Luzia Moreira

No te comas la vida con tenedor y cuchillo. Untarte a ti mismo.

El final de la esperanza es el principio de la muerte.

Cuando hagas el bien, hazlo poco a poco. Cuando vayas a hacer el mal, hazlo todo a la vez.

Hagas lo que hagas, no te felicites demasiado ni seas demasiado duro contigo mismo.
Tus elecciones siempre tienen la mitad de posibilidades de éxito.
Es así para todos.

Pero mientras no puede haber dolor
Donde falta la esperanza, me esconde
el Amor un mal que mata y no se ve.

Que dias me has puesto en el alma
Y no se que, que nace no se donde,
Viene no se como, y duele no se porque.

Un líder es un vendedor de esperanza.

Nadie es tan viejo que no crea que puede vivir un año más.

Para evadir la critica, no haga nada, no diga nada y sea nada.

Hazme tener el coraje de enfrentarme a mí mismo. Hazme saber cómo quedarme sin nada y aún así sentir que estoy lleno de todo. Recibe en tus brazos mi pecado de pensar.

Créame, sucederá cualquier día, en cualquier momento, alguien lo verá, incluso si está sin maquillaje, sudoroso, desordenado, despeinado. El hombre famoso en tu vida te verá... Confía en mí, o en ti, eh.

Haz que tu ausencia sea lo suficientemente larga para que alguien te extrañe, pero no demasiado para que alguien no aprenda a vivir sin ti.

Cree en ti mismo, porque hasta tu sombra te deja en la oscuridad.

Mantén la mirada fija en un ideal sublime y lucha siempre por lo que quieres, porque solo los débiles se rinden y solo los que luchan son dignos de la vida.

Yo aprendí.
Que soy más fuerte de lo que imaginaba...
Que puedo llegar más lejos después de pensar que ya no podía más...
Que la vida realmente tiene valor y yo tengo valor frente a la vida!

Haz tu parte y no te preocupes por los demás. Cree que Dios también les habla a ellos, y que ellos están tan comprometidos como tú en descubrir el sentido de la vida.

Es horrible ver la agonía de la esperanza.

Cualquier cosa que tu mano encuentre para hacer, hazlo con todo tu corazón.

Afilé mi cuchillo de ambición venenosa. Pero para la codicia insostenible, el cuchillo quedó sin filo.

Si quieres triunfar en la vida, haz de la perseverancia tu mejor amiga; por experiencia, su asesor; de la prudencia, su hermano mayor; y la esperanza, tu ángel de la guarda.

¡Haz tu mejor esfuerzo, en la condición que tienes, mientras no tengas mejores condiciones, para hacerlo aún mejor!

¡Vivir el presente!
¡Aproveche la oportunidad hoy!
¡Hazlo hoy!
¡No te dejes morir lentamente!

Créetelo y no te expliques
porque pocos lo entenderán:
sólo se entiende un sueño
si el soñador eres tú.