Repostería creativa, nutritiva y deliciosa: un bálsamo para el cuerpo y el alma Suelo endulzar con aguamiel de agave, miel de abeja, dátiles, o frutas.
Me llamo Carolina Ruiz, inicié este proyecto como un regreso a mis raíces, como un tributo a la gran tradición de repostería que ha llegado hasta a mí desde Polonia a través de tantas generaciones de mujeres que nutrieron a sus familias al mismo tiempo que les regalaban un momento de dulzura, en especial a mi abue Lillian Safier, de quien aprendí mucho de lo que sé y quien me enseñó con amor y pa
ciencia. Todas mis recetas son creaciones únicas y espontáneas, y hasta ahora eran completamente efímeras, pues jamás anoté alguna receta. Ahora a través del video estoy tratando de dejar registro de lo que hago cada día sin renunciar por ello a sorprenderme con algo nuevo cada vez. Las recetas que hago surgen de la inspiración de cada día, de las vivencias, los antojos, descubrimientos culinarios y las necesidades de un cuerpo y una mente que se hacen presentes a cada momento durante el proceso de preparación. Se van creando sobre la marcha, se ajustan con cada nuevo ingrediente que me pide, de forma intuitiva, que añada algo más. Por ello, para mí la experiencia en cada ocasión es irrepetible, así como los segundos de la vida, que nos sorprenden una y otra vez, que se van para nunca volver, mi repostería no está pensada para añorarse en el recuerdo, cada creación busca construirse como un momento único que me sorprenda como una “primera vez”. Los ingredientes son fundamentales, todo entra en la categoría de comida de verdad, sólo uso alimentos no procesados, de preferencia orgánicos, cereales integrales (avena, amaranto, sorgo, cañihua y quinoa son algunos de mis favoritos), me encanta incluir muchas semillas y especias y por supuesto fruta a montones (mi alimento favorito en el mundo). Todo es libre de azúcar, de conservadores, colorantes y químicos, o cualquier substancia que pueda ser nociva para mi cuerpo. La repostería que sale de mi horno no está pensada como “un postre dañino”, por el contrario intento que sea un alimento completo que pueda nutrirme y reconfortarme a la vez. Intento no comer nada que pueda hacerle daño a mi cuerpo o al de las personas con las que comparto mi repostería. Así que pueden comerlas sin culpa, incluirlas como parte de un desayuno saludable o un refrigerio entre sus comidas, son ideales para dárselas a los niños pues son completamente saludables. Me encanta preparar opciones sin gluten, lácteos o huevos, creo que sin importar cuáles sean tus necesidades y restricciones específicas puedes comer algo delicioso, todas las dietas especiales encontrarán un espacio en esta casa. Bienvenidos a mi casita, espero que la disfruten.