totalmente NORMAL. Porque cuando tu papel en la vida es la que no puede, la que no sabe, la que no merece, la que eso no es para mí... es muy complicado dar el salto a ser la que sí puede, la que sí vale, la que sí es capaz, la que sí merece. No sabemos estar en ese sitio, nos da miedo lo que eso puede provocar en nuestro entorno, de repente ser fuertes, existir en todo nuestro esplendor, ocupar nuestro espacio.
No ignores tu potencial, está ahí para ti.

Siempre he tenido una sensibilidad especial para captar las emociones de quienes me rodean. A veces mis amigos me llamaban bruja porque podía "adivinar" lo que les pasaba. Y, por alguna razón, solía encontrar la forma de hacerles sentir mejor, ayudarles a encontrar una nueva visión, un nuevo camino o sentirse acompañados al menos.
Es curioso, porque para mí era muy claro, muy fácil de ver lo que estaba pasando y cómo encontrar un camino para transitarlo o superarlo.
Irónicamente, toda esa claridad que tenía con los demás, no la tenía conmigo misma. Siempre he sido una niña, adolescente y mujer insegura, con miedos, queriendo no ser vista, sintiéndome incomprendida, no querible, no merecedora, sola. Y era imposible encontrar el camino para transitarlo, para sentirme mejor, para encontrar mi amor propio, mi seguridad.
Esas sensaciones me llevaron a intentar comprender el por qué de sentirme así, buscar una forma mejor de poder vivir, encontrarme a mí misma.
Ese camino ha sido duro, y aún lo es, duele remover las heridas, y al mismo tiempo es enriquecedor, precioso y liberador.
Y desde este punto, miro a otras niñas, adolescentes o mujeres (y también niños y hombres, claro), que pueden sentirse como yo me sentía. Y entonces sólo puedo desear acompañarles, mostrarles que hay otras formas de vivir, que están equivocadas, que sí son valiosas, queribles, merecedoras, que hay conceptos en la sociedad que son erróneos y nos los hemos creído.
Y aquí estoy, trabajando y viviendo para que la vida de esas personas que pueden estar donde yo estuve, sea la vida que merecen.

Maravilla de post

No perdernos de nosotros mismos. En la alegría, la tristeza, el miedo, el amor.
Donde estemos, con quien estemos.
Siempre de nuestra propia mano.
.tst

Soy Conchi, tengo 39 años, soy mamá de una pequeña terremoto y vivo en un pueblo de Sevilla.
Soy Diplomada en Trabajo Social, Mediadora Familiar, especialista en Terapia Gestalt y Fotógrafa Emocional.
Mi propósito es acompañarte en tu autodescubrimiento, tu crecimiento personal, la búsqueda de tu amor propio y tu esencia. Apoyarte en el tránsito por situaciones difíciles, encontrar tu camino y florecer.
Espero que aquí encuentres un lugar donde sentirte en casa y llevarte gotitas de mis experiencias y aprendizajes que te sirvan para crecer.
Bienvenid@

Conchi Escudero, Terapeuta. is now on WhatsApp.