Dr. Boza

10 de agosto de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

https://open.spotify.com/episode/1XThXUXB064niMCHmRfRj2?si=6aabc2993e064487

Ha sido un programa de radio súper interesante. Primero porque el tema que hemos tratado despierta muchas inquietudes y han sido muchas las observaciones y los comentarios favorables que hemos recibido por diferentes medios. Segundo, porque en buena compañía siempre existe la oportunidad de pasarla bien, explorando juntos esto que llamamos vida y que constituye un don milagroso del que poco logramos comprender.

Alex Reyes nos contó un poco sobre su accidente y de cómo, después de pasar semanas en coma y con un diagnóstico de estado vegetativo prolongado, los médicos lo daban por mu**to, estando él con el cráneo hundido y sin brazos. Pero su historia no se quedó ahí. Su historia no es la del “pobrecito” que perdió algunas facultades y que se sienta a la orilla del caño a llorar su desventura. Su historia es la del hombre, la del esposo, la del padre, la del hijo, la del hermano, que cada día se levanta tempranito para saludar a su bella esposa y a su familia, para irse a entrenar, para ordenar la mente, para fijarse metas y para sentarse a desayunar. Porque Alex sigue viviendo como podemos vivir todos: con ilusión, con admiración, con asombro, pero, sobre todo, con gratitud.

Naty Alfaro nos dio la buena noticia de que el podcast del programa va creciendo paulatinamente y que ya tienen 6 episodios publicados. En este sexto episodio tengo el privilegio de hablar sobre los adultos mayores y sobre cómo podemos crear una vida llena de calidad y de momentos significativos, en medio de los cambios, de las transformaciones y de las pérdidas.

Por supuesto, Juan José Andrade, dueño de la cancha y señor del micrófono, ya nos está invitando a todos para que los acompañemos el sábado entrante, en la fiesta de aniversario de Te Presento el Presente.

9 de agosto de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

En una familia completamente disfuncional, que vive en un barrio violento y peligroso, existe una chica que es la hija del medio. Le cuesta mucho sacar buenas notas en el colegio, porque en la casa es imposible estudiar y cuando está allí la tratan como si fuera la empleada de todos, exigiéndole todo tipo de labores y de supuestas obligaciones. Varios de sus hermanos han tenido problemas con la Justicia y sus dos hermanas adolescentes han sido ya introducidas en el mundo del abuso y de la drogadicción. Ella no, nuestra chica no. Ella sigue manteniéndose al margen de todo, estudiando, aprendiendo, buscando alternativas de vida y de trabajo. Ella es una guerrera resiliente, la única de su familia, una de las pocas en toda la vecindad.

¿Qué es la resiliencia? ¿Qué significa que el espíritu de una persona sea mucho más fuerte que toda adversidad y que la persona se supere, siga adelante, alcance sus metas y sea una persona de bien y de honor?

Mañana vamos a hablar un poco de eso, de cuando el destino te agarra y te zarandea, dejándote sin aire y casi sin vida; de cuando te levantás como ave fénix y tomás tus propias decisiones con nuevas metas muy en alto.

Acompañanos mañana sábado a las 8:00 am en el programa Te Presento el Presente, por Teletica Radio 91.5 FM.

3 de agosto de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

La vida es un regalo maravilloso para la mayoría de nosotros, pero para muchos costarricenses es un martirio insoportable que es mejor acabar.

Cada mes de este año 2024 se han recibido 300 reportes de tentativa de suicidio en jóvenes con edades entre los 10 y los 19 años. A eso habrá que sumarle el número de adultos mayores de 40 años que sí logran quitarse la vida semana tras semana.
¿Qué clase de vida pueden estar llevando estas personas? ¿Qué dolor en el alma pueden estar soportando para que no existan alternativa a intentar matarse o a hacerlo? Este es un asunto del que tenemos que ponernos a hablar con mucho más compasión y tenemos que desarrollar más y mejores habilidades para detectar qué jóvenes están en riesgo y corregir el porqué.

Hace algunos años tuve la oportunidad de estar en Edimburgo, la capital de Escocia, y visitar el puente de los suicidas. Era el equivalente de un par de puentes que tenemos en el Valle Central y que durante mucho tiempo fueron los elegidos por nuestros suicidas. En aquel puente se hizo de todo: se pusieron cámaras de vigilancia, se colocaron redes metálicas, mallas y postes, vigilancia policíaca… Nada logró controlar el problema, los chicos se seguían suicidando. Un día de tantos alguien tuvo una idea genial y colocaron carteles ofreciendo ayuda cada pocos metros y además instalaron un teléfono para pedir auxilio. ¡Eso sí dio buenos resultados! Hablar con los potenciales suicidas fue lo que hizo la diferencia, escucharles, estar con ellos, acompañarles en su dolor y buscar juntos posibles salidas, posibles soluciones.

Tenemos que desarrollar ya la capacidad de detectar conductas sospechosas y ponernos a hablar con las personas, invitarles a que compartan sus sufrimientos, que sepan que no están solas. En el programa Te Presento el Presente hoy vamos a hablar de eso. ¡Acompañanos!

2 de agosto de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

¡Qué hermosos y llenos de esperanzas e ilusiones son los nuevos comienzos! Redefinirse, decidir nuevos caminos, forjar nuevos destinos, a partir de aquello que te hace feliz, de todo lo que te lleva a sentirte realizado en la vida. La vida es un regalo que hemos recibido y su propósito ulterior sigue siendo un misterio para nosotros, pero en gran medida lo que hagamos en ella es nuestra decisión.

La expresión más bella que escuché al respecto fue la que pronunció Joseph Campbell, un famoso profesor de literatura estadounidense. Él dijo en una conferencia magistral: “¡Dejen de preguntarse cuál es el significado de la vida! — dijo el profesor — “La vida no tiene un significado, porque ¿cuál sería el significado de una rosa?”

Nuestro cerebro, en su afán de lograr seguridad, en su afán de aprehender la vida, crea esta necesidad de ponerle un significado a todo, de explicar las cosas con palabras y con odiosas etiquetas. Sin embargo, se puede vivir muy bien sin etiquetar personas, cosas y lugares.

Como parte de un nuevo proyecto de comunicación, hoy he sido invitado a conversar en *Extra Radio 92.3 FM a las 2:00 pm*, sobre los proyectos de vida, sobre la salud integral y sobre cómo podemos desarrollar estilos de vida que potencien todas nuestras cualidades. Esta invitación me llena de mucha alegría porque el Grupo Extra está creando una nueva plataforma de radio, redes sociales y televisión, que busca no solo informar sino aportar también su grano de arena para ayudarnos a crear mejores proyectos ciudadanos y mejores proyectos familiares.

Te invito a que nos acompañés en un pequeño y agradable programa a las *2 de la tarde del día de hoy*. Agradeceré tus comentarios y tu reporte de sintonía.

21 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Este próximo viernes 26 tendremos la inauguración de la 33ava edición de los Juegos Olímpicos modernos. Francia siempre ha sido un lugar donde las reglas se modifican, acercándonos cada vez más a los ideales de libertad, igualdad y fraternidad. En los primeros Juegos, en Atenas (Grecia) en 1896, no hubo participación de atletas femeninas. Aquella fue una época en la que la participación de mujeres en competencias deportivas era mal vista, considerándose algo “indecente”.

En los segundos Juegos Olímpicos, en 1900, también en París, se incorporaron 22 deportistas femeninas y con el paso del tiempo — más de un siglo —, la cantidad de atletas femeninas ha llegado a ser equivalente a la de atletas masculinos. Este año habrá 5,250 atletas de cada s**o, para un gran total de 10,500 competidores de todo el mundo. En París 2024 se vivirá, por primera vez, la completa equivalencia numérica entre los s**os.

Me encanta el logo de París 2024, aunque debo confesar que no le había puesto mayor interés hasta estos últimos días. Lo voy a describir con mis propias palabras. El logo es redondo y dorado, como una medalla de oro. En la base surge una llama con tres picos, representando el famoso fuego olímpico. Entre las llamas, aparecen un par de labios en oro, que dibujan una boca femenina. Cuando se observa el conjunto, queda claro que el logo representa la cabeza de una mujer: ¡es el rostro de Marianne!

Para los franceses, Marianne es la mujer que simboliza la República Francesa, con su historia, con sus ideales democráticos y con su espíritu inquebrantable de creatividad y de humanismo. Marianne es símbolo de fraternidad, de generosidad y de la capacidad para compartir. En el deporte, se nos recuerda, se puede vivir intensamente aquello que en la política no hemos sido capaces de defender. En Francia, la patria es una mujer, guerrera y generosa, que no teme luchar por la defensa de los valores morales y éticos que integran la democracia.

18 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Hace muchos muchos años, encontré en el videoclub del barrio una película protagonizada por Jodie Foster (Contacto, 1985). Ella hacía el papel de una científica de altísimo nivel que estaba buscando señales de vida inteligente en el universo. Su mayor sorpresa fue lograrlo y después de mil eventos increíbles Jodie termina viajando en el espacio a través de “agujeros de gusano”. De esa manera pudo observar galaxias distantes y otras maravillas, como el nacimiento de una estrella. De cara a estos fenómenos estelares, Jodie exclamó casi en lágrimas y con voz quebrada “es demasiado bello para expresarlo, se necesitaría la voz de un poeta para poder describir lo que veo”. Claro que esas no fueron las palabras exactas del diálogo — esa peli la ví hace décadas — pero la conclusión de Jodie sí es la que escuché. Para describir algo inmensamente bello y conmovedor, las palabras de un científico son inexactas, las palabras de una experta en telecomunicaciones interestelares resultan torpes. Hay fenómenos en la vida y vivencias trascendentales que no calzan en el lenguaje científico.

La voz de un poeta es la que nos dice cosas maravillosas sin decirlas. A través de la belleza del lenguaje poético se transmiten imágenes, sensaciones, emociones y colores que de ninguna manera podríamos describir con el lenguaje cotidiano.

No todos somos poetas. Pero todos podremos comprender y amar la poesía si somos educados correctamente. La sensibilidad de un haiku japonés, por ejemplo, que en pocas sílabas describe estaciones del año, climas, reacciones corporales, valores morales y principios estéticos, solo puede ser apreciada a cabalidad con una profunda sensibilidad y respeto por la cultura japonesa.

La poesía se lee, se vive y se aprehende, en el aula, en el hogar, en sociedad, pero también se descubre dentro de uno mismo. Para ello, necesitamos fortalecer un tipo de educación y de autoeducación que se basen en el amor y en el respeto al ser humano y a la Creación.

17 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

En una conversación con amigos redescubrí recientemente la obra escrita del italiano Nuccio Ordine, de quien hace algún tiempo leí el librito “La utilidad de lo inútil”.

Más o menos en el 2016 se publicó otro libro suyo intitulado “Clásicos para la vida”. En esta obra, Ordine elabora un listado de libros cuya lectura es fundamental para adquirir una visión integral de nuestras culturas y civilizaciones, es decir, lo que podríamos conocer para tener una educación humanista integral.

Una de las obras enlistadas es “El mercado de Piazza Navona” escrita en el siglo 19 por un autor de apellido Belli. El señor Ordine transcribe algunos párrafos de aquella obra antigua y con toda franqueza nos ilustra cómo ‘el poeta [Belli] cifra la vieja hostilidad de los detentadores del poder hacia la cultura y el conocimiento: dejar al pueblo en la ignorancia lo hace todo más fácil’. Es la ruta de moda recortar presupuestos, asfixiar a artistas y a humanistas.

¿Qué significado tiene esto en la Costa Rica del siglo 21? Pues exactamente lo mismo que hace 200 años: para el poder formal la educación en las artes y en el humanismo es despreciable porque no produce dinero, porque no produce burócratas. Esa es la posición utilitaria del que solo ve el signo de colones en los planes de estudio. Es la opinión absurda de quienes piensan que solo en la ciencia, en la tecnología, en las ingenierías y en la matemática, se encuentran las herramientas para mejorar la sociedad.

¡Nada de eso es cierto!

La música, la pintura, la escultura — ¡todas las artes! — son tan importantes para nuestra juventud como lo son las ciencias. La salud es integral, incluye al alma y al espíritu. Una sociedad que deja de alimentar el espíritu y de ennoblecer el alma, puede gritar a los 4 vientos las palabras de Belli: ‘¡Hombres del porvenir, ya estáis jodidos! [Ommini da vienì, sete futtutí]’.

16 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Sigo con las recomendaciones para la romería.

9. Por supuesto que personas con necesidades especiales de desplazamiento y transporte querrán también hacer la romería. Ojalá que la planificación de la logística sea adecuada tomando en cuenta la hidratación, alimentación, protección solar, uso de servicios sanitarios e ingreso a la basílica.

10. Dejá tu mascota en la casa. Yo sé que te sentís súper orgulloso de la belleza de perritos que tenés y de lo bien entrenados que están para correr “trail” con vos. Mejor dejalos en casa.

11. El camino a la basílica no es un basurero municipal. Incluso en el caso de que comprés botellas reciclables, de que todos tus envoltorios sean amigables con el entorno, de que tu comida sea de la más alta calidad nutricional, nada te cuesta guardar los desechos en tu bolso o una bolsa especial que podés cargar con vos para luego depositar todo en un basurero que no esté lleno a reventar.

12. No seás tagarote. Tené paciencia a la hora de hacer fila, a la hora de entrar a sitios públicos, a la hora de subir a medios de transporte colectivo. Nada más contradictorio que hacer la romería con algún propósito cristiano, para luego pisotear la dignidad de los menos aventados que vos. No tenés que demostrar que sos superior.

13. Tu vida y el amor que demostrás por los demás día tras día tienen un valor espiritual mucho más profundo que el hecho de hacer la romería.

14. Ojalá que de camino recordés que se hace la romería para honrar a una mujer que logró vivir en santidad y que como madre vio sufrir a su hijo de manera horrible. Es una actividad que dignifica y venera la figura de la mujer-madre. ¡Pelá el ojo!

(Foto VaticanNews.va)

15 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Continúo con algunas recomendaciones para una romería tranquila y exitosa.

4. Caminar al aire libre es saludable, pero hacerlo en asfalto, en terreno quebrado, en aceras con huecos y con desniveles, puede ser un atentado contra la salud de los pies, de los tobillos y de las rodillas. Quisiera insistir en la importancia de prepararse adecuadamente para este tipo de trayecto. Hacer muchas caminatas, incrementando progresivamente la longitud y la complejidad de la ruta, es una decisión inteligente y precavida.

5. Caminar en grupo es siempre más recomendable, sobre todo si se comparten las formas de pensar y las formas de interpretar la romería. Además de un elemento de integración social, caminar en grupo aumenta los niveles de seguridad, tanto desde una perspectiva física como contra algún amigo de lo ajeno.

6. La romería es una manifestación de respeto a los valores católicos del país, pero también se puede hacer la romería por muchas razones profundamente personales. Es importante demostrar respeto a los diferentes grupos que caminan, al tiempo que también se espera que nuestro grupo sea respetado.

7. La romería no es un desfile de modas ni tampoco es una pasarela de conquista erótica. Sobre todo si se aspira a ingresar a la Basílica es importante guardar el decoro y el pudor.

8. Llevá tus meriendas o dinero en efectivo para que comprés algunas frutas o bocadillos en sitios seguros. Lavate las manos antes y después de comer. Asegurate de que los alimentos que comprés estén libres de contaminación y que la persona que los manipula tenga los cuidados mínimos para asegurar tu bienestar.

Una onza de prevención vale más que una tonelada de curación. Planificá con calma y mucho detalle tu romería.

(Foto CRHoy.com)

14 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Después del nacimiento de Andrey, el primogénito, Ivannia siguió el control que le agendaron en la clínica. De vez en cuando salía con la presión un poco alta, lo que achacaba al montón de problemas que tenían en el hogar y al hecho de que la plata nunca alcanzaba. Cada mes tenían exactamente los mismos problemas para pagar el alquiler, el agua, la luz, los teléfonos y el préstamo que le hicieron a doña Petra para comprar unos electrodomésticos y la computadora para el negocio de Ramón.

Con el tiempo, ya no hubo excusas que le quedaran: el médico la declaró hipertensa y con los medicamentos que le recetaron se sentía súper bien. Al principio le dio un poco de miedo que las pastillas afectaran al bebé, que estaba todavía con lactancia materna, pero el médico fue muy insistente: su bebé estaba seguro.

Conforme se fueron acomodando las cosas, a Ivannia le quedó muy claro que era necesario cuidarse bien — ¡cuidarse muy bien! — para asegurarse de que su hijo la tendría muchos años a su lado, viéndolo crecer cada día más parecido a Ramoncillo y con una inteligencia que la dejaba asustada. Un día de tantos se sentó con una tacita de manzanilla, viendo a su hijo durmiendo en la cuna. Algo sucedió ese día, fue como si una luz se le encendiera por dentro: se prometió ponerse en forma, caminar y meterse al gimnasio de Lucas, tomarse el tratamiento que le mandaran los médicos y empezar a alimentarse mejor. Iba a cuidarse en serio, por su familia y para ver si lograba que Ramón también pusiera de su parte. Él llegaba del trabajo a ver tele, el futbol era su pasión y tomarse unas cervezas con los amigos también. “Estoy muy estresado con tanto trabajo y con tanta responsabilidad. Estar con los amigos me ayuda a desahogarme”.

(Continuará)

13 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Como toda caminata, la romería exige tener un buen grado de preparación. Estar en forma y tener semanas o meses de práctica sin duda es algo muy acertado. Caminar a lo loco, imaginando que se trata de una caminadilla a la pulpería, puede colocarnos en riesgo de torceduras, ampollas en los pies, deshidratación y golpes de calor.

1. Usá un buen par de zapatos, que te ofrezcan protección para diferentes tipos de terreno. Con buena suela, un buen ajuste de los cordones (sin asfixiarte los pies) y por lo menos 1 cm de espacio para que los pies se hinchen un poco y crezcan durante el esfuerzo. Muchas uñas se han perdido por el detalle de usar zapatos demasiado bien ajustados, como los que utilizamos a diario en la casa.

2. Protección solar. Siempre me sorprende la forma en la que la gente se descuida y se expone inapropiadamente al sol. Si vas hacia el este en tu caminata, el sol te va a quedar de frente desde temprano y hasta el mediodía. Utilizá un buen sombrero de ala ancha o una buena gorra que te proteja mucho. Usá lentes oscuros y ponete una buena cantidad de bloqueador solar. Recordá que también hay que proteger las orejas, los brazos y la piel que quede al descubierto.

3. Hidratación suficiente para el camino. A lo largo de todo el trayecto vas a encontrar muchas pulpes y ventas improvisadas que te van a ofrecer agua, refrescos y bebidas hidratantes. Una buena hidratación te va a proteger en contra del golpe de calor, va a enfriar tus músculos sobrecalentados y va a mantener tus riñones sanos. Si te da pereza usar servicios sanitarios públicos, comprate unas toallas de papel de esas que se ponen en la taza y promové la higiene del lugar.

Más vale prevenir que lamentar.

(Foto SanCarlosDigital.com)

12 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Playa Penca 2.
Pronto me di cuenta de que las fotos que me enseñó Jorge no tenían nada que ver con la playa que visitamos. Luego recordé algo que mencionó: “Es la entrada que está a la izquierda antes de subir a Las Catalinas”. ¡Claro, eso fue! Nos equivocamos de Penca.

Buscar de nuevo en el mapa y después en Waze. ¡Ahí estaba! Juega de nuevo, chunchero en el carro y todos para la otra Playa Penca. Llegar fue facilísimo, el carro llegó literalmente hasta la playa, pero nos quedamos afuerita, a la sombra de una tapia. La arena igual de clarita e invitante; el mar sereno, pero mucho más extenso y con montones de islotes e islitas allá adentro. Un par de botes, muchos nadadores, algunos turistas protegidos bajo el arbolote de la entrada, ningún vendedor de nada, ninguna pulpería con botellas de agua o de la que fuera, nadie vendiendo ceviche ni vigorón. Ese lugar es un paraíso para los portadores de hieleras y de cajas de picnic, pero desolada belleza para los que llevábamos de todo para el mar, pero nada para la panza.

Ni un solo arbolito disponible, ni una sola sombra para poner las sillitas, y el toldo que siempre llevamos… se quedó en el garaje. Nadie acató a meterlo al carro. Las sillas sí iban todas, junto con la bolsa de cremas bronceadoras y de protector solar. Era pasado el mediodía y el sol caía perpendicular sobre hombros y nuca. Una invitación a una merecida reprimenda de mis colegas dermatólogos y un par de viajes a la farmacia del barrio para comprar leche magnesia contra el ardor de la piel quemada. No, nadie quería eso. Dimos media vuelta, le agradecimos al guachimán que nos cuidara el carro y nos fuimos hacia Playa Danta.

¡Ahí sí! Vista panorámica desde la loma tanto de Danta, como de Dantica; almuerzo maravilloso; copa de vino Sauvignon Blanc; interpretación local de un tiramisú con ínfulas tropicales… y un espresso tinta pura para cerrar. No nos metimos al mar, pero después de semejante almuerzo mejor era evitar una congestión.

11 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Playa Penca 1.
Las fotografías que me enseñó Jorge Benavides de Playa Penca eran extraordinarias: un mar azul con olas serenas y una playa de arena clara que aumentaba la luminosidad del lugar. Por supuesto que de inmediato me imaginé con la tabla de surf y con el remo disfrutando de aquellas aguas transparentes y por supuesto, también, pude imaginar que cerca de las rocas de allá al fondo de la bahía podría hacer snorkeling.

Temprano salimos guiados por Waze y al llegar a la loma descubrimos con asombro un megaproyecto hotelero que está siendo desarrollado por la cadena Waldorf-Astoria. Edificio tras edificio, calles adoquinadas, cunetas perfectamente realizadas, islas en la carretera para posibles ornatos florales y mil etcéteras. Sin duda va a ser algo espectacular. El Pacífico y el cielo convergen en un horizonte limpio.

En la cima se nos acabó la carretera. En medio de dos mallas de sarán pudimos ver el diminuto rotulito que tímidamente anunciaba “Acceso Playa Penca”. Seguimos el sendero de tierra y súbitamente se transformó en un pasadizo con suelo de grava y con escalones, confinado a ambos lados por una cerca prefabricada, blanca y hermosa, semejante a una cerca de tablones.

Pronto nos dimos cuenta de que el acceso para cualquier cosa con rodines o con ruedas era una invitación a su destrucción. Para peores, bajar varias tablas de surf inflables, sillas para tomar el sol, botellones de agua, y talvez incluso una hielera, era imposible para dos personas. Casi 800 metros de escalones de alturas desiguales, algunos para arriba, muchos para abajo, convirtieron el recorrido en una prueba de equilibrio, de resistencia cardiopulmonar y de devoción a la Naturaleza. Que quede claro: ¡nada nos detuvo! Bajamos y subimos y bajamos hasta que llegamos a Playa Penca.

¡La playa, maravillosa! ¡El mar, insuperable! ¡Las olas, más suaves no podían ser!

Pero, todos los chunches que llevábamos se quedaron en el carro y volver por ellos no era real. Nos fuimos de inmediato. Talvez otro día volvamos.

Desde el restaurante Sentido Norte, una vista especial para un día como hoy.

10 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

— Por favor, no te salgás del camino, amor.
— Está bien, pa.

Las palabras de Giovanny dirigiéndose a su hijo reverberaban aún en mi subconsciente. Una de las reglas más importantes del montañismo y del senderismo es precisamente esa: no salirse del camino demarcado, aunque se vean cosas maravillosas un poco más allá de lo permitido por la señalización de los guardaparques. Pero aquellos turistas me sonreían y me presentaban el celular con un claro gesto que significaba “¿Nos toma una foto, porfa?”. Era un poco incómodo tomarla desde el sendero, y decidí salirme un poco, para tener mejor ángulo y para poner las fumarolas en el fondo de la foto. ¡Sería una foto hermosa! El matorral se veía seguro, con unas cuantas piedras, un tronco caído cubierto de zacates y de plantitas con flores, y las ramas de un arbusto todo matón, de ramas delgaditas cubiertas de unas estructuras que parecían cachos de toro llenos de hormigas.

¡There you go! ¡Listo! La foto de concurso se había logrado y para estar seguro tomé tres de un solo tiro. Todos salieron sonrientes, las fumarolas aportaban un trasfondo volcánico de inminente peligro, las laderas del monte estaban cubiertas con una exuberante flora exótica y estoy seguro de que en medio de todo andaba un grupo de salamandras robando cámara. Por supuesto los turistas permanecieron anónimos y nunca supe ni sus nombres ni de dónde venían. De fijo su idioma no era el inglés, como tampoco lo era el español. ¿Checos?¿Croatas? Sepa cachis.

Con rara pericia volví al senderillo, pero antes de que me alejara de aquel escenario de triunfo artístico alguien gritó “Mae, Caliche, ¡vea esta vara!”, al tiempo que una serpiente terciopelo salía de debajo del tronco caído cubierto de zacates y de plantitas con flores, dirigiéndose a otros escenarios donde no hubiera tanta gente ruidosa.

“Por favor, no te salgás del camino…”
¡Joder!

9 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

Cada vez son más las personas que se vacunan contra la influenza y que me lo reportan por diferentes medios. Estoy seguro de que se sienten súper orgullosos de estar contribuyendo al bienestar de la población general y a su bienestar individual. Yo, profesionalmente, me siento muy orgulloso de verles construyendo responsabilidad ciudadana y compromiso social.

Algunas de las personas que se han vacunado me han reportado un poco de calentura como efecto secundario. Otras me han hablado de un poco de dolor pasajero en el sitio de punción, mientras que otras refieren que tuvieron cansancio y algunos síntomas de gripe. La gran mayoría, sin embargo, me están contando que la vacuna no les dio nada de efecto secundario y eso confirma que todos somos diferentes.

Yo creo que esa es una de las pruebas más interesantes de la diversidad humana: ante un mismo producto farmacéutico, todos mostramos reacciones colaterales muy diferentes y de diferente intensidad. Esa diferencia, sin embargo, no elimina la necesidad de ser mucho más exigentes en los controles de calidad de la elaboración de fármacos y que los estudios clínicos que justifican su uso sean diseñados con los más altos niveles de control científico y con los principios éticos más sólidos.

No todos los países tienen acceso a una cantidad de vacunas suficiente para asegurar algún grado mayor de bienestar de su población. Durante la pandemia, los tagarotes se apoderaron de grandes lotes de vacunas y se negaron rotundamente a donarlos o a venderlos a precios rebajados para proteger a los más pobres del mundo; a los países africanos, por ejemplo.

Somos una especie muy contradictoria. Tenemos la capacidad de erradicar virus y bacterias que ponen en peligro la vida de millones de personas, pero elegimos no hacerlo si no se cumplen las exigencias del mercado mundial. ¡Qué absurdo!

8 de julio de 2024
Dr. Marco Vinicio Boza Hernández

El comienzo fue recibir la invitación de Jurgen Ureña y de Emma Tristán para participar en su programa La Telaraña, que se inauguró muy cerca del día de mi cumpleaños, allá por el 2022. El reto fue preparar el tema para tener una conversación magnífica con Roxana Ávila, conocida dramaturga costarricense. Hablamos en el primer programa sobre el Arte de Curar, trayendo del pasado reminiscencias del teatro en la Antigua Grecia y de las diferentes metodologías dramáticas que han buscado curar el cuerpo a través de la sanación del alma y de la mente.

No había pasado mucho tiempo cuando llegó la segunda invitación. Esa vez hablamos de la risa, Natalia Monge (actriz, comediante) y yo. El humor y la curación de la enfermedad, el buen humor como elemento de salud y de bienestar. Muchas veces convertimos el dormitorio de un enfermo en un sitio oscuro y sombrío, cuando lo correcto es inundarlo de luz espiritual. Es un programa que también vale la pena escuchar y re-escuchar.

Una tercera invitación me llevó junto a Sussy Vargas (fotógrafa) a explorar el erotismo como una manifestación ética y estética del ser humano. El cuerpo humano también se puede convertir en instrumento o en símbolo para el deleite y para el bienestar. Miles de años de ideologías castrantes y debilitantes han convertido un ámbito sagrado del ser humano en una vulgaridad que se vende.

Hoy viene mi cuarta participación. Esta mañana de lunes, justo al dar las 7 am, estaremos desarrollando y celebrando el programa número 100 de La Telaraña. Me siento orgulloso de nuestros logros y les invito a escucharnos en Amplify Radio 95.5 FM. Será un programa de gran celebración, tendremos mucho que decir y por esa razón — estén avisados — el programa durará 86 minutos. Quedará registrado en línea y se podrá escuchar en tractos o de un solo tirón. ¡Acompañanos, por favor!