Waki.pvc

Hola camaradas: Esta página la realicé para interactuar sobre cuestiones culturales y de artes.

15/11/2023

Segunda Gira Por Las Universidades...(Militando La Literatura Delictiva).
Gracias Facultad De Ciencias Sociales!!!

Photos from Waki.pvc's post 21/10/2023
14/10/2023

Si no escribo poesía me muero
¿Cómo hacer de la literatura una ciencia y una política de la vida?

🗓️ 20 de octubre, 17 horas.

📍Aula 1307, Pabellón Cero + Infinito. Exactas UBA, Ciudad Universitaria.

🔸Gastón Brossio, escritor y docente. Autor de la Colección Catarsis.
🔸Nair Repollo, coordinadora de Exactas en el Programa UBAXXII (educación en cárceles)
🔸Juan Pablo Parchuc, docente e investigador. Programa de Extensión en Cárceles.
🔸Coco Cerrella, diseñador y activista gráfico. Taller de Diseño Gráfico CUD.
🔸Alex Schmied, editor. Tren en Movimiento.

Conversaremos sobre la obra de Gastón Brossio (Wk) y las posibilidades abiertas por la educación y la escritura en la cárcel para crear nuevas formas de vida.

En la actividad podrán adquirirse los libros del autor editados por Tren en Movimiento:
◼️ 17. Autobiografía de un profesor (la vida de un gusano) (2021)
◼️ 48. El mu**to que escribe cuentos (2018)
◼️ 118. Cien veces muerte (2017)
◼️ 79. El ladrón que escribe poesía (2015)

19/02/2023

“[T]enemos "algo" parecido a un baño, que tiene cuatro letrinas frente a dos inodoros, que tienen todos rotos los tanques de agua, lo que permite una doble función, ducharse y c***r al mismo tiempo, ¡alta promoción!"

Gastón “Waikiki (Wk)" Brossio, 48. El mu**to que escribe cuentos, 2018, p.50.

[El] contraste entre la ley como re-inserción, y la realidad carcelaria como deshumanización se percibe claramente en “Tus palos”, poema en el que la escritura, en la medida en que canaliza la expresión del sujeto detenido, permite contrarrestar la opresión, y transformarla en palabras: “Tus palos: / Pasaron a ser el alimento de mi pluma…/ El hostigamiento psicológico: / Me infló como piñata de odio, / Para darle empirismo a los textos…” (Wk, 2015, p.115).

Con cada trazo de escritura, la imaginación escapa de la mente de Gastón Brossio[: “Trato de evadirme de todo, tengo la fuga, pero es mental” (2018, p.48),] y abre un túnel que le permitirá “evadirse” de la deshumanización carcelaria y avanzar hacia una “vida vivible”…: “aunque ni la imagen ni la poesía puedan liberar a nadie de la cárcel… ni… invertir el curso de una guerra, sí ofrecen las condiciones necesarias para evadirse de la aceptación cotidiana… y para… que… fomenten llamamientos a la justicia y al fin de la violencia” (Butler, 2010, p.27).

En un ámbito donde se busca quebrantar, sistemáticamente, las resistencias del sujeto, la propuesta educativa y cultural abre un “espacio de incidencia en la subjetividad de los detenidos en vistas a restituir humanidad” (Umpierrez, 2016, p.1-2). En ese espacio que se abre, la escritura de Gastón prolifera como “el musguito en la piedra” (1), llenando de vida el espacio carcelario inhóspito con comparaciones y metáforas incrustadas…: “en el secundario de la prisión… comencé a escribir frases en los pizarrones… una pared sin nada… es como un lago mu**to… Es como una mariposa albina que se muere por falta de colores” (Brossio, 2017, p.12).

Fragmento de Literatura fugitiva. Ponencia sobre la proliferación de la escritura y la vida en Gastón “Waikiki” Brossio por Yesica M. Páez (2022), Trabajo Final para el Seminario de Juan Pablo Parchuc: Escritura e Intervenciones con la Literatura y el Arte en la cárcel, Facultad de Filosofía y Letras, UBA.

Notas:
(1)Violeta Parra, “Volver a los 17”.
Imagen: https://www.pagina12.com.ar/27236-yo-estaba-en-guerra

Bibliografía
Butler, J. (2010). Marcos de guerra. Las vidas lloradas. Buenos Aires, Paidós.
Umpierrez, A. (2016). La Universidad entra a la cárcel, la cárcel entra a la Universidad. En Fermentario, núm. 10. En línea: http://www.fermentario.fhuce.edu.uy/index.php/fermentario/article/view/235
Wk (2015). 79. El ladrón que escribe poesía. Temperley, Tren en Movimiento.
Wk (2017). 118. Cien veces sangre. Temperley, Tren en Movimiento.
Wk (2018). 48. El mu**to que escribe cuentos. Temperley, Tren en Movimiento.

Waki.pvc **toqueescribecuentos

03/09/2022

Noche De Radio 📻

04/05/2022
05/09/2020

Autobiografía de un Gusano(segundo Libro).
Capitulo 1.
Una Promesa Rota

Luego de dos sueños, el primero que me iba volando, en un vagón de tren, hacia el cielo y el segundo que decencia hacia el in****no, desperté. Desperté a la madrugada en una clínica privada, vomitando toda la sangre, que tenía en el estómago, a causa del disparo que recibí en la cara y otro perdigón de hitaca 12:70, que me pego en la nalga izquierda. Desperté en una cama, con los ojos desesperado y empecé a vomitar sangre, mucha sangre y los médicos me decían, cálmate flaco, cálmate y yo gritaba no puedo, no puedo, entonces me sujetaron y me inyectaron algo que me desvanecí de toque…
Cuando desperté nuevamente, era el horario de visita. Entro mi papá primero y yo estaba todo entubado, todos los brazos y la boca con tubos. Tenía 17 años todavía, era septiembre del 99, recuerdo que lloraba mucho, y cada familiar que veía, era como por primera vez en la vida y repetía, Dios Me Salvo, No voy a Robar más, Dios Me Salvo, No Voy A robar Más…
Dos semanas después, salía de la Clínica “Los Cedros” de Tapiales, donde me había salvado la vida, donde me dieron otra oportunidad (de parte de Dios), para que cambiara mi vida. Pero solo conocía un oficio y tarde o temprano, las promesas se olvidan y aunque llores por romperla, uno siempre quiere salir adelante, por más promesa que haga. Nos fuimos a la casa de mi madrastra Rosa, en la villa insuperable. Nos aguantamos un mes, junto a la madre de mis hijas, en aquella vivienda, hasta que nos pudrimos y nos dimos a la fuga, (Gran Error).
Nos fuimos a Moreno, a Vivir con mi compañero Osvaldito, que vivía con su mujer Alejandra y sus hijitos, yo estaba con mi nena más grande y la otra bebe que crecía en la pansa de su madre. Todo era tranquilidad porque no estaba en el barrio y las mañanas olían a pasto mojado, y por la noche el humo de los pastos quemados se juntaba con el oxígeno de los árboles. El sol brillaba con mayor intensidad, mi cuerpo estaba todo el día sonriendo por dentro, todo me parecía mágico, por así decir, pero es difícil manejar la mente, y ella solo quería progresar.
En el mes de octubre, noviembre de ese mismo año, apenas un mes o dos de perder casi la vida, estaba rompiendo mi promesa. Promesa que dejaba al desn**o mi humanismo, ósea, tropezar con la misma piedra, más de una vez y culparla de no tener sentimientos…
Uno de esos días me vino a buscar a Moreno, el Rengo, y el finadito Pete (Jorge), con quien me había separado desde chico, porque comencé a parar, con la banda de Rosendo. Pero la vida da vueltas y el destino nos juntó de nuevo, para la maldad, para robar, saquear y destruir, tal como lo remarca la sagrada escritura…
Ese día no estaba el Osvaldo, sino, no me hubiera dejado ir. Aunque yo me mandaba solo, él intentaba protegerme, pero no se puede proteger, a una persona de ser uno mismo, de poder tener sus propias decisiones, de su actuar. No se puede proteger, porque, uno se va moldeando de acuerdo a sus pensamientos y yo no tenía dinero, solo recibía la ayuda de algunos compas, aunque las ayuda, para una persona orgullosa, solo son aceptada una vez y eso es todo, uno tiene brazos y piernas, ósea, la mano de obra y yo estaba medio rengo pero podía salir a Robar, aunque todo es más lento…
Vamos a Laburar un Supermercado Disco Dentro de un Shopping?, Donde es? Tenemos un trucho, un par de fierro?... Bueno tenemos dos pi***la y un 357, el Ford fiesta que está en la puerta, es nuestro y con eso vamos a llegar, el problema es que Pete conduce astilla, pero conoce el camino y a la vuelta maneja vos.
Ok vamos. Me cambie y le mentí, a la madre de mi hija que me iba, a ver un laburo. Nunca quise decirle la verdad de mis temas laborales, cuando me preguntaba, siempre le decía que iba al sur y me iba ala norte, y así esquivaba la verdad que la pudiera comprometer, puesto que, le convenía no saber, porque si algún día le tocaba ser torturada por la policía, solo iba a decir mentiras…Siempre le decía, te conviene no saber, te conviene no saber…
De Moreno nos fuimos a Adrogue, nos cruzamos medio buenos aires, y en el camino íbamos riendo, porque no llegábamos más. El Shopping se llama Boulevard de Adrogue, y estaba ubicado en la Av. Hirogoyen, al sur, bien al sur. El lugar es grande, como El Shopping del Abasto, un poco más grande.
Cuando llegamos dejamos el auto del lado de afuera, no entramos al estacionamiento y era unos 20 metros caminando y yo tenía que andar despacio, porque la herida de la pierna estaba fresquita. Yo entre y encare para la puerta que daba al paseo de compras, pero todos empezaron a correr para adentro del paseo de compras y ya estábamos re jugados. Los otros pibes saquearon las cajas y al toque, vamos, vamos guacho ya está. Y salimos medio despacio, porque tenía que caminar tranca palanca.
Los de seguridad ya venían para donde estábamos nosotros, pero no se animaron a nada, ya que teníamos los fierros en la mano, junto con el botín. Abordamos el vehículo y nos fuimos rumbo a Moreno.
Una vez que llegamos, fuimos a una pieza a repartir, y ya estaba todo dicho, la promesa que había hecho se rompió aquel día, por la noche cuando llego el Osvaldo y se enteró que me vinieron a buscar para robar, se re enojo, agarro sus dos pi***la y quería ir a lastimar a los otros pibes que me vinieron a buscar, tuve que tranquilizarlo, porque era muy impulsivo y llorando en la terraza como dos amigos, no tuvo más remedio que aceptar mi vuelta a las andanzas…

24/08/2020

El ultimo día.
Era el último día para matar la incertidumbre de una vez por toda. Ya habían pasado los alegatos, la defensa no había leído mucho la causa(como era de esperarse), quise contribuir en éste aspecto con explicaciones innecesarias, porque todo estaba dicho y (todo esto lo sospeche desde un principio).
El escenario estaba armado, una parte de mí, la más desconfiada dudaba de mi pupilo Judicial, puesto que, lo veía tomar café con los jueces, con los secretarios y con el fiscal, aunque éste defensor, me prometió que iban a llegar a un arreglo Jurídico, un Juicio Pactado, con la suma de diez años de condenas, por mi participación en el hecho, puesto que,( le tuve que confesar todo lo sucedido en el asalto que cometimos a una empresa), en realidad me convenció…Me dijo que, como era primario me darían una oportunidad, yo le creí, y da la casualidad, que a los ignorantes se los convence con simples palabras y un poquito de esperanza…
El día anterior le pedí a mi madre que no asistiera al debate, ya que me temía por su salud, solo mi padre estuvo en esos momentos, pero se quedó del otro lado del salón. Unos minutos antes lo bese para darle un poco de serenidad y confianza( le dije que todo saldría bien), que ya sabían los jueces que no había matado a nadie, por la pi***la que habían encontrado en el suceso, aunque tengo que recalcar que los policías habían vaciados barios cargadores de sus pi***las reglamentarias (y de otras que la usan como apoyo), por si se quedan sin balas, nosotros también no somos tan inocentes y el fuego cruzado estuvo de parte de los dos bandos, ellos y nosotros…
Uno sabe que si se dispara una sola vez…Es motivo suficiente para terminar con un agujero en la cabeza, por más que uno se entregue , corre el mismo destino, porque la consigna es clara, “el que aprieta el gatillo una vez, termina siendo la última” y todo esto lo tenía bien en claro, ya que, nunca se me borro de la cabeza, el día que lo mataron a mi mejor amigo Rosendo, en donde el chileno Paolo se entregó y lo arrodillaron, para pegarle un tiro en el medio de la nuca…
A veces la realidad de Fuerte Apache te cultiva la vida de una forma extraña, diferente, en donde permanece la cultura del delito y uno aprende todo lo innecesario y muy tarde se da cuenta que ningún pibe nace chorro, pero tarde ya… Solo son las herramientas conspiradas de un sistema lleno de desigualdades, donde te dan la opción de ser explotado, por un empresario que maximiza sus ganancias con tu sudor o te dan las otras, vender dr**as o empezar a robar, todo con un solo propósito, salir del barrio, para que tus hijos no padezcan nada igual…
Los derechos no pasaban por el barrio, es más, todavía siguen sin pasar, aunque el contrato social nos prometen, vivienda digna, educación y salud, pero ninguna de estas cosas se cumplen, todo es al contrario y encima cuando, das la dirección del barrio, para trabajar te marginan como a un extraño y no te queda siquiera un poco de dignidad.

Yo no quería ser un delincuente, pero a quien le importa eso…Solo te queda aprender lo que te queda a mano, y una vez que empiezas a robar, ya no hay vuelta atrás, es como un espiral donde el epicentro termina siempre de la misma manera, una cárcel, un hospital o mu**to en el cementerio…
Ese fue mi destino durante toda la vida, hasta que en un momento, pude conocer el estudio y los libros y me dieron un golpe terrible a mi subjetividad, me dieron vida donde no la hay, y me permitieron reflexionar, que las personas son mas importante que los objetos y que el arte de la vida se esconde, en la misma vida…
Papá estaba del otro lado de la puerta, sentía su presencia (y él también la mía), al menos eso presumí…Me encontraba sentado al lado del defensor oficial, que me tranquilizo, tenía la cara de bueno. Yo no entendía mucho, para mí era todo como el latín, como aquella frase del poeta Virgilio; “LAURUS MOLTO METUS SERVATA PER ONNO”, (los laureles conservado por el miedo durante tantos años), y en mi cabeza solo una frase, MEMENTO MORIRE, “recuerdas que eres mortal “…
Son muchas las sensaciones que se viven unos minutos antes de la condena, son muchos los recuerdos, muchas las imágenes, muchos los miedos aterradores que te golpean,( como los policías que me torturaron en la comisaria), más allá que no era inocente, estaba dispuesto a pagar mi conducta antisocial, no me quedaba otra, pero, “las torturas estuvieron de más”. Pensé en Jesús, pero fue en vano, él ya había mu**to y yo no era un santo…
Los jueces entraron por una puerta de costado con el veredicto en las manos… El abogado y yo nos levantamos y luego nos sentamos, la sentencia estaba a punto de ser leída. El hecho se relató con un poco de ironía y con miradas fuerte hacia mí… El defensor me apretó las manos con fuerza y me susurro al odio, prepárate para lo peor… ¿pero cómo? Conteste…Usted no me había dicho que era un juicio pactado…Pregunte ingenuamente. Le reproche que me prometio diez años, y me contesto, que no habían querido hacer el trato. ..Entonces mi corazón empezó a latir con más rapidez, el aliento se quedó suspendido en mi garganta…
Aunque reconozco, que cuando me agarraron no era un niño y que tenía 20 años, apenas dejaba la adolescencia y me convertía en un adulto, un adulto que había dejado de ser niño, a los siete años cuando en el barrio donde vivía, vio tirado por primera vez el cadáver de un muchacho que lo había matado la policía. Pero como todo se sabe, en esta vida los oficiales tienen licencia para matar, con aval del estado y de una sociedad, que mira para otro costado, cuando estas cosas le suceden a personas de escasos recursos. Y lo paradójico de esto, es que solo se investigan a los represores del proceso y no a los asesinos de la democracia…
El presidente del tribunal comenzó a leer los sucesos, que pasaron aquel día y concluyo; Si bien, fulano no ha matado a nadie, no cabe dudas que estuvo en el rali delictivo, aquella tarde de enero del 2002, no cabe duda que entraron a la “empresa tal” con fines de robo, no cabe duda que se distribuyeron como un grupo comando, para llevarse el botín del lugar, no cabe duda etc…

…Por todo lo expuesto este tribunal decide condenar al encausado a la pena de “RECLUSION PERPETUA”, a cumplir en una prisión estatal LA PENA DE 25 AÑOS. Cerró la carpeta y se marchó sin más palabras… Mi cabeza comenzó a repetir la cifra ¡25 años! ¡25 años!, el abogado solicito unos minutos, para que pudiera ver a mi papá…
Estaba sentado cuando lo vi entrar a mi viejo, por la puerta que parecía eterna, tenía los ojos abierto como un búho aguantándome las lágrimas, mordía los dientes, para tratar de ser duro, pero algo en mi cabeza me decía, ¡no te voy a ver más viejo, no te voy a ver nunca más! Y continuo caminando, hacia donde estaba yo…Cuando llego me dijo que paso, y temblando le dije, ¡papá, me dieron 25 años, perdóname por fallarte! Y comencé a llorar tanto, que hasta el día de hoy lo sigo haciendo…

La policía sigue matando y torturando…
Mientras que otros, siguen pagando…

13/08/2020

Biografía de un Gusano.
( Segundo Libro).

23 DE DICIEMBRE DEL AÑO 2001

A William Turner un pintor Ingles, le hubiese encantado, retratar la famosa foto, de un sujeto tirando una molotov, en medio del humo, detrás del obelisco, mientras el terror que se vivía tomaba las calles de una Argentina ensangrentada, con represión policial, y con caballos pisoteando, jubilados, comerciantes, protestantes y militantes…
Ese mes, ese año, no fue común, todos andábamos locos, cada uno con su chalequito sobrevivía como podía y nosotros a punta de pi***la reclamábamos nuestros derechos, a los tiros tomábamos por la fuerza, lo que con sutileza nos quitaron, aprendimos a robar cuando nos dimos cuenta, que nos robaban y así como Mostros nos alimentábamos del miedo, ese miedo que también tuvimos desde niños, pero que de mayor, ya se había perdido, a causa de muertes precoces, de infanticidio colectivo, en barrios marginales…
El 23 a la mañana nos juntamos en la tira 6 los pibes, como todos los días, y algunos tenían ganas de robar, pero nosotros ya habíamos laburado, solo quedaba quedarse tranquilo y pasar la fiesta en paz, porque diciembre es jodido para robar, aunque siempre se puede. El Chaque (finado) y el Chino (también finado), junto con el Rengo querían salir a robar, porque no tenían plata, pero yo les ofrecí, al igual que los otros pibes, pero no querían agarrar y querían salir hacer algún trabajito.
Dale Gusano, vos debes tener algo visto! No, nosotros tenemos plata, no da amigo, le emprestamos dinero y listo !. Un día o dos anteriores habíamos ido a robar la casa de pirotecnia, que estaba en frente de la estación de Ramos Mejía, se llamaba “CIENFUEGO”. La robamos, estacionamos un auto en medio de la avenida y entramos con cautela, pero una vez adentro, arrancamos nuestras armas y esto es un asalto, todos al piso. Estaba el (finado) Tateo, que fue quien apretó por casualidad, al policía que estaba vestido de traje, el cual portaba una 9 MM. No recuerdo que otro pibe estaba con nosotros, pero éramos cuatro. El policía cuando lo tenía en una especie de oficina , me quería arrebatar el fierro, o al menos esa era su intención, porque le estaba sacando todas las joyas, que tenía y como me veía medio pibito, me miraba con cara de hacer una jugada extraña, a lo que le dije que se quede piola, porque lo iba a matar y no estaba jugando…
Vamos hacer algo, dale, dale gusano, y en eso se sumó, el Chino, el rengo y el Chaque y le dije, ok no los voy a dejar tirado, vamos juntos, venimos juntos. Tenemos la llave de un BMW negro, pero el problema es; que es Cupe, y somos cuatro pintas. Bueno pero igual, cargamos un toque el baúl y nos vamos… A Que le vamos a dar? Mientras frotaba sus manos el Chaque entusiasmado, siempre lo hacía porque confiaba en mí, y la risa del Chino que siempre, me decía, vamos a rómpele la cabeza guacho!!!
Quiero robarle a la fábrica “Nike”, que está en Panamericana, los pibes de Santa Rita, ya le dieron, pero le cabe de nuevo, sólo que hay que tener cuidado de la fábrica Fred Pierre, que está del lado del frente, que hay una garita, y no sé cuantos custodios o policías pueda tener…Vamos a darle igual, si llevamos con el largo (“El Largo” era un Fusil 7,62, capaz de traspasar cualquier blindaje)…
Rescatamos los fierros, el auto, nos aseguramos que tenga nafta, y nos fuimos para allá. El Auto era de tres puertas nada más, con vidrios polarizados, todo negro, especial para laburar, pero de dos pintas nada más, no de cuatro, porque es incómodo sorprender todos al mismo tiempo. Aun así, agarramos General Paz y nos fuimos rumbo al laburo, creo que era el mediodía, o la tardecita, no recuerdo bien.
Llegando a la salida del Shopping de Unicenter, les avise que estábamos cerca, pero ellos también la conocían. Quién de nosotros, no se había comprado ropa en la fábrica Nike que está en la colectora de panamericana…Dimos una vueltita sobre el objetivo y la gente estaba normal comprando, yendo y viniendo…
Los bajo en la esquina con posición hacia la fábrica, al Rengo y al Chino, él Chaque, se queda conmigo, que vamos a girar en “U”, en la esquina para poder agarrar la autopista al toque... Le digo al Chaque; Anda al lado del al frente, que si sale algún policía, le comes la espalda vos y no nos matan de espalda a nosotros!!! Y me contesto, que no quería. Dale boludo, sino maneja vos, que yo voy hasta que salgan los pibes. No voy a ir gusano. Dale loco, le dije, y vi en sus ojos un presentimiento… ( Yo con Él, teníamos un talento especial, ambos percibíamos el peligro y nos paralizábamos, o nos poníamos más alertas. Posta lo digo).


No llegamos a la puerta, que ya, un Policía salió de la fábrica de al frente. Viste guacho, que tenía razón, ¡Mira!!! Que hacemos Gusano, vamos, vamos! A Donde que los pibes están, ahí adentro amigo? Yo le puse el auto en la puerta de frente March y nos vamos todos juntos, como vinimos…Y fue así…Agachadito me metí adentro de la fábrica, que estaban mis otros compañeros y les dije, guacho agarra rehenes, que la yuta ésta del lado, de al frente. Y nadie me hizo caso…
…Agarré al custodio que estaba en la puerta y lo saque para afuera, y en eso ya habían dos cobani, en vez de uno, y en eso, me dice el Chaque, pásamelo y anda despacito hasta la esquina. Y fue así, llegue a la esquina y Salí del vehículo y los otros pibes le abrieron la otra puerta, para que nos diéramos a la fuga. Cuando estaba llegando, yo tire un par de tiros a los policías y se escondieron, en eso el chaque se sube corriendo al auto, y emprendimos la marcha hacia Fuerte Apache…
Cuando di la vuelta y tomamos la autopista detrás de otro auto, para no pagar peaje y salir de vuelo, los pibes Re contento me decían, gracias Gusano, no nos dejaste tirado, gracias amigo, gracias y les dije, todavía no cantemos victoria que no llegamos al barrio, y fue entonces que a dos gamba, pasamos la Panamericana y la General paz, para así, llegar a casa y volver todos juntos, como tenía que ser…

23/07/2020

Autobiografía de un Gusano( segundo Libro)

El Día Que Apreté A Dos Policías, Por Algunos Segundos

No son cuentos los que te estoy contando, es mi vida real, como el hambre que canta música con las tripas del hambriento. Sabes algo del hambre??Sabes que al tercer día de no comer, tu cuerpo comienza a comerse solo, devorando fibras y grasas, para poder sobrevivir. Hasta los pensamientos decrecen, con el fin de ahorrar energía y poder vivir, acto revolucionarios, si se trata de una vida deplorable, que golpea con situaciones de muerte y violencia…
Año 2001, antes que explote el país, ya veníamos explotando nosotros, como “pequeñas bombas pequeñitas”, las erupciones sociales se manifiestan cuando el desequilibrio es latente, y nosotros en el mundo de la delincuencia y el hampa hacíamos nuestra parte…Que Pinta para hoy? Nos preguntábamos en el barrio de fuerte apache, mientras el pensamiento, como de un gaucho comienza a recorrer todas las estancias pudientes de La Pampa.
Tengo Un Supermercado Disco grande en Adrogue, pero es un re viaje hasta allá, pero conozco como abrir la caja fuerte, también conozco más o menos la zona y las rutas para nuestro escape. Bueno dale, y se empezó armar la murga. No sé, cómo nos juntamos ese día, porque de repente parábamos en la tira seis, y éramos un montón de pibes y el que quería venir laburar, se prendía, sin cajetiarla y así también nos dábamos una mano entre todos.
Teníamos un Renault 19 robado, éramos cinco pibes, el tuerto Ayala(finado), Chaqueño(finado), Seba Sandobal de la Gardel(finado también), yo y el flaco Yoni. Teníamos un par de Chalecos antibalas, un Fusil automático 7,62, y par de pi***las. Yo conducía y cuando lo hacía, siempre ponía el chaleco en la butaca de conductor, por si se pudría el queso, me hacía chiquito y podía conducir con mayor seguridad, porque quizás ustedes no lo saben, pero en las persecuciones, al que le tiran primero es al piloto, por eso nadie quería conducir y yo como soy una persona algo fría, me tenía sin cuidado…
Era una tarde de domingo o sábado, no lo recuerdo bien, solo sé que era hermosa, todas las tardes son hermosa, cuando se trata de trabajar, porque para mí era un trabajo y lo tomaba con tanta responsabilidad y respeto, que parecía un Alemán disciplinado en la perfección( que puedo decir a mí me gustaba Robar), es un sentimiento con muchos, micros sentimientos unidos…Arrancamos para el laburo, mientras íbamos charlábamos de cosas vánales cotidianas, lo cual es, buen ejercicio para adormecer la incertidumbre, los miedos, la furia, el entusiasmo que genera el dinero, etc.
Agarramos la General Paz, luego subimos la autopista Riccheri y bajamos en Camino de Cintura para doblar en la rotonda de Lavayol y encarar hacia Adrogue, donde nuestro objetivo estaba esperándonos, sin saber qué clase de visita podría tener…
Cuando llegamos, paso algo inesperado, dentro del lugar, en la puerta de entrada del estacionamiento, había dos policías uniformados, uno más grande en edad que el otro, pase despacito con el auto, pero ellos ni sospecharon, porque estaban muy ocupados hablando quien sabe qué asunto…A la vuelta del lugar decidimos que íbamos hacer, acordamos que dos iban a sorprender por el estacionamiento, mientras que nosotros los encararíamos de frente.
Frene el auto en la puerta, Seba y Chaque se fueron para el estacionamiento caminando despacio, sin agitar el avispero, el Tuerto ya había bajado con el fusil en la mano, al igual que el flaco, yo por mi parte cuando vi ese escenario, sentía que tenía que tomar una decisión rápido, antes que los policías se den cuenta y empecemos a los tiros, en el supermercado. Salí del auto con la pi***la 45 en la mano y en los bolsillos dos cargadores de repuesto. Fueron segundos interminables, corrí sin importarme la vida, por el pasillo lleno cajas hasta llegar a los Cobani y me di cuenta que estaba en frente de los dos, con el arma apuntándolos y diciéndole “tírate al piso la co**ha de tu madre, pensa en tu familia y no te hagas matar”, pero apreté mal, porque no puse mi mano izquierda delante y el fierro detrás…
El policía me agarro el arma y no la quería soltar, el otro estaba asustado y confundido, ya estaba a punto de matarlo, cuando de repente el flaco Yoni llego en mi ayuda y fue recién ahí, que el policía, dijo está bien y se tiro al piso, mientras yo le saque el arma reglamentaria y los otros pibe al otro. Termino de sacarle el arma y me fui corriendo hasta la tesorería, donde para desgracia nuestra las cajas fuertes estaban Vacías y encima los empleados tocaron un botón antipático y se cerraron las cajas registradoras automáticamente…
Mire para el costado y los pibes les estaban pegando a los policías, mientras los desvestían para llevarnos la ropa, que después la usamos, cuando nos disfrazábamos de policías, para algún otro laburo. Me enfade mucho viendo esa secuencia y entre gritos de pánico y dolor, una voz dijo,” nos fuimos”, y entonces nos fuimos. Pero cuando íbamos saliendo, en la esquina del lugar salió un muchacho de seguridad de la farmacia, apuntando su calibre 38 hacia nosotros, fue entonces que los pibes lo apuntaron con todas las pi***las que teníamos y se metió corriendo a su local.
Cuando salimos a las dos cuadras ya se estaban escuchando los sirenazos de los patrulleros, que venían en su ayuda. Mientras manejaba a toda velocidad, ( para salir de la zona) iba discutiendo con los pibes, porque no me gusto que le pegaran a los policías. “Yo así no trabajo, yo vengo por el dinero sin lastimar a nadie” y los otro me contestaron “pero gusano ellos cuando nos agarran a nosotros nos re torturan, nos re verduguean, vos estas re loco como los vas a defender”…Toda esta discusión se estaba dando dentro del coche, cuando agarre camino Negro y los patrulleros ya estaban cerrando el canino, pero le llevamos dos cruce de ventajas, dos semáforos…
Llegamos al barrio sin ningún rasguño, pero también sin plata, porque lo único que habíamos llevado era la ropa de los oficiales y sus armas, una me agarre de trofeo, la que le saque al primero, porque la política entre nosotros era esa, si vos lo reducís te quedas con el arma, salvo que ya tengas otros trofeos, que en ese caso, tenías que pasársela al que no tenía, pero esto era relativo, porque todos teníamos nuestros propios chiches y cuestión que siempre lo usábamos entre todos.

22/06/2020

Biografía de un Gusano ( Primer libro).
Capitulo 5 Segunda parte.

EL CHIPI Y YO

Para la navidad del año 95, estábamos todos reunidos en la tira seis, yo luego de brindar en la casa de mi tía, donde nos reuníamos, mi mama, mi abuela y mis hermanos juntos con mi tía marta y mis demás primitos, que para ese entonces tendiéramos la edad de 14 años, entre los más grandes. Para aquella época yo tenía mi primer arma, propia que era un 32 largo, marca detective, el cual se lo habíamos sacado a un fisura, en el n**o nueve, junto con un compa, gran amigo el cual me enseñó a patear la calle con cautela. Esa noche, luego de festejar rápidamente las doce, y hacer el chin chin de toda la familia, Salí corriendo para la tira. Estaba de traje yo, con una camisa blanca, y dentro del bolsillo llevaba, mi armamento con una caja de balas extra, por si las moscas. Cuando llegue y vi a los pibes reunidos a la distancia, arranque mi juguetito y empecé a tirar tiros para el aire emocionado, los pibes salieron de la cochera, que es una especie de quincho de cemento. Y cuando me vieron guitarreando, arrancaron todas clases de armas y empezaron a responder, tiraron tiros al aire por diez minutos más o menos, había nueve, cuatro y medio, doce setenta, entre otras…
Todos contentos nos empezamos a saludarnos uno por uno, deseando muchas felicidades. Los porros empezaron a circular como en la panamericana, a horario pico, las Pepas fueron repartidas, como las ostias en plena misa, mitad para cada uno. Describir las risas y las locuras que te causan el L*D, es difícil solo, hay que tener en cuenta que te sacan de cualquier tipo de tristeza, en especial, el de la realidad en la cual vivimos. Empezamos a tomar gancia con limón, cuando apareció el Osvaldo, y nos dijo que en la esquina del cementerio de los rusos, había un patrullero regalado con dos cobani de pechito. En un principio nos empezamos a c***r de la risa con su propuesta, pero el negro Rosendo, entre gestos maléfico y sonriente, acento con la cabeza. Vamos dijo, el loco y todos los seguimos atrás, como ovejitas al matadero, o mejor dicho como lobos hambriento en busca de una carnada, en este caso eran dos poli, esperando ser devorados, por un grupo de chicos enfierrados hasta los huesos. De camino cuando íbamos por la tira 36, cruzando el n**o dos, apareció un Torino naranja en medio de la calle, gritando qué onda con ustedes. Que pasa grito el Neustar, y ahí no más empezaron a los tiros del ma***to coche, ellos respondían tambien. Agachado corrí devuelta para el n**o dos, escuchando el zumbido de las balas, piuj piuj puij, sonaban los corchazo. Hubo una pausa y el Torino Salió arando para el n**o uno. Nos recuperamos y empezamos a pie a córrelos, hasta llegar al termino de la av. Militar, donde doblaron rumbo a la torre diez, donde Vivian nuestros peores enemigos, la banda del gorrudo, le batían al loco.
Cuando llegamos diez, empezamos a subir por todos los pisos, en buscas de ellos, los cuales, nunca aparecieron, porque tiempos más tardes, nos enteraríamos que eran la banda de Pineral, de la villa del Evita, pibes que eran compañero del tuerto Ayala, un muchacho muy conocido en la jerga y en el barrio.
Cuando finalizamos esa secuencia, nos fuimos a la tira a seguir festejando. Nos olvidamos de ir apretar a los cobanis y todo, solo seguimos la danza de la cumbia colombiana, que para esos tiempos eran furor y el tema que más se escuchaba era la pava congona…
Cuando vivía en el monoblock cinco, todas las mañana me levantaba y lo iba a buscar al Chipi, que vivía dos escaleras más adelante, en segundo piso. Le chiflaba y le gritaba Samber y el loco se asomaba a la ventana, y con un gesto me decía subí, subí. Cuando estaba adentro siempre íbamos a la última habitación donde dormía él. Pícate uno me decía, mientras me pego un baño, para ese entonces él ya había estado en el reformatorio Roca, donde lo c***ron a palos un par de veces la policía, y frente a ese rencor se prometió a si mismo, que nunca más iba a estar tras las rejas, promesa que cumpliría años más tarde cuando dejaba está viva perniciosa.
Luego ponía el toca- toca, en la ventana y nos quedábamos tomando yogur sentados en el descanso del gas. Nos fumamos un churro y ya comenzaba nuestro día de locura por el barrio. Luego lo íbamos a buscar a Penqué y al Borda, para c***rnos de la risa, ya que estos sujetos eran muy divertidos, no podían estar los dos junto, porque peleaban todo el día, pero aun así, se re querían como hermanos.
Una mañana me desperté temprano y la Lore y el Chipi se estaban preparando para ir a trabajar, pero le faltaba el Maxi, para que le dé la colada, porque este pibe era chico y siempre se vestía como un escolar y le abrían la puerta en todos lados, era rubio y de ojos azules, ni cuenta te dabas que era un delincuente, un pilluelo. Esa mañana no llego, por lo tanto me dijeron a mí, para ver si quería ir, lo que yo le conteste, que sí, que era un honor, y al toque fui a buscar mi 32 y mi mochila del cole, para que me abrieran el local.
Todos listo y nos fuimos a tomar un remix conocido del Chipi, el cual, nos iba a llevar al hecho. La tienda que fuimos a robar era de una marca de ropa que estaba de moda en aquellos entonces, era la famosa One Googly, la marca del Elefantito. Cuando llegamos entramos, la Lore y yo haciendo la punta. El Chipi se quedó afuera queriendo entrar a un viejo de los bigotes, pero éste se le resistió y el loco le puso un tiro sobre la marcha. Salimos corriendo todos asustado y le preguntábamos que paso, que paso. Mientras una vieja corría hacia la av. Emilio Castro gritando, están robando, están robando, y todos los vecinos chusma empezaron a salir de todos lados, tuvimos que correr una cuadra hasta donde estaba el coche para nuestra salida.
Nos subimos y el flaco le dijo, sácanos de acá que se pudrió todo, y el remisero boludo retomo la Avenida, y en eso vimos que un policía, ya iba corriendo para el lugar del hecho, llegamos a la General Paz y el tonto que conducía, de los nervios choco a otro auto, que nos persiguió hasta el puente de Linier, ahí el Chipi s**o el treintaiocho que tenía, y le quería dar un tiro al otro conductor, si no fuera, porque lo frenamos, todo hubiese terminado con una boleta u otro herido . Cuando llegamos a casa no teníamos ni un p**o peso, pero igual Chipi se cagaba de la risa de la secuencia, y decía, se me escapo, jajá.
Era un chabón re loco, pero muy amigo y eso no cambiaba nada, por más que fuera lo que fuera, yo sé cuánto valía su amistad, el jamás te dejaría tirado en un hecho y nunca iba a comerse plata de nadie, no era un bolsillo roto. Él era un delincuente con todas las letras, medio loco sí, pero eso no importaba, éramos amigo igual.
Tres año después su vida terminaría con su propio suicidio y el de su esposa, (pero eso después lo contare), todavía no llegamos al año 98.
Cuando éramos pibes el tiempo trascurría, de manera más lentamente, cada día era una eternidad, será, que por eso siempre nos prometen cosas que van a llegar, pero nunca llegan, como nunca llega papa Noel, ni tampoco los reyes, y eso te hace perder la esperanza, y ver la realidad de otra, manera, la inocencia se consume como un faso lechugoso, como una bolsita de la maldita droga, que tapa la oscuridad, que tapa la marginación, que tapa, la pobreza de los pueblos ignorantes… Culpables nosotros por ignorar, como se roban toda la plata los poderosos, y nosotros manteniendo eso, con nuestra aventura de delincuentes frustrado, por la cantidad del botín, mientras ellos son los que, la juntan en pala. Mentira, todo es una gran mentira.
Pero bueno esta vez la historia vamos a tratar de contarla nosotros, para liberar todo lo reprimido de este sistema, que solo beneficia a unos cuantos. Salga como salga porque el fin, será contar el cuento de este lado de la frontera.

¿Quieres que tu figura pública sea el Figura Pública mas cotizado en Ciudadela?
Haga clic aquí para reclamar su Entrada Patrocinada.

Categoría

Teléfono

Página web

Dirección


1720
Ciudadela
Otros Artista en Ciudadela (mostrar todas)
Paredes Vivas Cese Paredes Vivas Cese
Ciudadela, 1702

--TRABAJOS ARTISTICOS-- ESTILO :*Arte callejero *Muralismo *Retratos *Paisajes *Digital *Letrista *Di...

Fabiana Alejandra Viera Fabiana Alejandra Viera
Ciudadela

AMO A MIS HIJOS .A DIOS SOBRE TODA LAS COSAS.

blakbunn blakbunn
Ciudadela

Hola soy Lilith, soy artista (Argentina) y subo fanarts y dibujos randoms que hago

Tefy Harper Tefy Harper
Avenida Díaz Vélez 610, B1702EDT Gran Buenos Aires, Buenos Aires
Ciudadela, 1701

¡Mucho gusto! Soy Estefania Flores Mi objetivo con este página es compartirles himnos y algunas melodías clásicas, con el fin de poder alabar a Dios 🙏🏽

groso_stylefree groso_stylefree
Ciudadela, 1702

• Musico, Escritor, Freestylers � • Argentina, Buenos Aires, Ciudadela �

cami.tatuer cami.tatuer
Ciudadela

Cualquier consulta por mensaje directo��

Carlos Cfv Carlos Cfv
Nolting 3727
Ciudadela, 1702

CFV MUEBLES

Uñas esculpidas katia Uñas esculpidas katia
Ciudadela, 1702

koquetas.nails koquetas.nails
Chacabuco 861
Ciudadela

•B I E N V E N I D O S • 🌺 Esculpidas en acrílico y poligel 🌺 Esmaltado semi 🌺 Kapping

Cintia Noelia Tealdi Cintia Noelia Tealdi
San Martin 347
Ciudadela, 1702

Teresa Pujol Canta Teresa Pujol Canta
Ciudadela, 1702

para que los amigos no me digan mas "còmo que no tenès una pàgina!"..........espero que les guste, a medida que la vaya completando.......

Ice Ice
Ciudadela

graffiti mural