Latino/Hispanic Episcopal Ministries of Massachusetts

Nuevo Amanecer Conferencia 2024 - Formstack Nuevo Amanecer 2024 se llevará a cabo del 3 al 6 de junio en el Centro de Conferencias Kanuga, ubicado en 130 Kanuga Drive, Hendersonville, NC. 28739. La tarifa de inscripción cubre el alojamiento, las comidas, el programa y el transporte terrestre desde y hacia de los aeropuertos de

Bishop’s Search listening session in Spanish yesterday, facilitated by Deacon Rev. Ema Rosero, with Fr. Nicholas Myers of Epiphany Church as scribe: it was a Spirit-filled time together!

Homilía de Oración al Atardecer: HONRANDO A OSCAR ROMERO
Jueves 24 de Abril, 2022
Apocalipsis 7:13-17; Evangelio de Juan 12:23-33 Rev. Edgar A. Gutiérrez-Duarte

Hay momentos en nuestras vidas cuando de pronto algo nos impacta de tal manera, que abre para nosotros la conciencia clara del rumbo que hemos de tomar desde momento en adelante, rumbo que nos llevará al cumplimiento de nuestra misión en este mundo.
Para nuestro Señor Jesucristo, ese momento llego cuando le anunciaron que unos griegos habían llegado y estaban preguntando por él.
En ese instante, Jesús se da cuenta que la llegada de los griegos marca el comienzo de su pasión, de su jornada hacia el calvario, hacia su muerte, hacia su sacrificio por nosotros, y marca el comienzo también de nuestra redención. Por ello, Jesús dice, como escuchamos en la lectura del evangelio de Juan, estas palabras:
Ha llegado la hora de que el Hijo del hombre sea glorificado. Ciertamente les aseguro que, si el grano de trigo no cae en tierra y muere, se queda solo. Pero, si muere, produce mucho fruto.
Jesús tenía la opción de negarse a seguir adelante y escaparse, y evitar el compromiso y el dolor que le esperaba, de vivir el resto de su vida terrenal cómodamente y seguramente, pensando en sí mismo: pero El decide ponerse en manos del Padre y hacer su voluntad. El decide tomar el camino de la cruz para el bien de la humanidad entera, por el bien nuestro!
Oscar Romero también tuvo un momento decisivo en su vida como Arzobispo, en su vida como Sacerdote, en su vida como cristiano: Ese momento tuvo lugar cuando se enteró del as*****to de su amigo el Padre Rutilio Grande.
Hasta ese momento, Oscar, consagrado poco antes como Arzobispo, se había mantenido al margen de los conflictos políticos que azotaban al Salvador antes de la guerra, y se había distanciado e incluso censurado las actividades de sacerdotes que denunciaban los abusos de los campesinos por parte de los terratenientes, y como en el caso del Padre Rutilo Grande, que habían empezado a educar y a concientizar al pueblo de sus derechos a llevar una vida digna con libertad y sin opresión.
El as*****to de Rutilio Grande le abre los ojos: en ese momento Oscar se da cuenta que su responsabilidad como Arzobispo, como pastor de la iglesia, no es el favorecer a los poderosos tanto de la iglesia como del estado, no es el censurar las quejas y lamentos del pueblo oprimido para ayudar a mantener la armonía de las relaciones de la iglesia con los poderosos de su país, sino ser verdadero pastor de las ovejas puestas a su cargo por nuestro Señor Jesús, esas ovejas que estaban siendo silenciadas y asesinadas por el estado.
En ese momento Oscar ve claramente que la iglesia no es una institución a la que hay que proteger a toda costa, sino que la iglesia es el pueblo salvadoreño que está siendo crucificado día a día por los terratenientes y los gobernantes del país, pueblo que no tiene voz, pueblo que no tiene pastores verdaderos dispuestos a dar su vida por ellos, y decide ofrecerse como la voz de los sin voz y como el pastor, que siguiendo el ejemplo de nuestro Señor Jesucristo, se ofrece por sus ovejas.
Oscar, como Jesucristo, tuvo la opción de negarse a tomar ese camino, y hacer lo que la mayoría de sus compañeros jerarcas de la iglesia hicieron: mantenerse callado y aparte de la política, cuidar de su propia seguridad y no tomar riesgos, no exponerse al peligro de ser un clérigo más asesinado por las fuerzas del gobierno.
Pero Oscar decide obedecer a Jesús quien lo llama a denunciar los abusos y crímenes del gobierno, a exigir justicia para el pueblo, y a rogarle al ejército salvadoreño a dejar de obedecer a sus superiores y no matar más al pueblo, aunque esto le cueste su vida.
Y así, el 24 de Marzo de 1980, cuando predicaba su sermón durante la celebración de la Santa Misa, Oscar se convierte en Jesucristo para el pueblo salvadoreño al ser asesinado por elementos del gobierno.
Oscar dio su vida, al igual que Jesucristo, para que el pueblo tuviera vida; se entregó para que el pueblo tuviera libertad, se entregó dando testimonio de que el poder del amor de Dios vence al poder del odio, la opresión y la violencia, lo cual tuvo un gran impacto no solo en el pueblo del Salvador sino en toda la humanidad.
Oscar, al reconocer que la iglesia no es solamente la organización visible que le da liderazgo, sino es también y principalmente el pueblo que sigue a Cristo en busca de salvación, se dio cuenta que Jesús nos llama a ser pastores unos de otros, a abandonar nuestra comodidad y si es necesario nuestra seguridad por aquellos que más lo necesitan, por los desprotegidos y los sin voz, para llevarles no solo la luz del Evangelio sino para acompañarlos en solidaridad en sus luchas por redención y liberación.
Una vez, cuando le dijeron que su vida estaba en peligro, Oscar dijo: “Si me matan, yo resucitaré en el pueblo salvadoreño”.
Con esto quiso decir que la mejor forma de honrarlo es convirtiéndonos, cada uno de nosotros, en Oscar Romero, en instrumentos de la resurrección de Jesús para todo aquel que clame por ella, y en cualquier lugar del mundo donde se necesite.
Hace 42 años, en el momento del martirio de Oscar Romero, el pueblo salvadoreño era la iglesia martirizada, torturada y crucificada a manos de las fuerzas de la destrucción y la injusticia.
Hoy, mis hermanas y hermanos, en estos instantes, el pueblo de Ucrania es el cuerpo de Cristo siendo bombardeado, asesinado y crucificado, por esas mismas fuerzas demoniacas de la injusticia y la violencia.
Que Oscar Romero nos inspire a orar y apoyar en lo que podamos la causa del pueblo ucraniano, y la de todos dondequiera que hay dolor e injusticia, desde el Salvador hasta Ucrania, y en las calles de Chelsea y otros lugares de este país y del mundo donde el rebaño clama por pastores verdaderos que les ofrezcan el amor y la salvación y la resurrección de Cristo.
Amén.

St. Luke's-San Lucas vicar makes public witness to church's mission in "Chelsea Resilient" | Episcopal Diocese of Massachusetts What was formerly a blank brick wall on the Fifth Street side of 472 Broadway in Chelsea is now a colorful procession through the community's history.