MILÉN Cerrito

Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Título: Amando ser llamado.
Texto: ‭‭ Efesios 1:13-14
Fecha: Sábado 7 septiembre 2024

En él también ustedes, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de su salvación, y habiendo creído en él, fueron sellados con el Espíritu Santo que había sido prometido, quien es la garantía de nuestra herencia para la redención de lo adquirido, para la alabanza de su gloria.

Introducción:
Estamos en tiempos donde el llamado es ignorado o tomado por poco, muchos se rinden y lo dejan en el camino.

Pero cuando hay amor, el amor por el llamado que Dios nos ha hecho nos hace ir más allá.

1-. Amar su voluntad:
Dios tiene una visión diferente a la visión que tú tienes.

Nuestra visión debe estar dentro de la voluntad de Dios.

Te has preguntado, ¿cuál es realmente la visión de Dios en estos tiempos?
Lo que desea Dios de la humanidad, es que le adoremos en espíritu y verdad, que nuestra vida esté a su servicio, que expandamos el evangelio a toda nación.

2-. Amar su Palabra:
Una persona que ame la Palabra de Dios, la lee y la ponga por obra es una persona que Dios le habla con frecuencia.

Debemos permanecer en la Palabra de Dios, porque si queremos que Dios nos hable, lo va hacer a través de ella.

La palabra de Dios tiene mucho poder y nos da autoridad, no despreciemos su voz.

3-. Amar el testimonio:
Ser de ejemplo y testimonio inicialmente en tu familia, para con tu pareja, tus hijos y si eres hijo ser ejemplo para tus padres.

Que tus acciones glorifiquen a Dios.
Y esas acciones deben ser en todo lado, hasta tus redes sociales.

Ser influencia implica que tú hagas que otras personas sigan tu ejemplo, si amas a Dios, entonces haz que la gente siga y ame a Dios.

Reflexión:
Tú haces parte de la generación en la que Dios está confiando y buscando corazones dispuestos.

Fuimos sellados por él, hoy valoremos ese llamado que ha hecho a nuestra vida, y amemos lo que él ama ver en nosotros.

Con amor en Cristo
Min. Ps Pedro y Francia Vargas
Palmira, Colombia
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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Titulo: ¡Todo por la gloria De Dios!
Texto: 2 Corintios 1:20
Fecha: Viernes 6 septiembre 2024

“porque todas las promesas de Dios son en él Sí, y en él Amén, por medio de nosotros, para la gloria de Dios.”

Introducción:
Dios se va glorificar siempre en nuestras vidas, se glorifica cumpliendo promesas, promesas reales en nuestras vidas, promesas que debemos creer.

1-. Siendo pacientes:
Para ver el cumplimiento de las promesas de Dios debemos ser muy pacientes y no perder la fe.

Si la promesa que recibiste de parte del Señor, aún no se cumple, no te afanes, no te desesperes, no te impacientes, no te desanimes, quizá aún no es conveniente que recibas la respuesta, Dios está obrando, aún en medio de lo que tú crees quietud.

¿Cuántas cosas deben ser puestas en orden en nuestras vidas antes de recibir el cumplimiento de las promesas, para que éstas se cumplan según la voluntad del Señor?

2-. No dejes de creer:
Se cumplirán en el tiempo y a la manera de Dios y su cumplimiento será para que el Nombre del Señor sea glorificado, no desmayes en la fe por ningún motivo.

Por eso debemos:
• Poner nuestra confianza en él.
• Creer en su palabra.
• No permitir la duda.
• Pedir conforme a su voluntad.

3-. El plan de Dios:
Es es una de las razones por las cuales debemos esperar el tiempo del cumplimiento de las promesas y que no sea en nuestro afán, nuestro acelere o desespero.

El cumplimiento de las promesas de Dios requieren preparación, y por ello debemos aferrarnos al plan de Dios que es bueno.

Reflexión:
El Señor se encargará de poner paz en tu corazón, no de afanes, no te aceleres, no te desesperes; solo espera en sus promesas y Dios se va glorificar en medio de la situación que estés orando.

Con amor en Cristo
Min Ps Pedro y Francia Vargas
Palmira Colombia
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Ministerio internacional en las naciones.
Altar familiar
Titulo : “ En las manos de Dios ”
Texto : Isaías 54:13
Fecha : jueves 05 de septiembre 2024

Isaías 54:13 Y todos tus hijos serán enseñados por Dios; y se multiplicará la paz de tus hijos. 14 Con justicia serás adornada; estarás lejos de opresión, porque no temerás, y de temor, porque no se acercará a ti. 15 Si alguno conspirare contra ti, lo hará sin mí; el que contra ti conspirare, delante de ti caerá. 16 He aquí que yo hice al herrero que sopla las ascuas en el fuego, y que saca la herramienta para su obra; y yo he creado al destruidor para destruir. 17 Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Ésta es la herencia de los siervos del Señor, y su salvación de mí vendrá, dijo el Señor.

Introducción.
La plenitud del amor de Dios es tan grande que está pendiente de todo lo nuestro y no sólo cuida nuestras generaciones sino que cuida lo que nos pertenece.

Ser hijo de Dios, amarle como solo él merece y vivir una vida llena de arrepentimiento delante de sus ojos es la ventaja y bendición más grandes que podemos experimentar.

Descansamos a diario en sus promesas:

1-. Dios guarda tus generaciones .
Podemos tener temor de nada aquí en su palabra dice que él nos guardará y guardará nuestra familia nuestros hijos y nuestra generaciones.

Los guardará de todo mal y peligro.
Los guardará de la maldad.
Los guardará de los vicios
Los guardará del lazo del diablo.

Solo basta creer la promesa y caminar con el Señor en verdad.

El multiplicará la paz de aquellos que temen a Dios.
Dios multiplicará la paz de nuestros hijos. Ni un cabello de ellos caerá a tierra, pero para los malos no hay paz dice Dios.

Isaias 48: 22 No hay paz para los malos, dijo Dios.
Que lamentable irán de mal en peor, Dios tenga misericordia.

Es lamentable ver el estado de la gente que se aparta del Señor.

2-. Dios no te dejará
Deuteronomio 31:8“Y Dios va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides.”

Quien pretenda meterse con un hijo de Dios, deberá pensarlo primero muy bien:
• Se acarrea maldición.
• Será avergonzado.
• Trae calamidad para su familia.
• Está sembrando maldad.
• Se estará enfrentando al mismo Dios.
• Se enfrentará a la venganza del Señor.
• Hasta que no se arrepienta no podrá vivir en paz.
• Y si no se arrepiente, su condenación será el mismo in****no

3-. Nadie podrá dañarte
Si alguien te amenaza, se levanta contra el mismo Dios.
Si un impio te maldice, se maldice así mismo.
En la lengua del cristiano está el poder para bendecir y maldecir.
Usemos la boca mejor para bendecir, para que así, nosotros y nuestra familia sea bendecida.
Nunca juzgues ni condenes a nadie porque Dios no dará por inocente al que se levante contra uno de sus hijos.

¡Reflexiones!
Podemos estar tranquilos y confiados porque nuestra salvación, protección y liberación vienen del cielo.
Pero nosotros nunca nos prestemos para hacer cosas que ofendan al Señor.

Con amor en Cristo:
Ps. Pedro y Francia Vargas.
Min. MILÉN Internacional.
Palmira – Colombia
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Naciones.
Altar familiar y devocional del día.
Título: El amor de Dios que sana.
Texto: Marcos 5:25-34
Fecha: Miércoles, 04 de Septiembre 2024

Pero una mujer que desde hacía doce años padecía de flujo de sangre, y había sufrido mucho de muchos médicos, y gastado todo lo que tenía, y nada había aprovechado, antes le iba peor, cuando oyó hablar de Jesús, vino por detrás entre la multitud, y tocó su manto. Porque decía: Si tocare tan solamente su manto, seré salva. Y en seguida la fuente de su sangre se secó; y sintió en el cuerpo que estaba sana de aquel azote. Luego Jesús, conociendo en sí mismo el poder que había salido de él, volviéndose a la multitud, dijo: ¿Quién ha tocado mis vestidos? Y sus discípulos le dijeron: Ves que la multitud te aprieta, y dices: ¿Quién me ha tocado? Pero él miraba alrededor para ver quién había hecho esto. Entonces la mujer, temiendo y temblando, sabiendo lo que en ella había sido hecho, vino y se postró delante de él y le dijo toda la verdad. Y él le dijo: Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote.”

Introducción:
La historia de la mujer con flujo de sangre nos muestra como el amor de Dios, manifestado en Jesús, puede traer sanidad completa.
Jesús no solo sana su cuerpo, sino que también le devuelve su dignidad y paz. A través de este relato, veremos tres pasos para recibir sanidad a través del amor de Dios.

1.- Acércate a Jesús con fe:
Como la mujer del relato, acércate a Jesús con fe, creyendo que él puede sanarte. Toma la decisión de buscar su ayuda, sin importar cuán difícil haya sido tu situación.
Dedica tiempo en oración, diciéndole a Jesús que crees en su poder para sanarte.
Ora con la convicción de que, al acercarte a él, recibirás sanidad.

2.- Toca su manto en oración:
Tocar el manto de Jesús simboliza un acto de fe. En tu vida, este acto puede ser una oración sincera, un paso hacia la reconciliación o cualquier acción que demuestre tu confianza en su poder sanador.
Identifica un área específica en la que necesitas sanidad (física, emocional, espiritual) y cada día ora específicamente por esa necesidad, creyendo que al "tocar su manto", recibirás la sanidad que necesitas.

3.-Recibe su amor sanador:
Jesús no solo sana, sino que también te asegura que eres amado. Como a la mujer, Él te llama "hija" o "hijo".
Acepta ese amor incondicional y permite que te sane completamente.

Después de orar, toma un momento para escuchar a Dios.
Deja que su amor te hable y te afirme. Repite en tu corazón las palabras de Jesús: "Tu fe te ha hecho salvo; ve en paz".

Reflexión:
La sanidad que Jesús ofrece va más allá de lo físico.
Él quiere que experimentes su amor que restaura todas las áreas de tu vida.
Hoy, te animo a acercarte a él con fe, a tocar su manto en oración, y a recibir Su amor sanador.
Él te llama hijo, te sana y te da paz.

Con amor en Cristo,
Min. Ps. Pedro y Francia Vargas
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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Título:El mejor arma contra el mal es el amor.
Texto: Romanos 8:37-39
Fecha:Martes, 03 Septiembre 2024

Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro."

Introducción:
En un mundo lleno de maldad y oscuridad, no estamos indefensos. Dios nos ha dado un arma poderosa: su amor. No se trata solo de un sentimiento, sino de un poder activo que nos protege, fortalece y nos da la victoria sobre el mal. Este amor se manifestó de manera suprema en Jesús, quien dio su vida para vencer al pecado y la muerte, dándonos la seguridad de que nada nos puede separar de Su amor.

1.- El amor de Dios es protección:
El amor de Dios es una barrera que el mal no puede atravesar. En Efesios 6:16, se nos dice que la fe es nuestro escudo, y esa fe se fortalece en el amor de Dios. Cuando confiamos en su amor, estamos protegidos contra las mentiras y los ataques del enemigo. Como un escudo, Su amor nos cubre, nos rodea y nos defiende en los momentos más difíciles.

2.- El amor de Dios es fuerza:
No solo nos protege, sino que también nos fortalece. Pablo afirma en Romanos 8:37 que somos más que vencedores por medio de Aquel que nos amó. Esto significa que el amor de Dios no solo nos ayuda a resistir el mal, sino que nos da la victoria sobre él. Nos capacita para enfrentar los desafíos con valentía y nos da la fuerza para superar las pruebas.

3.- El amor de Dios es inquebrantable:
Romanos 8:38-39 nos asegura que nada puede separarnos del amor de Dios. Esto significa que no importa cuán grandes sean los desafíos o cuán oscuro parezca el camino, el amor de Dios siempre estará con nosotros. Esta certeza nos da paz y confianza, sabiendo que estamos en las manos de un Dios que nunca nos abandonará.

Reflexión:
El amor de Dios no es solo una idea abstracta; es una realidad poderosa que nos da la victoria sobre el mal. Al permanecer en su amor y confiar en su protección y fortaleza, podemos vivir con la seguridad de que nada nos puede derrotar. Hoy, te animo a recordar y descansar en el amor inquebrantable de Dios, sabiendo que es tu arma más poderosa contra cualquier adversidad.

Con amor en Cristo,
Min. Ps. Pedro y Francia Vargas
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Acompañanos cada martes 6:30 am, un tiempo de edificación para la familia ¡¡te esperamos!!

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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Titulo: El poder de lo que siembras.
Texto: Gálatas 6:7
Fecha: Sábado 31 agosto 2024

“ No os engañéis; Dios no puede ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. “

Introducción:
Como hijos de Dios tenemos un poder especial, hacer lo que Jesús vino a hacer: sembrar la palabra en los corazones.

Dios nos puso sobre la tierra para que la cultiváramos, en ese proceso nos dio la responsabilidad de sembrar en todas las áreas de nuestra vida.

Las semillas que debemos sembrar constantemente son:

1-. Perdón:
Perdonemos sin importar las ofensas recibidas.

Ama, cualquiera sea la circunstancia, recuerda que Jesucristo siendo injustamente crucificado pudo decir “Padre perdónalos porque no saben lo que hacen” ahí en ese momento, sembró para toda la humanidad, el amar y el perdón.

2-. Justicia:
Haga a los demás, lo mismo que quieres que te hagan a ti y a tus hijos.

Ser justo significa: No permitir la mentira, murmuración, la discordia, ni la violencia; significa no hacer acepción de personas, no abusar de la confianza de nadie.

3-. Misericordia:
“Porque juicio sin misericordia se hará con aquel que no hiciere misericordia; y la misericordia triunfa sobre el juicio.” Santiago 2:13

El que tenga misericordia de los demás, gozará de los beneficios de la misericordia del Señor.

Lo que hagas por los demás, en el futuro la gente lo hará por ti.

Reflexión:
Tenemos el poder de cambiar situaciones, el poder de influenciar en nuestro entorno con todo lo que sembremos.

Comienza este día pensando en que estás dispuesto a sembrar en tu entorno.

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Min. Ps. Pedro y Francia Vargas
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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Título: Proactivos
Texto: Lucas 12:39-43
Fecha: Viernes 30 agosto 2024

“»Entiendan lo siguiente: si el dueño de una casa supiera exactamente a qué hora viene un ladrón, no dejaría que asaltara su casa. Ustedes también deben estar preparados todo el tiempo, porque el Hijo del Hombre vendrá cuando menos lo esperen». Pedro preguntó: —Señor, ¿esa ilustración es solo para nosotros o es para todos? Y el Señor respondió: —Un siervo fiel y sensato es aquel a quien el amo puede darle la responsabilidad de dirigir a los demás siervos y alimentarlos. Si el amo regresa y encuentra que el siervo ha hecho un buen trabajo, habrá una recompensa.”
‭‭Lucas‬ ‭12:39-43‬ ‭NTV‬‬

Introducción:
Ser proactivo significa anticiparse a los acontecimientos, asumir responsabilidad y tener iniciativa.

Las personas proactivas son personas que se adaptan fácilmente a nuevas situaciones, que se toman los fallos como oportunidades de crecimiento y que se anticipan a posibles problemas que puedan surgir en el futuro.

Jesús enseña que un siervo que ha hecho un buen trabajo, tiene recompensa; así que:

1-. Enfócate en las oportunidades:
Traza metas
Aprendamos a invertir bien el tiempo, procurar sanidad en nuestro interior.
No pienses solo en lo que no has logrado, toma de esa situación el mejor impulso para lograr cosas diferentes de la mano de Dios.

2-. Trabajemos con un sentido de responsabilidad alto:
Dirígete bien con lo que Dios ha confiado en ti.
No tomemos en poco lo que se ha entregado en nuestras manos.
Cuidemos los dones, los talentos, el llamado, el propósito que Dios nos entregó.

La responsabilidad nos llevará a ver resultados.

3-. Darle el primer lugar a Dios:
Mateo 6:33 nos habla de darle el primer lugar a él, él se encarga del resto.
Dios hará bendecir la obra de tus manos.

Reflexión:
No esperemos que las cosas sucedan, hagamos parte del avivamiento en estos tiempo, hagamos que las cosas sucedan, seamos proactivos.

Con amor en Cristo
Min Ps Pedro y Francia Vargas
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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Título:Provoca a Dios para que te hable.
Texto: Amós 3:7
Fecha:Jueves, 29 de agosto 2024

"Porque no hará nada Dios el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas." Amós 3:7

Introducción
La palabra de Dios es fundamental en la vida cristiana.

En la parábola del sembrador, Jesús enseña que solo la semilla que cae en buen suelo da fruto, lo que nos muestra la importancia de recibir, creer y actuar con base a la palabra.

Además, en Isaías 55:11, Dios nos asegura que su palabra no volverá vacía.

Este mensaje enfatiza la importancia de no solo conocer la Palabra (logos), sino también de experimentar la palabra revelada (rhema) en nuestras vidas cotidianas.

Para que la palabra de Dios produzca fruto en nuestras vidas, debemos activarla mediante la fe y la obediencia.

1.- Recibiendo y Activando la Palabra de Dios:

En la parábola del sembrador (Mateo 13:1-23), Jesús enseña que la palabra de Dios da fruto cuando cae en un corazón dispuesto y obediente.

Los diferentes tipos de suelo representan las diversas maneras en que los corazones humanos reciben la Palabra.

Solo el buen suelo, que representa un corazón receptivo y diligente, permite que la palabra crezca y produzca fruto.
Por lo tanto, es crucial no solo escuchar la palabra, sino también creer en ella y actuar conforme a su dirección para ver su efecto transformador en nuestras vidas.

2.- La palabra de Dios no vuelve vacía:
Isaías 55:11 afirma que la palabra de Dios siempre cumple su propósito y nunca regresa vacía. Dios garantiza que su palabra es efectiva y poderosa, logrando aquello para lo cual fue enviada.
Esto nos recuerda que no basta con conocer la palabra; debemos activarla mediante la fe y la obediencia para experimentar su poder transformador en nuestras vidas.

Al vivir la palabra, vemos cómo su propósito se cumple y su fruto se manifiesta en nuestra vida diaria.

3.- Entendiendo el logos y el rhema de Dios:
El logos es el conocimiento de la palabra escrita de Dios, la base sobre la cual edificamos nuestra fe, mientras que el rhema es la palabra revelada por Dios en un momento específico para una situación específica.
La relación entre logos y rhema es fundamental: el rhema se manifiesta cuando el logos está profundamente arraigado en nuestro corazón.

Sin un sólido fundamento en el logos, corremos el riesgo de tomar decisiones en nuestras propias fuerzas, sin la guía divina.

Por eso, es vital que el logos habite en nosotros, preparando el terreno para recibir y actuar según el rhema en los momentos cruciales de la vida.

Reflexión
La palabra de Dios es viva y eficaz. Hoy, más que nunca, debemos provocar a Dios para que nos hable, buscando su dirección a través del logos y el rhema. Al cultivar una vida disciplinada en la palabra, estaremos preparados para recibir la revelación divina en los momentos más cruciales de nuestra vida.

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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día
Título: ¿Estas seguro de tu eternidad?
Texto:1 Juan 5:13
Fecha:Miércoles, 28 de agosto 2024

“Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna."
1 Juan 5:13

Introducción:
La eternidad es una realidad que todos enfrentaremos, y la pregunta más importante que podemos hacernos es: "¿Estoy seguro de mi eternidad?" La biblia no nos deja en duda sobre este tema. Jesús vino para darnos vida eterna y asegurarnos que, a través de la fe en él, nuestra eternidad está segura. Hoy exploraremos cómo podemos estar seguros de nuestra eternidad y la paz que esto trae a nuestras vidas.

Por tanto, debemos:
1-. Confiar en la promesa de Dios:
La palabra de Dios es clara al respecto: la vida eterna es un regalo para aquellos que creen en Jesucristo. No es algo que debamos ganar por nuestros méritos, sino una promesa divina basada en la fidelidad de Dios. Cuando confiamos en su palabra, podemos estar seguros de que nuestra eternidad está garantizada.

2-.Vivir en la seguridad de nuestra salvación:
Dios quiere que vivamos con la seguridad de nuestra salvación, no con dudas o temores. Esta seguridad nos libera para vivir con propósito y confianza, sabiendo que nuestro destino eterno está en las manos de Dios. La certeza de la vida eterna nos impulsa a vivir para Cristo, sin temor al futuro.

_"El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios, no tiene la vida."_
1 Juan 5:12

3-.Reflejar nuestra certeza en nuestro diario vivir:
Cuando estamos seguros de nuestra eternidad, nuestra vida debe reflejar esa confianza. Vivir en santidad, amar a los demás y testificar del amor de Cristo son evidencias de nuestra fe. Al vivir de esta manera, no solo afirmamos nuestra seguridad en Cristo, sino que también inspiramos a otros a buscar la misma seguridad.

_"Por tanto, id y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo."_
Mateo 28:19

Reflexión:
Hoy, Jesús nos invita a descansar en la seguridad de la eternidad que él nos ha prometido. No dejemos que las dudas o los temores nos alejen de esta verdad. Vivamos cada día con la certeza de que nuestra eternidad está asegurada en Cristo, y que, al final, estaremos con él para siempre. Que esta seguridad impulse nuestro caminar diario y nos motive a compartir esta esperanza con otros.

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Altar familiar y devocional del día
Título:Tan real como la eternidad.
Texto: 1 Juan 2:25.
Fecha:Martes 27 agosto 2024

Y ésta es la promesa que él nos hizo: la vida eterna."
1 Juan 2:25

Introducción:
La eternidad es un concepto que a veces puede parecer distante o abstracto, pero en realidad, es una de las verdades más profundas y fundamentales de nuestra fe.
Jesús mismo nos aseguró que la vida no termina con la muerte, sino que continúa en una eternidad preparada por él.
La importancia de la eternidad radica en que determina cómo vivimos nuestras vidas aquí en la tierra, sabiendo que nuestras decisiones y nuestra fe tienen un impacto eterno.
Hoy reflexionaremos sobre la realidad de la eternidad y por qué es vital en nuestra vida cristiana.

Por tanto debemos:
1-. Reconocer la realidad de la eternidad:
La eternidad no es solo una idea; es una verdad bíblica confirmada por las palabras de Jesús.
Vivimos con la certeza de que esta vida es solo una parte de nuestra existencia y que hay un destino eterno preparado por Dios para aquellos que creen en él.

Este reconocimiento cambia nuestra perspectiva sobre el sufrimiento, las pruebas y las bendiciones temporales.

2-. Vivir con propósito eterno :
Al comprender que nuestra vida en la tierra es temporal, debemos enfocarnos en lo que tiene valor eterno. Esto implica vivir para Dios, buscando su voluntad y acumulando tesoros en el cielo, no en la tierra.

Nuestras acciones, decisiones y fe deben estar alineadas con nuestra esperanza en la eternidad.

“Pero acumulaos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el óxido corrompen, y donde ladrones no minan ni roban."Mateo 6:20

3-. Prepararnos para la eternidad:
Jesús nos llama a estar preparados para su regreso y la vida eterna con él.
Esto significa vivir en santidad, fe y obediencia, sabiendo que un día estaremos delante de él para dar cuenta de nuestras vidas.
La eternidad es una realidad tan cercana que debemos vivir cada día como si fuera el último, con la expectativa de estar con Cristo para siempre.

“Estad preparados, porque a la hora que no pensáis, el Hijo del Hombre vendrá."
Mateo 24:44

Reflexión:
Hoy, Jesús quiere recordarnos que la eternidad es real y está a nuestro alcance. Vivamos con la convicción de que nuestra vida tiene un propósito eterno y que estamos llamados a vivir de tal manera que nuestra eternidad con él sea gloriosa. Mantengamos nuestra fe firme, sabiendo que hay una morada preparada para nosotros en la casa del Padre.

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Ministerio Internacional Luz en las Naciones
Altar familiar y devocional del día!
Título: Las adversidades a mi favor.
Texto: Eclesiastés 1:9-10
Fecha: Viernes 23 agosto 2024

¿Qué es lo que fue? Lo mismo que será. ¿Qué es lo que ha sido hecho? Lo mismo que se hará; y nada hay nuevo debajo del sol.
¿Hay algo de que se puede decir: He aquí esto es nuevo? Ya fue en los siglos que nos han precedido.

¿Cómo es posible usar las adversidades a mi favor? Siempre dependerá de la forma en cómo asumamos la situación.

1-. Abre tu mente al mundo espiritual:
Dice la palabra que nada le es dado al hombre si no le es bajado del cielo.

También dice la Biblia que Dios habla a través de sueños visiones y al corazón del hombre, ¿de qué depende que tú le escuches?
Dependerá de tu buena disposición para hacerlo.

2-. Observa la necesidad:
Cuando meditas en la palabra, Dios comienza a mostrarte las necesidades que hay en la humanidad, es en ese momento que tu comienzas a observar la diferentes tipos de personalidades en medio de la crisis, aquí comienzas a tener ideas que comienzan a aclararse en la medida que meditas en Dios.

Mira más allá, observa lo que Dios quiere hacer y esto conecta con…

3-. Desarrolla una estrategia:
Dios es el que te dará la estrategia, para avanzar en esta crisis, no te desesperes, solo deja que Dios te inspire

Comienza a hacer pequeños planes que te llevaran a un objetivo final.

Aparta tiempo con Dios todos los días, hasta conseguir la estrategia que él mismo te revelará.

Reflexión:
Solo con Dios podrás cambiar la adversidad a tu favor. Y te enseñará, te revelará y te afirmará día a día.

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Altar Familiar y Devocional del Día
Título: Protegiendo el tesoro más importante.
Texto: 1 Pedro 5:8-9
Fecha: Jueves 22 de agosto 2024

Texto:
“Sed sobrios y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al cual resistid firmes en la fe.”

Introducción:
La familia es uno de los tesoros más preciosos que Dios nos ha confiado y debemos protegerla de los ataques espirituales que buscan destruirla.

El demonio Asmodeo, mencionado en el libro de Tobit (Tobit 3:8), es conocido por causar inmundicia sexual, violencia y escasez, y busca dividir y destruir los lazos familiares.

Sin embargo, con la ayuda de Dios y su palabra, podemos establecer defensas espirituales que fortalezcan a nuestra familia.

¿Cómo proteger a nuestra familia de estos ataques?

1..- Vigila tu vida espiritual:
En 1 Pedro 5:8 se nos exhorta: “Sed sobrios y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar.”

La vigilancia espiritual es clave para proteger a nuestra familia.

Mantén una vida de oración constante y estudia la palabra de Dios.

Cuando estás alerta y en comunión con él puedes discernir los ataques del enemigo y actuar en consecuencia.

Tu propia fortaleza espiritual será un refugio para tu familia.

2.- Establece un altar familiar:
En Salmo 127:1 se nos recuerda: “Si Dios no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican.”

Crear un altar familiar es fundamental.
Dedica tiempo a orar juntos, a estudiar la Biblia y a discutir cómo aplicar sus enseñanzas en la vida diaria.

Este hábito fomenta la unidad y el crecimiento espiritual en la familia, lo que les brinda un escudo contra los ataques del enemigo.

3.-Practica la pureza y la honestidad:
En Filipenses 4:8, Pablo nos instruye: “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si hay algo digno de alabanza, en esto pensad.”

Fomentar un ambiente de pureza y honestidad en el hogar es esencial para proteger a tu familia de la inmundicia y la violencia. Establece estándares claros de lo que es aceptable en tu hogar. Hablen abiertamente sobre los peligros de la pornografía, la violencia y otros males que pueden infiltrarse en la vida familiar.

Reflexión:
Proteger a nuestra familia de ataques espirituales requiere compromiso y acción. Cada uno de nosotros tiene un papel que desempeñar en el fortalecimiento del hogar. Al vigilar nuestra vida espiritual, establecer un altar familiar, y practicar la pureza y la honestidad, no solo estamos protegiendo a nuestros seres queridos, sino también asegurando su bienestar eterno. Recuerda que la familia es un regalo divino y debemos luchar por ella con todas nuestras fuerzas.

Con amor en Cristo,
Min. Ps. Pedro y Francia Vargas
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