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Te amo o al menos eso creo ¿Qué es el amor? Te amo, o al menos eso creo. ¿Qué implica el amor? No sé cómo llamarlo, pero desde que empecé a sentir algo más que amistad, desde que te perdí, sin ti no estoy vacío, estoy desolado. Tú no me hacías feliz, me hacías dichoso. No preguntes por qué, tampoco te lleves el mérito, no eres la primera persona ni serás la última que me pone así. Simplemente es la intensidad que siento cuando siento. Y así, aunque no tengo ninguna razón para seguir sintiendo lo que siento, lo sigo haciendo. Por eso, ayúdame con esto y no me sonrías tanto, a veces olvido que no debo mirarte y otras tantas lo recuerdo pero no puedo evitarlo. Deja de aparecer en mi mente, cuando estás cerca te oigo más que a mis propios pensamientos. Sé que no puedo ser tu amigo y mucho menos tu amante, sé que no debo sentir esto, y sé que es mi error y lo corregiré. Pero ¿por qué me siento tan fuerte cuando no estás, pero soy tan pequeño cerca tuyo? ¿Qué es el amor? Te amo, o al menos eso creo. ¿Qué implica el amor? ¿Es tener un confidente que te escuche atentamente? ¿Tener una mano que no sea la tuya la cual tomar? ¿Tener unos brazos que puedan rodearte cuando lo necesites? O al menos es lo que eso veo en ella cuando lo ve a él y lo que veo en él cuando la ve a ella. No puedo ser ninguno de los dos, desearía que me viera así, pero lo sé, eso no pasará, aun así, me gusta verle así, irradiando amor. Aprendí que uno no se queda con quién más ama, porque me cuesta imaginar que te pueda amar más que yo. Aunque si tomaras mi mano, siempre me preguntaría si realmente es amor. Tal vez si te amo demasiado, pero entiendo que es hora de empezar a solo quererte. No ayuda que en mis sueños estamos juntos, empezando un largo futuro juntos. A pesar de todo, qué bonito es el amor. Es indudablemente bonito cuando lo ves reflejado en su mirada, aunque no es a ti a quien mira. El amor te hace sentir vivo y después te

¿Qué tan normal es? Qué tan normal es me pregunto yo, seguir extrañando a alguien que ya se fue de tu vida. ¿Existirá algún plazo hasta donde me es permitido llorar sin que me digan que ya debería superarlo? ¿Y si es así, cuál es? ¿No importa nada cuánto tiempo y cuánto amé a esa persona? ¿Ellos saben realmente lo que yo sentí y lo que yo viví? Qué tan normal es revisar mis mensajes y ver desilusionado que no me llegan los suyos, aún sabiendo que nunca más volverán. Qué tan normal es escribir poemas a la misma persona, ¿y cuál es el límite que no debería pasar? Qué tan normal es ver esa sonrisa suya una y otra vez, sabiendo que no seré nunca más la causa de esa sonrisa. Pero bueno, ¿quién decide qué es normal y qué no? Y qué tal si yo soy el normal y ellos no. Al final, qué importa lo que es normal o no cuando lo único que yo quiero es sentir mi dolor. Dolor que no me dejaron sentir porque “no es normal”. Autor: Josue Choque

Una mentira más Dicen que las mentiras duelen cuando vienen de alguien que amas y aunque me mentiste todo este tiempo, solo te pido una cosa: una mentira más. Miénteme una vez más y dime que estaré bien, que lo superaré y seré feliz. Miénteme y dime que no serás en quién pienso cuando me voy a acostar. Miénteme y dime que no fui solo un pasatiempo, un juego, un error. Miénteme y asegurarme que encontraré a alguien mejor que me hará olvidar de ti. Vamos, miénteme como cuando decías que me amabas, porque estoy seguro que al menos una vez, fue real... Autor: Josue Choque

Amor y celos Quería contarle que ese día vi el amor en sus ojos, y por primera vez sentí que son los celos. Nunca vi a nadie que mirara a alguien como lo hacía usted a ese joven, nunca creí querer ser otra persona, y menos en ese momento, querer ser él. Él tan galán, apuesto y bobo; usted tan hermosa, gentil e inteligente. Mirándose el uno al otro, como si no existiera nadie más, que ustedes dos. Yo no esperaba enamorarme de usted, tampoco que vinieran los celos a confirmarme lo que me estaba costando aceptar: sí la amo. Fue precioso ver esos ojos suyos de enamorada, fue doloroso no ser yo a quien usted observaba. Amo verla sonreír, y me aterra pensar que alguien más lo hará por mí. La quiero, pero no la quiero para él. No me malentienda, deseo que sea feliz, ya sea conmigo o sin mí; pero no comprendo: ¿por qué él? Quizás no quise jugar con mis sentimientos y menos con los suyos. Me acostumbré a vivir cada día sin pensar en nadie más; mientras otro cada día la enamoraba, yo en la calle solo, andaba. Si debí ser más atento con usted, o correr hacía su puerta y decirle toda la verdad en vez de escribir este delirio de amor, no lo sé. Solo entendí ese día que aunque no la tenía, la perdí… Autor: Josue Choque