Los Moros y Cristianos de Elda son una importante fiesta popular de la ciudad de Elda (Alicante), en España. Se celebran entre la última semana de mayo y primera semana de junio durante 5 días de manera anual. Declaradas de «interés turístico», conmemoran la festividad de San Antón, el patrón de las fiestas, cuya fecha oficial de conmemoración es en realidad el 17 de Enero, cuando originalmente se celebraban las fiestas, pero que fue modificado en 1946 por evidentes motivos climáticos.
La ciudad de Elda, que ocupa el solar de la antigua Illa musulmana y la Ella cristiana, está situada en el centro de un apacible valle y conforma hoy una gran mole urbana de 56.000 habitantes de ciudad industrial y laboriosa que tiene en la manufactura de calzado su mayor medio de vida, y cuyos elaborados productos de gran lujo y diseño se expanden en la actualidad por medio mundo.
En el siglo XIX, sobre 1838-1840, cuando era un pequeño pueblo agrícola, parece ser que surge una Fiesta llamada de Moros y Cristianos como evolución de la antigua “soldadesca” o milicia local que disparaba sus arcabuces en salvas de honor al patrón, con influencia de una cultura popular impregnada del espíritu romántico imperante en estas fechas.
De esta rudimentaria Fiesta eldense nos habla el insigne tribuno Emilio Castelar, que vivió su infancia en Elda, en su obra “Recuerdos de Elda o las fiestas de mi pueblo”. También hay otros testimonios de estas fiestas decimonónicas del historiador Lamberto Amat y de transmisión oral que dejará de celebrarse a partir de los últimos años del siglo XIX, sobre1883.
En 1945 resurgen estas fiestas que el año anterior habían protagonizado una manifestación “sui generis” con una heroica salida de festeros vestidos con trajes prestados en poblaciones vecinas. Se crean las cinco primeras comparsas que configuran ya una Fiesta que va creciendo a lo largo de los años creándose nuevas comparsas y adquiriendo una gran popularidad y plena participación de festeros.
San Antonio Abad es el patrón de esta Fiesta, cuyo culto se pierde en el tiempo, siendo una de las fiestas religiosas más antiguas de la ciudad. La ermita donde radica la imagen ocupa un solar contiguo a la antigua mezquita menor de la Elda medieval, que luego pasó a ser iglesia dedicada a Santa Catalina y San Antón.
Su festividad litúrgica es el 17 de Enero, alrededor de la cual se celebra la Fiesta hasta 1946 y actualmente la llamada Media Fiesta.
En la Fiesta eldense existen actualmente 9 comparsas, cinco del bando cristiano: Cristianos, Estudiantes, Contrabandistas, Piratas y Zíngaros, y cuatro del bando moro: Marroquíes, Realistas, Musulmanes y Huestes del Cadí. Cada una de ellas con su traje oficial característico aunque en los desfiles muchas de sus escuadras lucen espléndidos trajes especiales. En cada comparsa se nombran anualmente una Abanderada y Capitán mayores y otros cargos similares infantiles, que presiden cada acto festero en dichas agrupaciones. Alrededor de 7.000 festeros conforman estas nueve comparsas, teniendo muchas de ellas más de 1.000 festeros en sus filas.
La mujer juega un papel muy importante en la fiesta pues la mitad aproximadamente de sus componentes son mujeres que desfilan en escuadras que visten preciosos trajes de variado diseño.
La Fiesta en los tiempos actuales se celebra en torno al primer domingo de Junio de jueves a lunes salvo si coincide con la festividad de Corpus Christi.
En los actos de las Embajadas o parlamentos que son el momento en que culmina el ritual festero moro y cristiano, se utilizan unos textos del siglo XIX. La Embajada Mora, que se atribuyó durante mucho tiempo al poeta eldense Juan Rico y Amat, es anónima y se ha tomado prestado de la fiesta alcoyana. La Embajada Cristiana es obra original del poeta de nuestra ciudad Francisco Laliga Gorgues. Son textos de corte romántico que manifiestan un sentido patriótico enraizado en el pueblo.
Desde hace unos años, antes del acto de las Embajadas, se recita un texto divulgador de los verdaderos hechos históricos acaecidos en Elda en estos tiempos de la Reconquista, obra del historiador local Antonio Poveda Navarro.
La Fiesta de Moros y Cristianos de Elda tiene ya una riqueza musical propia. El Certamen de Música Festera, que ha llegado a su XXV edición en el año 2010, ha hecho que cada comparsa tenga su pasodoble o marcha, además de otros elementos de la Fiesta como el propio Santo, los embajadores, el castillo, las sedes de Junta Central…etc. y muchas escuadras y festeros de pro a quienes se les ha dedicado cantidad de piezas festeras de todo tipo.
La organización de la Fiesta de Moros y Cristianos de Elda recae en la Junta Central de Comparsas, que a través de sus instituciones Junta de Gobierno, Asamblea de Compromisarios, comisiones deciden todo lo que es propio de la Fiesta y su discurrir por las calles de Elda.
La fiesta de Elda es una de las de mayor participación de cuantas se celebran a lo largo de muchos pueblos de la Comunidad Valenciana. Más de 7.000 festeros inundan las calles de la ciudad durante los cinco días que duran las fiestas con su alegre deambular, acompañados de gran cantidad de bandas de música que con sus ritmos de pasodoble, marcha cristiana o marcha mora llevan la Fiesta a todos los rincones de la población. En cada calle hay un «cuartelillo» o sede de comparsa o de escuadra, donde los festeros atienden a todo el mundo sin importarles si son moros o cristianos, festeros o paisanos, eldenses o forasteros. Todo aquel que entra en uno de estos locales y los hay que son verdaderas maravillas por su decoración ambiental puede comprobar la magia de esta Fiesta, la generosidad sin límites de sus festeros, la camaradería y ambiente de convivencia sana y sincera que reina por doquier. El ambiente, de día y de noche ininterrumpidamente, rompe todos los moldes imaginables de cualquier concepción que se tenga de unas fiestas de este tipo y atrae a muchísimos visitantes que comparten el espectáculo de los desfiles, las verbenas nocturnas en calles y jardines y el ambiente festero y festivo que se respira en cada rincón de la ciudad.
Casi todo el mundo viste de alguna manera el traje de su comparsa, de moro, cristiano, contrabandista, estudiante, zíngaro o pirata; unos, los festeros que pertenecen a alguna de estas comparsas, de manera más ortodoxa, otros, la inmensa mayoría vistiendo alguna prenda característica de los distintos trajes para poder así estar más embebido del ambiente y el espíritu de esta maravillosa Fiesta de Moros y Cristianos.
Actos Festeros
Miércoles
23.00 Pregón desde el Castillo de Embajadas, en la Plaza de la Constitución. Al término de este, castillo de fuegos artificiales.
Jueves
20.00 Entrada de Bandas desde la Plaza del Zapatero hasta la Plaza de la Constitución. Desfilan una banda por cada comparsa, y al término de la entrada se toca el pasodoble Idella, que es coreado por los miles de asistentes.
24.00 Retreta. Desfile en el que solo una parte de los festeros, vestidos de traje oficial, realizan unos pasacalles de carácter festivo, alegre e informal.
Viernes
11.30 Traslado del Santo San Antón, desde su ermita hasta la Iglesia de Santa Ana.
19.00 Desfile Infantil, donde desfilan solo los niños de ambos bandos.
24.00 Embajá de la Calle del Marqués. Acto extraoficial pero muy popular, de carácter humorístico.
Sábado
10.00 Alardo de arcabucería de ambos bandos por calles de la ciudad.
11.30 Estafeta y Embajada Mora. Tras la lucha se produce la conquista mora del castillo.
18.00 Entrada Cristiana, con la participación de todos los festeros de las 9 comparsas, abriendo el desfile el bando cristiano.
Domingo
8.00 Diana. Desfile en el que festeros de traje oficial, acompañados de bandas de música, con el objetivo de "despertar" y llamar a los actos festeros.
11.30 Ofrenda de Flores en la puerta de la Iglesia de Santa Ana.
12.30 Misa Mayor presidida por San Antón, también en la Iglesia de Santa Ana.
18.00 Entrada Mora, con la participación de todos los festeros, abriendo el desfile el bando moro.
Lunes
10.00 Alardo de arcabucería de ambos bandos por calles de la ciudad.
11.30 Estafeta y Embajada Cristiana. Tras la batalla, reconquista del castillo por los cristianos.
18.30 Procesión de San Antón. A su fin, traslado del santo de vuelta a su ermita, y disparo de fuegos artificiales como cierre de las fiestas